Archivo de la categoría: ECOLOGIA y ENERGÍA

Aida. Científicos comprueban que los árboles también duermen

por La Gran Epoca

Científicos comprueban que los árboles también duermen

Científicos de Austria, Finlandia y Hungría están utilizando escáneres láser para estudiar el ritmo día-noche de los árboles. Como resultado, han comprobado que los árboles se van a dormir también.

La mayoría de los organismos vivos adaptan su comportamiento al ritmo del día y la noche. Las plantas no son una excepción: las flores se abren por la mañana, algunas hojas de los árboles se cierran durante la noche.

Los investigadores han estado estudiando el ciclo día-noche en las plantas hace mucho tiempo: Linneo observó que las flores en un sótano oscuro continuaban abriéndose y cerrándose, y Darwin registró el movimiento durante la noche de hojas y tallos y lo llamó “el sueño”.

Pero aún hoy en día, este tipo de estudios sólo se han realizado con pequeñas plantas cultivadas en macetas, y nadie sabía si los árboles duermen así. Ahora, un equipo de investigadores de Austria, Finlandia y Hungría ha medido el movimiento del sueño de árboles adultos utilizando una serie temporal de nubes de puntos de escaneo láser, que consisten en millones de puntos cada una.

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“Nuestros resultados muestran que todo el árbol se inclina durante la noche, lo cual puede ser visto como el cambio de posición de las hojas y ramas”, dice Eetu Puttonen, del Finnish Geospatial Research Institute.

“Los cambios no son demasiado grandes, sólo hasta 10 centímetros en árboles con una altura de unos 5 metros, pero resultan sistemáticos y medibles dentro de la exactitud de nuestros instrumentos”, agrega el científico.

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Para descartar efectos del clima y la ubicación, el experimento se realizó dos veces con dos árboles diferentes. El primer árbol fue examinado en Finlandia y el otro en Austria. Ambas pruebas se realizaron cerca del equinoccio solar, bajo condiciones de calma sin viento o condensación.

Las hojas y las ramas caen poco a poco, con la posición más baja un par de horas antes del amanecer. Por la mañana, los árboles volvieron a su posición original dentro de unas pocas horas. No está claro aún si fueron “despertados” por el sol o por su propio ritmo interno.

“En el nivel molecular, el campo científico de la cronobiología está bien desarrollado, y en especial los antecedentes genéticos de la periodicidad diaria de las plantas ha sido ampliamente estudiado”, explica András Zlinszky del Centro de Investigación Ecológica, Academia de Ciencias de Hungría.

“El movimiento de las plantas suele estar estrechamente relacionado con el balance hídrico de las células individuales, que se ve afectado por la disponibilidad de luz a través de la fotosíntesis. Pero los cambios en la forma de la planta son difíciles de documentar incluso para pequeñas hierbas, ya que la fotografía clásica utiliza la luz visible que interfiere con el movimiento del sueño”, añade.

Con un escáner láser, la perturbación planta es mínima. Los escáneres utilizan luz infrarroja, que se refleja en las hojas. Los puntos individuales en una planta solamente se iluminan durante fracciones de segundo. Con esta técnica de escaneo láser, un árbol de tamaño completo se puede explorar de forma automática en cuestión de minutos con resolución sub-centímetro.

 

¿Qué es la crisis ecológica?

http://florentmarcellesi.eu/

Cheng Lily Li

Créditos: Cheng (Lily) Li

Florent Marcellesi, coordinador de Ecopolítica y miembro de la Revista Ecología Política.

 

La ecología política basa su teoría y praxis en la reflexión y acción en la lucha contra la llamada “crisis ecológica” y en la propuesta de nuevos modelos de producción y consumo compatibles con los límites ecológicos del Planeta y la justicia y ética socio-ambiental. Pero ¿qué llamamos exactamente crisis ecológica? ¿En qué fenómenos concretos se manifiesta y qué relaciones guarda con el sistema socio-económico actual?

