Conforme la definición de una “vida digna” aumenta sus costos, las generaciones de ahora enfocan su potencial de trabajo y creatividad en empleos relacionados con la informática, la administración de empresas, los negocios y otros afines.

Esto trae como resultado el desdén por carreras un tanto más relacionadas con la espontaneidad y el trabajo manual, lo cual disminuye a su vez el valor de las artes, que comienzan a considerarse como algo innecesario en nuestras sociedades. En palabras de Rhik Samadder, colaborador de The Guardian, “Muchas personas lamentan trabajar en informática, y desean ‘cambiar a carreras con algo más de alma’”. De ahí la importancia de conservar acciones que nos recuerden la belleza de lo manual, su detalle terapéutico y su impacto en la evolución motriz. Tal como lo hacen las manualidades.

Manualidades como un estilo de vida

En los últimos años, las nuevas generaciones están buscando una especie de antídoto para regular el apabullante estilo de vida de lo digital. Samadder lo resume bien: “Hemos intentado una vida loca, hemos intentado meternos en un capitalismo exacerbado, hemos intentado las redes sociales, y ninguno de estos estilos nos está haciendo feliz”.

Curiosamente, las manualidades resultan un método o una herramienta usada con frecuencia en terapias psicológicas y psiquiátricas. Esto se debe a que al hacer manualidades en plena conciencia, sin quererlo se entra en un estado meditativo estilo mindfulness. En un estado de flujo que permite brindar un equilibrio y una regulación a cualquier crisis en la salud mental.

Es como si la expresión creativa fuese un pequeño recordatorio de ser más que un público objetivo de cualquier anuncio publicitario o una fuerza trabajadora para sostener una realidad.

Las manualidades como herramienta para (re)enamorarse de la vida

Además de sus beneficios terapéuticos, las manualidades también permiten vincularse con los productos: al repararlos y mantenerlos, se le brinda un valor a la mano de obra. De modo que en vez de esperar que sea rápido y barato, se toma conciencia de un nuevo paradigma económico distinto. Más allá de campos de trabajo, se aprehende el poder que siempre perteneció al ser humano: la fuerza de trabajo desde sus capacidades motrices, que a su vez brinda un impacto terapéutico vital.

De alguna manera, parece que las manualidades lo que hacen es reconectarnos con la esencia del ser humano, algo que antiguas generaciones comprendieron desde sus propios contextos sociohistóricos.

https://pijamasurf.com/2019/10/el_potencial_terapeutico_de_las_manualidades_radica_en_mantenerte_en_en_el_aqui_y_el_ahora/