Adriana – Consecuencias económicas del Brexit

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Una de las grandes preocupaciones de Gran Bretaña ahora, es perder acceso al mercado común europeo. Pero sus ex colegas le contestan; si quieren acceder, abran sus puertas a la inmigración. Pero la inmigración motivó el Brexit.

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David Cameron, el saliente Primer Ministro de Gran Bretaña, enfrentó al Parlamento por primera vez el miércoles desde el voto popular a favor de sacar al país de la Unión Europea. Durante la sesión no pudo menos que describir el oscuro mensaje de Bruselas sobre los desafíos que tiene por delante Gran Bretaña.

Dirigiéndose a los miembros del Parlamento Cameron dijo que no tiene dudas de los «difíciles momentos económicos que se vienen» y que el problema más importante a tratar ahora es asegurar acceso al mercado único europeo. Hablando de lo que fue su «última cena» en Bruselas Cameron tenían un claro mensaje de los jefes de la UE: el acceso al mercado único » no se otorgará sin algo a cambio con respecto al libre movimiento de personas en las fronteras.»

Cameron fue más explícito: «es el tema de la inmigración contra el tema del mercado único. Ese es francamente el problema más difícil a resolver».

Después de dos días de reuniones tratando el Brexit los líderes de los 27 países de la UE emitieron un comunicado diciendo que Gran Bretaña tiene que aceptar el libre movimiento de personas para retener el acceso al mercado único. Dejaron absolutamente en claro que el mercado único requiere aceptar las cuatro libertades, incluida la del libre movimiento de las personas (las cuatro libertades son: libre circulación de mercancías, libre circulación de trabajadores, libre circulación de servicios y libre circulación de capitales). «No habrá mercado único a la carta» dijo DonaldTusk, presidente del Consejo Europeo.Luego, en conferencia de prensa.

Tusk admitió la necesidad de fortalecer los controles en las fronteras externas de Europa para hacer frente a la crisis de inmigración, que fue el tema central que originó todo este tema de la separación de Gran Bretaña.

La sesión parlamentaria en Londres también fue borrascosa. Hubo fuertes choques entre Cameron y el líder de la oposición Jeremy Corbyn, quien se niega a renunciar frente a la revuelta de los miembros de su propio partido. Las consecuencias del referéndum siguen apareciendo. Cameron le pidió que renuncie «por el interés nacional».

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