La crisis ecológica es principalmente una crisis de escasez: escasez de materias primas, de energía, de tierras y de espacio ambiental para mantener el ritmo de la economía actual, y aún menos extenderlo a todos los países del Sur y dejarlo en herencia a las generaciones futuras. El modo de producción y de consumo impulsado por el Norte no tiene en cuenta los límites físicos del planeta, tal y como lo deja patente la huella ecológica: si todas las personas de este mundo consumieran como la ciudadanía española, necesitaríamos tres planetas. Mientras tanto, la humanidad ya supera en un 50% su capacidad de regenerar los recursos naturales que utilizamos y asimilar los residuos que desechamos (WWF, 2012). Por su parte, el alcance de la dominación humana y de la amplitud de la crisis ambiental que provoca, queda claro por lo menos a través de los seis fenómenos siguientes (Vitousek y sus colaboradores (en Riechmann, 2008)):

  1.  Entre la mitad y una tercera parte de la superficie terrestre ha sido ya transformada por la acción humana.
  2. La concentración de dióxido de carbono en la atmósfera se ha incrementado más de un 30% desde el comienzo de la revolución industrial.
  3. La acción humana fija más nitrógeno atmosférico que la combinación de las fuentes terrestres naturales.
  4. La humanidad utiliza más de la mitad de toda el agua dulce accesible en la superficie del planeta.
  5. Aproximadamente una cuarta parte de las especies de aves del planeta ha sido extinguida por la acción humana.
  6. Las dos terceras partes de las principales pesquerías marinas se hallan sobreexplotadas o agotadas.

En este contexto, según Lipietz (2012), incluso podemos hablar hoy de una “segunda” crisis ecológica mundial, después de una primera que sitúa durante la Gran Peste del siglo XIV. Al igual que la Gran Peste, la crisis ecológica actual tiene como origen un conflicto entre la Humanidad y la Naturaleza, a través de la relativa escasez de producción alimentaria y los peligros de su propio sistema energético para la población humana. Además, se transmite por los canales de la globalización económica y golpea civilizaciones muy diferentes aunque lo suficientemente parecidas como para poder producir y padecer efectos semejantes. Sin embargo, según el teórico francés, la crisis ecológica actual se diferencia profundamente de la crisis “exógena” de la Gran Peste (un microbio desconocido y devastador que ataca a sociedades debilitadas por un cambio climático de origen no antropogénico y la baja productividad agrícola) por ser el resultado de la dinámica social e histórica del propio modelo de desarrollo: el propio liberal-productivismo ha generado la tensión actual entre Humanidad y Naturaleza.De tal forma que la “segunda” crisis ecológica, esta vez “endógena”, se podría resumir de la forma siguiente:

[Es] la conjunción de dos nudos de crisis ecológicas, internas a la dinámica del modelo liberal-productivista: el “triángulo de las crisis energéticas” y el “cuadrado de los conflictos para el uso del suelo”, ellos mismos articulados sobre la crisis financiera, económica y social del modelo capitalista neoliberal que triunfa a nivel mundial desde principios de los años 1980. Este modelo liberal pesa mucho sobre la evolución de los dos nudos de las crisis ecológicas: incluso podemos decir que las engendra (Lipietz, 2012).

A continuación, estudiaremos más en profundidad estos dos nudos centrales de la crisis ecológica para entender mejor los retos a los que se enfrenta la Humanidad si quiere elegir la vía de la esperanza.

El triángulo de las crisis energéticas

Los principales riesgos relacionados a la crisis energética se centran en torno a tres vértices: energía fósil (carbón, petróleo, gas), energía nuclear y energía proveniente de la biomasa (leña, agrocombustibles).

