La respuesta a la pregunta es sí, el azúcar moreno es más sano que el refinado, pero dependerá del estado de pureza en que encontremos el azúcar moreno o integral.

La diferencia entre ambos radica en el proceso de refinamiento al cual es sometido el jugo obtenido de la caña de azúcar o de la remolacha para obtener la sacarosa, un disacárido formado por una molécula de glucosa y una de fructosa.

Para obtener el azúcar blanco, el azúcar de caña es sometido a un proceso de purificación o limpieza donde se eliminan las impurezas, en tanto el azúcar moreno o integral (también llamado negro o crudo) proviene directamente del jugo de la caña de azúcar, sin haber sufrido ningún proceso de refinado, salvo el cristalizado, conservando así tanto sus propiedades minerales como su sabor original.

El proceso de refinamiento del azúcar blanco consta de los siguientes pasos:

• Cosecha. Cortado y recolección de la caña de azúcar.
• Almacenaje. Se determina la calidad, el contenido de sacarosa, fibra y nivel de impurezas. La caña es pesada y lavada.
• Picado de la caña. La caña es picada en máquinas especialmente diseñadas para obtener pequeños trozos.
• Molienda. Mediante presión se extrae el jugo de la caña. Se agrega agua caliente para extraer el máximo de sacarosa que contiene el material fibroso.
• Clarificación y refinación. En la clarificación se eleva la temperatura del jugo, se separa un jugo claro. Es posible también refinarlo y para ello se agregan huesos o cal que ayuda a separar los compuestos insolubles. También suele tratarse con dióxido de azufre gaseoso para blanquearlo. No todo el azúcar de color blanco proviene de un proceso de refinado.
• Evaporación. Se evapora el agua del jugo y se obtiene una meladura o jarabe con una concentración aproximada de sólidos solubles del 55 % al 60 %. La meladura es purificada en un clarificador. La operación es similar a la anterior para clarificar el jugo filtrado.
• Cristalización. De la cristalización se obtienen los cristales (azúcar) y líquido.
• Centrifugado. Se separan los cristales del líquido.
• Secado y enfriado. El azúcar húmeda es secada en secadoras de aire caliente en contracorriente y luego enfriada en enfriadores de aire frío en contracorriente.
• Envasado. El azúcar seca y fría se empaca en sacos y está listo para su venta.

La página web “Nutrición y dietas” aporta la siguiente información sobre estos dos azúcares:

Muchas veces lo que se vende como “azúcar moreno” no es otra cosa que azúcar blanco (refinado) al que se le ha añadido extracto de melaza para darle cierto color oscuro y sabor particular.

Sin embargo, este aporte de nutrientes extra que contiene el azúcar moreno integral frente al azúcar blanco refinado es prácticamente irrelevante pues son elementos presentes en baja cantidad y que, en una dieta saludable, son proporcionados por los demás alimentos. Es importante reseñar que otros alimentos dulces, como la melaza o la miel, tienen un mayor contenido en minerales que estos azúcares y son, por tanto, más nutritivos.

Además, aparece el problema comercial habitual y es que mucho de lo que se vende como azúcar morena integral no es más que azúcar blanca refinada al que se añade extracto de melaza para darle un color y sabor característicos y que permitan confundir al consumidor. Es importante, por tanto, que si estamos interesados en consumir azúcar moreno integral confirmemos con el vendedor que se trata del producto que realmente queremos y no un tongo.

Por otra parte, el azúcar es una importante fuente de calorías en la dieta alimenticia moderna, aunque son conocidas como calorías vacías pues  no van acompañadas de un aporte de minerales o vitaminas. Por eso, lo mejor para mantener una dieta saludable, dado que nuestras dietas no suelen ser bajas en calorías precisamente, es tomar la menor cantidad de azúcar, sea moreno integral o blanco refinado, que nuestro ansia no permita.

Un detalle a tener en cuenta entre los beneficios del azúcar integral morena, el de verdad, es que parece que posee riqueza en sales minerales alcalinas que ayudan a alcalinizar nuestro PH, lo cual es saludable para nuestra salud ya que nuestro PH sanguíneo suele ser demasiado ácido.

Se pueden distinguir estos tipos de azucares:

• Azúcar morena, el auténtico azúcar moreno (también llamado “negro” o “crudo”) se obtiene del jugo de caña de azúcar y no se somete a refinación, sólo cristalizado y centrifugado. Este producto integral, debe su color a una película de melaza que envuelve cada cristal. Normalmente tiene entre 96 y 98 grados de sacarosa. Su contenido de mineral es ligeramente superior al azúcar blanco, pero muy inferior al de la melaza.
• Azúcar rubio, es menos oscuro que el azúcar moreno o crudo y con un mayor porcentaje de sacarosa.
• Azúcar blanca, con 99,5% de sacarosa. También denominado azúcar sulfitado.
• Azúcar refinada o extrablanco es altamente puro, es decir, entre 99,8 y 99,9 % de sacarosa. El azúcar rubio se disuelve, se le aplican reactivos como fosfatos, carbonatos, cal para extraer la mayor cantidad de impurezas, hasta lograr su máxima pureza. En el proceso de refinamiento se desechan algunos de sus nutrientes complementarios, como minerales y vitaminas

En cuanto a su información nutricional, el azúcar moreno (por 100 g.) presenta:

• 95 % de Hidratos de carbono.
• 460 Calorías.
• 50 U.I.de Vitamina A.
• 0,50 mg. de Ácido pantoténico.
• 0,10 mg. de Vitamina B1.
• 0,20 mg. de Vitamina B2.

