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A medida que va llegando el buen tiempo y las temperaturas se encuentran en aumento, también empiezan a visitar nuestros hogares unos indeseados insectos, las moscas y los mosquitos.
En el caso de los mosquitos, la picadura de éstos causa una notable inflamación y un prurito que no cesa a pesar de rascarse continuamente, lo que en ocasiones nos puede llevar a realizarnos una herida.
Además, en el caso de personas alérgicas a la picadura de los mosquitos, esta reacción se agrava y los síntomas pueden llegar a mermar la calidad de la vida de la persona que ha sufrido el ataque de este pequeño insecto volador.
Por si esto fuera poco, los mosquitos también actúan como vectores, es decir, pueden transmitir enfermedades que resultan fatídicas para el ser humano, como es el caso del dengue, una enfermedad viral que se transmite por la picadura del mosquito Aedes Aegypti.
¿Cómo nos podemos defender de estos insectos tan molestos que se acercan a medida que las temperaturas van subiendo? Lo cierto es que disponemos de múltiples opciones, pero pocas son tan idóneas e inocuas como las plantas antimoscas y antimosquitos ¿Quieres saber cuáles son? Entonces no dejes de leer este artículo.
¿Por qué es tan importante utilizar plantas antimoscas y antimosquitos?
Si no utilizamos plantas que tengan la capacidad de repeler a estos insectos, tenemos dos opciones comunes: aplicarnos sobre la piel repelente de insectos o rociar nuestro hogar con insecticida.
Lamentablemente estas opciones no son inocuas para nuestra salud, y si bien es cierto que aplicar esporádicamente estos productos no supone ningún riesgo para nosotros, exponernos a ellos de forma continua puede llegar a afectar gravemente a nuestra salud, incluso podemos ir aumentando progresivamente el nivel de toxinas en nuestro organismo fruto de la inhalación de estos químicos.
El uso de insecticidas y repelentes tiene graves consecuencias para nuestro organismo y también para el medio ambiente, veamos a continuación cuáles son:
- Mutaciones en el ADN
- Predisposición a sufrir cáncer
- Irritación faríngea y nasal
- Dolores de cabeza y vértigo
- Desórdenes en el ciclo menstrual
- Alteraciones en la formación del feto en el caso de mujeres embarazadas
- Dificultad respiratoria
- Los insecticidas contaminan el agua y contribuyen a la contaminación atmosférica
- Pueden suponer un riesgo para las mascotas que habitan en el hogar
- Reducen la biodiversidad
Plantas antimoscas y antimosquitos
Utilizar plantas antimoscas y antimosquitos es el único método completamente inocuo que podemos emplear para librarnos de estos molestos insectos.
Estas plantas son capaces de repeler a las moscas y a los mosquitos por el olor que desprenden, el cual no les resulta nada agradable a estos insectos, además, puedes utilizarlas tanto en el interior como en el exterior de tu hogar.
A continuación te mostraremos cuáles son las mejores plantas antimoscas y antimosquitos.
Melisa
La melisa es una planta originaria del sur y el centro de Europa, la podemos encontrar de forma silvestre en malezas o bosques cuyo terreno sea sombreado y rico en materia orgánica.
Se emplea generalmente como una planta medicinal útil en casos de estrés, insomnio, palpitaciones y problemas digestivos.
Su eficacia frente a las moscas y los mosquitos se la debemos a su riqueza en aceites esenciales, presentando una concentración aproximada de éstos del 0,4 %.
Entre los aceites esenciales más importantes que le otorgan a esta planta un olor cítrico/alimonado, debemos destacar los siguientes: citronelal, timol, neral, geranial y limoneno.
Albahaca
¿A quién no le fascina el olor e intenso aroma de la albahaca? Se trata de una planta con gran presencia en huertos y jardines que además posee numerosas propiedades medicinales sobre todo para facilitar la digestión.
Esta planta es originaria de la India, pertenece a la misma familia que la melisa yes su aroma el responsable de ahuyentar a las moscas y los mosquitos.
Es muy rica en aceites esenciales, éstos pueden llegar a suponer el 1 % de su composición, los más importantes son los siguientes: eugenol, estragol, linalol, cineol, borneol, ocimeno, anetol, geraniol, alcanfor y pineno.
Menta de gato o hierba gatera
Se trata de una hierba perenne de la misma familia que la menta común, cuyo origen se sitúa en el mediterráneo.
Los gatos aman a esta planta por un importante componente activo, la nepetalactona, una sustancia que el gato detecta por el olfato y que simula a la feromona, motivo por el cual los felinos la relacionan con el apareamiento.
Pero además la nepetalactona ha demostrado científicamente tener efectos insectífugos, es decir, ayuda a repeler numerosos insectos, entre ellos, las moscas y los mosquitos.
Citronella
Estamos sin lugar a dudas ante la planta estrella cuando se trata de combatir moscas y mosquitos, de hecho, en la actualidad, empezamos a ver gran diversidad de repelentes elaborados a partir de esta maravillosa planta.
Se trata de una planta muy aromática que posee numerosos componentes activos que nos ayudan a deshacernos de estos molestos insectos, veamos a continuación cuáles son:
- Citronelol
- Geraniol
- Canfeno
- Alfa- pineno
- Cariofileno
Lavanda
La lavanda es una planta muy aromática cuyo aceite esencial se ha empleado para tratar numerosas afecciones, debido a que posee importantes propiedades medicinales.
La podemos encontrar habitualmente en lugares secos del mediterráneo, su efectividad como repelente de insectos se la debemos principalmente a su riqueza en aceites esenciales, de los cuales debemos destacar los siguientes: linalol, citronelol, d-limonene, alcanfor, borneol, d-borneol, nerol, geraniol, sabineno, farneseno, beta-pineno, alfa-pineno, cineol y beta-felandreno.
Poleo menta
Esta planta crece en zonas húmedas junto a estanques y ríos y se utiliza habitualmente como infusión, aunque lo cierto es que también resulta muy efectiva para repeler a los insectos.
Su concentración en aceites esenciales puede llegar al 2%, por ello es muy útil frente a moscas y mosquitos, de sus aceites esenciales debemos destacar los siguientes como los más importantes: pulegona, isopulegona, isomentona, mentona, limoneno, carvacrol, piperitenona.
Empleando estas plantas antimoscas y antimosquitos, así como los aceites esenciales que se obtienen a través de las mismas, lograrás una protección eficaz e inocua frente a las moscas y los mosquitos. No obstante, si deseas emplear estas plantas utilizando su aceite esencial, debes saber que éstos no están recomendados en niños menores de 3 años ni en mujeres embarazadas o lactantes.