Como primer vértice del triángulo, encontramos los riesgos vinculados a las energías fósiles, que a su vez se dividen en dos vertientes: la capacidad de regeneración de estas energías (no renovables a escala humana) y la capacidad de asimilación de los residuos vinculados a su utilización. Asimismo, la humanidad se enfrenta al techo de los combustibles fósiles, que corresponde al punto de inflexión a partir del cual la extracción de una unidad de energía fósil por unidad de tiempo ya no puede incrementarse, por grande que sea la demanda. Coincide con el momento en que la extracción acumulada llega a la mitad de la cantidad total recuperable, y los esfuerzos humanos, técnicos y financieros pueden disminuir la tasa de declive, pero no invertir la tendencia a la baja de la extracción. Al mismo tiempo, la creciente incapacidad de ofertar más energía fósil se topa con una demanda en constante aumento, principalmente en los países llamados emergentes como China o la India, y con la especulación (Bermejo, 2008), lo que dispara el precio de la energía (y de otras materias primas).(2) En concreto, esta tensión entre oferta (que depende de factores ecológicos y económicos) y demanda (que depende del modo de vida) al alza es paradgimática y altamente peligrosa para el modelo social y productivo actual. Esto es especialmente cierto en el caso del petróleo, puesto que la globalización económica se basa en un petróleo barato, abundante y de buena calidad. El despliegue del modelo de producción y consumo de masa y sus instituciones asociadas necesitan energía fósil al igual que el cuerpo humano necesita sangre. Por ejemplo: el complejo agroindustrial, basado en la maquinaria motorizada, la producción y consumo de abonos y fertilizantes, altos niveles de bombeo de agua, la manipulación industrial, la explotación intensiva de los suelos, la comercialización globalizada y el transporte de larga distancia hacia el lugar de consumo, nos da una buena idea de esta dependencia.(3) Sin embargo al haber alcanzado el techo del petróleo (peak oil en inglés), esta era ha terminado: estamos entrando en la era del petróleo caro, escaso y de mala calidad.(4)  Esta nueva situación tiene repercusiones directas sobre el conjunto de la economía y sobre nuestros modelos de vida diarios. De hecho, la crisis financiera de 2008, que hoy ha desencadenado una ola de recesiones y planes de ajuste brutales, pone de relieve una relación directa entre crisis ecológicas y económicas. En este sentido, el economista estadounidense Jeremy Rifkin recuerda que la crisis de las subprimes, es decir el impago de las hipotecas en Estados Unidos que luego se propagó a nivel mundial a través de los activos tóxicos, comenzó cuando el barril de petróleo en el verano 2008 alcanzó los 150 dólares y no en octubre cuando estalló la burbuja a la luz pública. Ese aumento de los precios hizo que subiera el precio de la gasolina y que en Estados Unidos mucha gente, principalmente las más empobrecidas e insolventes cuyo presupuesto familiar tiene dos partidas básicas en torno a la vivienda y al transporte, dejara de pagar la hipoteca (las subprimes) para mantener la tenencia de su coche privado (imprescindible en un sistema basado en su uso intensivo, por ejemplo para ir al trabajo y a su vez generar las rentas necesarias para sobrevivir).

Por otro lado, apuntemos que para superar el techo de producción de los combustibles fósiles, existe una nueva frontera extractiva: la extracción del gas de pizarra a través del método llamado fracking o fracturación hidraúlica. Si bien el fracking ha permitido bajar el precio a corto y medio plazo del gas, es un nuevo espejismo altamente peligroso para el medio ambiente, el clima y la salud humana y que no afronta el mayor reto de la civilización industrial: rebajar el consumo energético dentro de los límites ecológicos del Planeta (para un análisis detallado del fracking, véase Marcellesi y Urresti, 2012).

