Aida. Cura y limpieza profunda del hígado

Imagina que nunca tuvieses un día de descanso ni vacaciones y trabajaras de día y noche resolviendo problemas. Pues así se siente el cuando hay ciertos síntomas en nuestro cuerpo. El hígado es un órgano que participa en una larga lista de tareas como la depuración transformando gran cantidad de tóxicos en sustancias inofensivas, interviene en el metabolismo de glúcidos, azúcares, lipidos y protíinas y almacena vitaminas liposolubles como la A, d, E, entre otras muchas funciones, por lo que cuando esta débil y agotado todo el organismo en vredad lo resiente y se debilta.

¿Sabías que si tu hígado no está funcionando bien puedes padecer una larga lista de enfermedades?

Síntomas de un hígado enfermo:

  • Mala digestión, gases e inflamación abdominal
  • Nauseas y pérdida del apetito
  • Sobrepeso y aumento del colesterol nocivo en el organismo
  • Lengua pastosa y con manchas blancas
  • Mal aliento
  • Hipertensión
  • Dolores de cabeza
  • Diabetes
  • Cálculos biliares
  • Fiebres y predisposición a infecciones
  • Piel opaca, enferma y/o de apariencia amarilla
  • Piel enferma, hongos y manchas en la piel, comezón, piel enrojecida, envejecida, arrugada, opaca, etc.
  • Tumores, quistes y cáncer.
  • Orina muy oscura
  • Mal humor, cambios de humor sin causa aparente, mucha sensibilidad e irritación constante.
  • Depresión y cansancio crónico.
  • Mala memoria, falta de concentración en los demás, la persona parece ensimismada.

El hígado tiene que trabajar en exceso y esforzarse de más cuando se descuidan ciertos hábitos y se abusa del consumo de sustancias que en verdad lo dañan.

¿Qué enferma al hígado?

  • El consumo prolongado de medicamentos, sobredosis de los mismos (sobre todo el consumo de antibióticos y medicinas para el corazón y la diabetes, ansiolíticos y cortidoides, etc.)
  • Consumo excesivo de alcohol y drogas.
  • Una dieta frecuente con una mala combinación de alimentos, lo cual genera muchas toxinas en el cuerpo y una sobredosis de trabajo para el hígado.
  • Comer de más, cantidades grandes, o comer cuando no se tiene hambre.
  • El consumo excesivo de proteína animal, y la mala combinación de la proteína animal con otros alimentos (por ejemplo, carne con pasta, leche con harinas o pan, etc.)
  • Las grasas saturadas son en verdad una bomba para el hígado.
  • El consumo de azúcar blanca, ya que gran cantidad de alimentos la contienen y una de las funciones del hígado es convertir el azúcar en grasa o colesterol, lo cual provoca que suba el colesterol y que haya sobrepeso y un hígado en verdad agotado.
  • Alimentos con pesticidas y químicos, o añadidos con hormonas, endulzantes y colorantes artificiales.
  • Exceso de estrés, no dormir bien, y emociones como los celos, la envidia y la ira no entendida.

Dale unas vacaciones al hígado…

Si tienes algún síntoma o enfermedad antes mencionada, sin duda tu hígado necesita con urgencia unas vacaciones para que se recupere y retomes al regreso más consciencia de algunos hábitos.