En resumen, se puede concluir que la diferencia entre el azúcar moreno integral y el azúcar blanco refinada no es muy relevante puesto que habría que consumir enormes cantidades de azúcar, algo muy desaconsejable, para que nuestra salud notase alguna diferencia entre los nutrientes proporcionados por uno otro. Así que, quizás, en este caso que cada cual se guíe por sus gustos aunque sea cierto que el azúcar moreno integral, el real, presenta algunas de las ventajas indicadas más arriba.

Podemos observar en la pirámide alimenticia de uso habitual que los dulces son los elementos más prescindibles de nuestra dieta, desde el punto de vista de la salud, claro.

Y también podemos encontrar esta otra valoración del azúcar y su contribución al cáncer en la página de Cáncer y Enfermedades:

EL AZUCAR REFINADO AMIGO DEL CANCER

El azúcar refinado deriva de la caña de azúcar y de la remolacha o betabel. Para estas dos plantas el proceso de extracción es diferente, en tanto que depuración, concentración y refinación siguen el mismo curso.

Con la extracción, las cañas son exprimidas para extraer su jugo o zumo, del cual luego se hace evaporar casi toda el agua. El resultado es el azúcar de caña integral o azúcar moreno, el mejor desde el punto de vista nutricional.

Luego este azúcar integral es cocido a la temperatura de 350 °C con leche de cal y cal viva.

Las temperaturas altas provocan la destrucción total de todas las vitaminas, de las enzimas y de los minerales orgánicos. Para eliminar la cal en exceso, el jugo de azúcar es tratado con anhídrido carbónico. Luego el azúcar es blanqueado a través de tratamientos con acido carbónico y anhídrido sulfuroso en un proceso de continuas secciones de cocción, enfriamientos y centrifugados. El producto así obtenido es el azúcar áspero.

A este punto, el azúcar es tratado con carbón y acido sulfuroso para filtrarlo y decolorarlo posteriormente. Finalmente es “pintado” de blanco con el E130, un colorante extraído por el alquitrán y extremadamente toxico. Así es obtenido el azúcar blanco refinado.

¿PORQUE ES PERJUDICIAL EL AZUCAR REFINADO?

El azúcar, como cualquier otra cosa, para ser digerido necesita de vitaminas y de minerales orgánicos (los minerales inorgánicos son tóxicos, como por ejemplo la sal de cocina). Pero toda clase de nutrientes fueron eliminadas con el tratamiento con cal y sobre todo con la alta temperatura (son suficientes 60°C para desorganizar los minerales orgánicos y destruir las vitaminas, en el caso de refinación del azúcar fueron empleados ¡350°C!).

Así, las únicas fuentes disponibles son las vitaminas y los minerales ya presentes en nuestro cuerpo. Así, los minerales pre lavados provocan desmineralización y osteoporosis en los tejidos y los huesos, y además son pre levadas las vitaminas del grupo B, que sirven para la buena salud del sistema nervioso.

Según investigadores de la universidad de San Francisco, el azúcar refinado es un riesgo por la salud, contribuyendo con cerca de 35 millones de muertos cada año en todo el mundo.

Es tan tóxico que se debería igualar al alcohol o al tabaco. El azúcar refinado no se limita a causar patologías cardiovasculares, híper e hipo-glucemia, síndrome metabólico y diabetes, sino también varios tipos de cáncer. Azúcar y cáncer están altamente relacionados.

La medicina oficial no confiere ninguna importancia a la comida en general. Un gran número de científicos y de médicos alternativos reconocen que la mejor forma de tratar el cáncer consiste en cortar el suministro de alimentación a los tumores y a las células cancerígenas. Una forma de lograr esto es reduciendo al máximo el consumo de azúcar refinado, incluyendo los productos que lo contienen como galletas, refrescos etc.

Descubrimientos Científicos

Los investigadores del Instituto Huntsman of Cancer de Utah han sido los primeros en descubrir que el azúcar refinado alimenta a los tumores. Una búsqueda publicada en la revista Proceeding de la Academia Nacional de Ciencia, dice che “Ya desde el 1923 se conoce que las células tumorales utilizan la glucosa mucho más que las células normales”. En otra búsqueda publicada en la revista “Sistemas de Biología Molecular” se descubre que al privar a las células cancerígenas de la glucosa, activa un anillo metabólico de indicación que lleva a la muerte de las células cancerígenas.

Los azucares refinados son estrictamente vinculados al cáncer, no solamente como causa del mismo, sino también como algo que alimenta las células cancerígenas una vez que la persona tiene la enfermedad. Una vez que las células cancerígenas se establecen en el cuerpo, necesitan de carburante para funcionar, uno de estos carburantes es el azúcar refinado.

En otra búsqueda publicada en octubre 2011 en la revista Nutrición y Metabolismo esta evidenciado que los tumores son tan sensibles a la oferta de azúcar refinado que una falta de suministro de los mismos lleva a una consistente reducción del tumor.