En cuanto a los efectos del modelo energético sobre el cambio climático, hoy principal preocupación ambiental en las agendas políticas, existen claras evidencias de que crisis energética y crisis climática no son más que dos caras de la misma moneda. Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (GIECC), “la principal causa del crecimiento de la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera desde la época preindustrial es el uso de combustibles fósiles” (2007, p2), que hoy se estima en torno a 75% (el resto se debe a la deforestación y al cambio de uso de suelos). A pesar de mejoras tecnológicas por unidad producida,(5) el crecimiento demográfico y el actual modelo socioeconómico (basado en la acumulación material) provocan una presión insostenible sobre los ecosistemas. En este contexto, las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero sobrepasan la capacidad de autorregulación y asimilación por parte de los sumideros naturales (océanos, atmósfera), lo que está conduciendo a una situación peligrosa de no retorno. Para evitar tal caso que llevaría a sufrir cambios irreversibles e impredecibles, el GIECC recomienda que no haya aumento de más de 2 grados centígrados en 2100 en comparación con los niveles preindustriales, mientras que la muy institucional Agencia Internacional de la Energía pone 2017 como fecha límite para acotar el incremento de temperaturas. En caso contrario, ya sea el IPCC (2007) o el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (2007) advierten de las mismas consecuencias ambientales y sociales. El cambio climático supondrá —y de hecho, ya supone— efectos en la agricultura y silvicultura (cambio de rendimientos según zonas frías o cálidas, aumento de plagas e insectos, etc.), en los recursos hídricos (extensión de las zonas afectadas por la sequía, empeoramiento de la calidad del agua, etc.), en la salud humana (tales como la mortalidad relacionada con el calor en Europa, aumento de enfermedades infecciosas, etc) o en la industria, asentamientos humanos y sociedad (disminución de la la calidad de vida de las personas en áreas cálidas sin vivienda apropiada) así como una mayor exposición a inundaciones costeras, unas condiciones climáticas extremas y un posible colapso de los ecosistemas.

Como segundo vértice del triángulo, encontramos la energía nuclear que tras la catástrofe de Fukushima —decenas de miles de personas evacuadas fuera del perímetro de seguridad, contaminación radiactiva hasta en Tokio, escándalos políticos y técnicos en torno a la gestión y a la seguridad de las centrales nucleares japonesas y del accidente post-tsunami,(6) etc.— vuelve a apuntar sus altas deficiencias y riesgos para representar cualquier tipo de solución al cambio climático. Resumiendo los principales problemas (Marcellesi, 2011a):

  1. El riesgo de accidente, en este caso de probabilidad baja pero de magnitud alta, es más que nunca presente y real.
  2. Seguimos sin tener ninguna solución real a la gestión de los residuos radiactivos.
  3. La energía nuclear crea una fuerte dependencia con el exterior ya que el uranio, cuyas reservas son finitas, se compra a países fuera de Europa y cuya inestabilidad política no asegura un suministro seguro (el Chad, por ejemplo).
  4. Existe un riesgo de proliferación de la energía nuclear para fines militares (reforzado por la amenaza de uso terrorista de los residuos o de las centrales nucleares como posibles dianas de ataque).
  5. No es una alternativa para evitar sustancialmente emisiones de gases de efecto invernadero: si se tiene en cuenta el ciclo de vida global de la energía nuclear (extracción del uranio, suministro a Europa, construcción y desmantelamiento de las centrales, gestión de los residuos…), ésta produce más CO2 que las energías renovables.(7)
  6. Es una fuente de electricidad, por tanto no sustituye nuestra dependencia de los combustibles fósiles.
  7. Los puestos de trabajo por unidades energéticas están por debajo de las creadas por las energías renovables. (8)

El último vértice del triángulo lo ocupa la biomasa, cuyo uso energético es el más antiguo desde que el Homo Erectus domesticara el fuego, el más constante para una gran mayoría de la humanidad (la leña sigue siendo el principal combustible utilizado) y, seguramente, uno de los más prometedores de cara al futuro. Pero la biomasa también tiene riesgos asociados que analizaremos en el siguiente subapartado, puesto que se articula directamente con el uso de las tierras, principalmente con el auge de los agrocombustibles.

El cuadrado del conflicto del uso de las tierras

Los anglosajones suelen decir que hacemos cuatro usos principales de la tierra, que pueden resultar excluyentes: Food, Feed, Forest, Fuel (las 4 Fs). Dicho en castellano, estamos hablando respectivamente de usos para 1. la alimentación humana, 2. la alimentación del ganado (natural —campos de pasto— o artificial —soja que se combina con maíz para las vacas europeas—), 3. los bosques (como sumidero o reserva de biosfera) y 4. la producción de biomasa (agrocombustibles, leña, etc.).