Lo primero…

  • Planea una semana para que tu hígado descanse se recupere y repare, y empiece una nueva vida empezando esta cura con una despensa medicinal:
  • Un día antes de empezar la dieta compra una papaya o dos de buen tamaño, no tan maduras, te de diente de león o boldo, manzanas y ciruelas frescas, limones y variados vegetales como germinados, zanahorias, nopales, jengibre fresco, remolacha y apio. También checa si tienes linaza, aceite de oliva extravirgen, avena cruda, almendras, semillas de sésamo, cloruro de magnesio (opcional) y chía. Procura que todo esto sea orgánico, o lávalo muy bien en el caso de los vegetales para evitar pesticidas, etc. No uses ningún otro alimento que no esté en esta lista. No endulces con nada (ni sustitutos ni edulcorantes ni miel) ni uses sal fluorada o refinada, solo sal de mar o sal de grano.
  • Durante siete días debes empezar tomando en ayunas dos vasos de agua tibia con unas gotas de limón, luego entonces un te bien caliente de boldo o diente de león. Escoge solo uno de ellos para la dieta. Luego del te toma dos cucharadas de aceite de oliva extravirgen.
  • Después del te y aceite espera 20 minutos. Si vas a trabajar o estudiar temprano, toma el te recién te levantas y mientras te bañas o arreglas, habrán pasado ya 20 minutos. Luego entonces, preparas un plato de papaya grande y espolvoreas encima avena cruda, chía, sésamo y cinco almendras trozadas.
  • Llévate en un molde mas papaya solamente (sin agregar nada encima) por si te da hambre a media mañana, y una botella de agua con limón solamente, (sin azúcar) pues no comerás otra cosa sino hasta la hora de la comida.
  • Prepara una botella de litro de agua y bebe dos de estas botellas durante el día. Además, prepara un vaso de agua con una cucharadita de cloruro de magnesio y bébela a medio día.
  • A la hora de la comida te preparas ensaladas frescas con variados vegetales, todos crudos, siempre incluye lechuga y germinados, y agrega brécol crudo, zanahorias, jícama, jengibre reyado, etc. Haz tus propias combinaciones. Solo evita la col y la papa cruda. Prepara un gran plato de ensalada y adereza con aceite de oliva extra virgen, limón, sal de ajo, etc. OJO: No debes usar ningún otro ingrediente sino los indicados. Si te quedas con hambre come mas ensalada. Un día debes comer ensalada y el otro caldo de vegetales o sopa de lentejas con vegetales semi cocidos.
  • De colación a media tarde come manzanas sin cáscara o ciruelas frescas, escoge solo una de estas frutas y no la cambines con ninguna otra.
  • En la cena prepara avena con amaranto y papaya, o un plato grande de papaya con nuez picada encima y amaranto.
  • Antes de dormir: toma un te de laurel ligero con jengibre crudo en pedacitos, y mastica el jengibre y cómelo. El jengibre es una medicina para el hígado y para muchas enfermedades.
  • Durante el día bebe un jugo de zanahoria con una pizca de remolacha y aloe, una medicina para el hígado.
  • Esta dieta no incluye ninguna proteína animal, ni harinas ni azúcar de ningún tipo (ni light, que es pésima para la salud y daña el hígado severamente)

Durante una semana debes mantener esta dieta de cura del hígado. Si hay síntomas como dolor de estómago, diarrea, salpullido más fuerte, dolor de cabeza más agudo, etc., es que tu cuerpo está limpiando y movilizando toxinas (crisis curativa). En este caso, come un caldo grande de vegetales semicocidos con arroz y agrega una pizca de cúrcuma. Después de esta dieta, introduce alimentos poco a poco, pero evita consumir leche de vaca, carnes rojas y harinas por un tiempo.

Vacaciones de enojo, celos, envidia…

Para complementar esta dieta, trata de leer acerca del enojo y permite que el mundo circule sin querer controlar todo ni a todos, relájate y dale a tu hígado unas vacaciones de “no me importa”, y trata de dejar de esperar de los demás y de querer que funcionen todos a como tu consideras es correcto, pues esto tensa mucho el hígado. Recuerda que los demás tienen derecho a hacer las cosas a su modo, y a decir y pensar como mejor les conviene. No importa quién tiene la razón, sino poder hacer tu vida a tu modo y bajo tus criterios, y deja a los demás hacer su vida a su modo. Así que suelta la necesidad de tener la razón y enfócate en lo que te hace feliz, y si sientes mucho enojo con alguien o algo, ve a este enlace para desbaratar ese enojo de una vez:

por Eleykha (K. Laura Garcés )

Vivir SabiaMente

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