En este marco de análisis, intervienen dos factores cruciales: la dieta crecientemente carnívora de los países del Norte y emergentes, y la introducción cada vez más sistémica de agrocombustibles. Como lo relata Lipietz (2012), la polarización de los ingresos a nivel mundial provoca una transformación de la dieta humana que pasa de una dieta a base de proteínas vegetales con un poquito de carne (“el menú hindú o el menú chino”), a una dieta a base de carne (el “menú europeo o norte americano”). Sin embargo, las proteínas animales (feed) necesitan para su producción de 7 a 15 veces más hectáreas que las proteínas vegetales (food). Por tanto, esto representa un problema grave dado el aumento contante de la población con dieta carnívora (por ejemplo, en India y China el 10% de la población se alimenta con el mismo tipo de comida que en Europa y en Norte América). Por su parte, los agrocombustibles (fuel), que técnicamente son energías renovables obtenidas a partir de la biomasa, son la respuesta oficial a la crisis de los combustibles fósiles y del techo del petróleo. De hecho, en sociedades no dispuestas a ‘negociar su modo de vida’, los agrocombustibles despiertan un gran interés y cuentan con un fuerte impulso político,(9) lo cual, junto a otros factores, provoca tensiones en los precios de la comida en el mercado mundial.(10) En este contexto, Jean Ziegler, el relator especial de la ONU para el derecho a la alimentación, llegó a postular en 2007 que la producción masiva de biocombustibles «es un crimen contra la humanidad».

Si bien los agrocombustibles juegan un papel central en las crisis alimentarias actuales, hay que añadir también otros factores sociales y ecológicos: la escalada de precios de la energía, las malas cosechas en los países productores de trigo como Australia, Rusia o Ucrania debidas al cambio climático, los modelos productivos globalizados que apuestan por economías de la exportación en detrimento de la soberanía alimentaria y que denigran la producción autóctona para abastecer a los mercados locales provocando dependencia de los mercados exteriores sobre todo para la importación de productos básicos, el mal reparto de la producción agrícola local o importada, así como movimientos especulativos a nivel mundial. Al igual que los fuertes cambios de régimen político en Europa en 1848 tienen como origen revueltas de la hambruna, Lagi et al (2011) muestran que existe una fuerte correlación entre el alza de los precios de los alimentos —debido a la combinación de los factores arriba mencionados— y las revueltas del hambre de estos últimos años en el mundo que, recordemos, han dado fin en pocos meses a gobiernos autoritarios —como los de Túnez y Egipto— que nadie veía posible derrocar.

En conclusión de este apartado, es interesante —y sobre todo preocupante— constatar que, además de lo que teorizaba gran parte del movimiento ecologista en sus inicios, esta crisis ecológica no solo compromete de manera decisiva a las generaciones futuras sino que nos afecta ahora directamente a las generaciones presentes. No solo se trata de una crisis de abundancia de una generación privilegiada (“pan para hoy, hambre para mañana”), sino también de una crisis de escasez que ya se está manifestando en el día a día de gran parte de la población mundial (el hambre ya es para hoy). Asimismo, pone de relieve que las llamadas crisis financieras, especulativas o alimentarias están vinculada a crisis subyacentes e interdependientes: no solo la de la economía real (o economía productiva) sino también la de la “economía real-real”, es decir la de los flujos de materias y energía que depende por una parte de factores económicos y por otra parte de los límites ecológicos del planeta

(1) Se basa en una adaptación y actualización de la publicación Marcellesi, F. (2008):Ecología política: génesis, teoría y praxis de la ideología verde, Bilbao, Bakeaz (Cuadernos Bakeaz, 85).

(2) De hecho, no solo estamos llegando al techo de todos los combustibles fósiles sino también al peak all (en referencia en inglés al peak oil), es decir al techo de materias primas como algunos minerales tipo cobre, plata, uranio o zinc. “Peak all” y “peak oil” están fuertemente relacionados puesto que la escasez de materias primas necesitará a su vez una mayor cantidad de energía para su explotación, tratamiento, reciclaje, etc..

(3) Ingeniería sin Fronteras calcula por ejemplo que una manzana procedente de la producción industrial en Chile y comprada en Cataluña consume una cantidad de energía más de cuatro veces superior a la del caso ecológico y local (principalmente debido al transporte desde el lugar de producción hasta el de consumo: en este caso, 14.000 kilómetros en barco y en camión). Por su lado, un tomate industrial consume cinco veces más que un tomate ecológico y local. Mientras la diferencia entre comprar manzanas industriales traídas de Chile y manzanas ecológicas de la región a lo largo de un año equivale al consumo energético anual de 60.812 hogares, “el consumo energético asociado al uso de fertilizantes en una hectárea de tomates de producción industrial puede llegar a ser tan elevado como para representar la cantidad de energía suficiente para dar… ¡12 vueltas al mundo en coche!” (López, 2010 p. 65).

(4) Es complicado predecir la fecha exacta del techo del petróleo puesto que puede confirmarse con exactitud una vez superada (como fue el caso del techo del petróleo en Estados Unidos). Por ejemplo, James Murray de la Universidad de Washington y David King de la Universidad de Oxford, en un artículo reciente de la prestigiosa revista Nature, piensan que el techo de producción de petróleo a nivel mundial tuvo lugar en 2005 con unos 75 millones de barriles al día. De todas maneras, que el techo del petróleo haya pasado, esté por llegar a corto plazo o ocurra dentro de 20 o 30 años, no supone gran diferencia a escala de la civilización humana.

(5) A pesar de mejoras significativas en torno a la intensidad de carbono entre 1990 y 2007 (-12%), la eficiencia tecnológica no ha compensado el crecimiento de la población (+24,5%) y el aumento del nivel de abundancia (+25,5%), y las emisiones de CO2 han aumentado de 38%. Fuente: Tim Jackson (2010).

(6) De hecho, según una comisión de diez expertos creada en diciembre del 2011 a instancias del Parlamento de Japón, “el accidente en la planta nuclear de Fukushima Daiichi no se puede contemplar como un desastre natural. Fue un desastre hecho por el hombre que podría haberse previsto y prevenido”. Fuente.

(7) Más información.

(8) Véase por ejemplo el estudio siguiente: IRENA (2011): Renewable Energy Jobs: Status, Prospects & Policies, IRENA Working Paper

(9) A pesar de una resolución del Parlamento europeo sobre comercio y cambio climático que solicitó «que se subordinara todo acuerdo sobre la compra de biocarburantes a cláusulas relativas al respeto de las superficies devueltas a la biodiversidad y a la alimentación humana», la Comisión Europea sigue vislumbrando el objetivo del 10% de ‘biocombustibles’ en los transportes para el año 2020.

(10) En 2007, mientras la producción de maíz para agrocombustible aumentaba en un 500% en Estados Unidos, el precio del maíz –bajo el efecto conjunto del cambio climático, de la producción de carne y de la producción de agrocombustibles– se encarecía en un 130%, provocando una crisis social profunda para todas las poblaciones cuya alimentación descansa en estos productos básicos.

Aida. 365 días de colores en su patio: las plantas que florecen todo el año

por La Gran Época

365 días de colores en su patio: las plantas que florecen todo el año

(Worms)

Las variedades de plantas que florecen durante todo el año son ideales si desea disfrutar del color de las flores sin importar la estación del año en la que nos encontremos.

Tener flores, color y aromas en un jardín, una terraza o en un balcón durante las cuatro estaciones es posible, pero para ello tenemos que conocer las especies que vamos a plantar. Entre ellas, principalmente se encuentran algunos arbustos perennes que tienen la capacidad de embellecer y resaltar los rincones en los que se encuentran.

A continuación, le brindamos una selección de aquellas plantas que cumplen con esta característica y que además puede tener en macetas o plantadas sobre el césped de su patio o jardín.

Verbena (Pixabay.com)

Verbena (Pixabay.com)

Verbena: es un arbusto que florece todo el año, y que mide entre 20 y 30 centímetros de altura. Es una planta que necesita exposición al sol pleno, y un riego a diario pero con poco agua. Esta especie también tolera que se la cultive en macetas.

Lavanda (Pixabay.com)

Lavanda (Pixabay.com)

Lavanda: este es un arbusto de flores realmente lindas y delicadas, que poseen un color azul violeta y que transmite una belleza y un aroma inconfundible a cualquier jardín. Esta planta, como flor cortada, recibe múltiples usos y aplicaciones.

La lavanda requiere una poda cada dos meses y que alcanza los 50 centímetros, pudiendo plantarla tanto en tierra como en macetas profundas. El riego para esta planta debería ser de dos veces por semana y es una planta que prefiere el sol.

Clavelina (Pixabay.com)

Clavelina (Pixabay.com)

Clavelina: esta planta que florece tanto en invierno como en primavera, presenta flores de colores mezclados, que le aportan un especial atractivo al jardín. Además, esta planta que se cultiva en jardineras o macetas, necesita de un riego diario y recibir el sol unas seis horas al día.

Crisantemo (Pixabay.com)

Crisantemo (Pixabay.com)

Crisantemo: esta planta es muy conocida por adornar las tumbas en los cementerios, pero puede lucir en nuestras casas y jardines en todo su esplendor gracias a su colorida floración.

Hay una amplísima variedad de crisantemos. Son muy conocidos por sus colores rosas, rojos, naranjas, amarillos o blancos. Además de su vivo colorido, otra de sus ventajas es su floración tardía, hasta noviembre, llenando nuestros jardines de color cuando el resto de las flores comienza a desaparecer. Los crisantemos exigen muy pocos cuidados, salvo regarlos con regularidad si no llueve. Es importante quitar las flores marchitas a medida que éstas aparezcan, para promover la aparición de nuevas flores.

Begonia (Pixabay.com)

Begonia (Pixabay.com)

Begonia: la mayoría de las especies tiene su hermosa floración durante todo el año. La begonia debe ser regada abundantemente si es que se cultiva en zonas con escasas precipitaciones. El riego debe realizarse siempre que la tierra, donde está sembrada la planta, se encuentre seca.

Geranio (Pixabay.com)

Geranio (Pixabay.com)

Geranio: figura entre las plantas que más se producen y se emplean en Europa con fines ornamentales. De hecho, forman parte del paisaje urbano en numerosas ciudades del centro y sur del continente. Cada año, según las estimaciones, el mercado europeo de geranios comercializa unos 600 millones de ejemplares, de los cuales 250 millones se venden en Alemania y otros 200 millones, en Francia. En España, la cifra es de 15 millones anuales. Son sencillos de cuidar ya que no necesitan de mucha humedad y lucen espléndidos todo el año.

Las flores han cumplido un rol muy importante a lo largo de la historia. Más allá de embellecer y armonizar los espacios con su innumerable despliegue de formas, colores y aromas, su principal propósito es ayudar a la reproducción de las plantas. Cuando los insectos, pájaros y algunos murciélagos se acercan a mirar la flor y absorben su néctar, sin saberlo están polinizando las plantas moviendo el polen de plantas de los estambres masculinos a los pistilos femeninos.

Las flores pueden alimentar igualmente a los insectos, a los pájaros, a los animales y a los humanos y asimismo proporcionar medicinas naturales para ellos.

Además, proporcionan un atributo atractivo a una planta que de otro modo sería simple y con hojas verdes solamente. Sin las flores, este regalo hermoso que nos provee la naturaleza, seguramente el mundo sería mucho menos colorido. ¡Cuidémoslas!

Artícul original aquí.

¡Preocupante! Tiramos 8 millones de toneladas de plástico al mar cada año

http://www.elciudadano.cl/

Que los mares y océanos se han convertido en vertederos es una realidad aceptada ya por muchos expertos, la única incertidumbre es cómo de grande es el basurero.
Según la primera estimación de cuánto plástico llega a las aguas cada año en todo el mundo, la situación es mucho peor de lo que se esperaba.
El año pasado se vertieron al mar una media de ocho millones de toneladas de plástico desde 192 países con costa, según un estudio publicado en Science.
Es una descomunal masa entre 10 y 1.000 veces mayor que la que habría flotando, es decir, como con los icebergs, el problema de la contaminación marina puede ser monstruosamente mayor de lo que se aprecia desde la superficie.
Si se colocara toda esa basura a lo largo de las costas de la Tierra, habría cinco bolsas de la compra llenas de plásticos cada 30 centímetros, dice Jenna Jambeck, investigadora de la Universidad de Georgia y coautora del estudio. La masa de residuos crecerá cada año, dice. Este año se lanzarán al mar más de nueve millones de toneladas y, en 2025, 16 millones de toneladas.
Hasta ahora, varios trabajos habían estimado cuánto plástico hay ya flotando en el mar, pero ninguno se había propuesto calcular cuánto llega desde tierra cada año.
El equipo de Jambeck lo ha hecho en base a datos oficiales de producción de plásticos, renta de cada país y gestión de residuos. Su estudio se centra en las poblaciones costeras, las que viven a una distancia de hasta 50 kilómetros del mar y el trabajo ha englobado zonas en las que habitan unos 2.000 millones de personas.
Los autores consideran que el origen de los residuos que acaban en el mar está en todo ese plástico que se tira de mala forma (por ejemplo en vertederos a cielo abierto o como desperdicios en el suelo) y que escapa a los servicios de recogida de basuras. Una fracción, mayor o menor dependiendo de las condiciones en cada país, acabará en el mar.
El estudio ha calculado esa fracción en base a datos de EE UU y después los ha extrapolado al resto usando varios rangos de conversión.
Los cálculos indican que en 2010 se produjeron 99,5 millones de toneladas de residuos plásticos en el área estudiada, de las que 31,9 millones fueron mal retiradas, es decir, susceptibles de llegar al mar. De toda esa masa de basura, entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas llegaron al mar (la media serían esos ocho millones de toneladas los que habla Jambeck).
El estudio señala a los 20 países que más contaminan y que, juntos, producen más del 80% de todo el plástico mal gestionado que hay en el mundo. China es de largo el número uno, seguido por Indonesia, Filipinas, Vietnam y Sri Lanka. Más países asiáticos que actualmente experimentan una potente expansión económica como Bangladesh, Malasia o Myanmar también aparecen alto en la lista, intercalados con algunos africanos como Egipto, Nigeria o Suráfrica, entre otros. En el puesto 16 está Brasil, en el 19 Corea del Norte y en el 20, EE UU. Los países con costa de la UE ocuparían el puesto 18, señala el trabajo.
Los autores del estudio calculan que, de no hacer nada, en 2025 se habrán vertido al océano unos 155 millones de toneladas de plásticos. Se trata de una proyección incierta, claro, y además, dicen, hay posibilidad de reducir de forma drástica la llegada de los residuos al mar, por ejemplo, mejorando los sistemas de recogida de basuras.
Uno de los mayores retos es conseguir que esto suceda en los países en desarrollo que copan la lista de los más contaminantes.

Aida. Walipini, el invernadero ecológico que permite cultivar alimentos en cualquier época del año

Escrito por Productos Ecológicos

Walipini, el invernadero ecológico que permite cultivar alimentos en cualquier época del año

Walipini, el invernadero ecológico que permite cultivar alimentos en cualquier época del año

El Walipini, palabra hindú que significa “lugar cálido”, es un invernadero subterráneo y ecológico que permite cultivar alimentos durante todas las épocas del año, incluso en lugares en los climas más fríos.

La ventaja de estos invernaderos ecológicos es que son muy asequibles, ya que su construcción es mucho más económica que la de los invernaderos tradicionales.

Lo increíble del walipini o invernadero ecológico es que combina los principios de calentamiento solar pasivo con una estructura protegida por la tierra. La manera de hacerlo es muy simple:

El Walipini, en términos simples, es un hoyo rectangular en la tierra con dos o tres metros de profundidad, cubierto de una manta de plástico. El área más larga del rectángulo da al sol de invierno (al Norte en el hemisferio sur y al Sur en el hemisferio norte). Una pared gruesa de tierra presionada en la parte de atrás de la estructura y una pared mucho más chica al frente proporcionan el ángulo correcto para el techo de plástico. Este techo sella el hoyo, proporciona un espacio de aire aislado dentro de las dos capas del plástico y permite que los rayos del sol penetren, creando un ambiente cálido y estable para el crecimiento de plantas.

Cualquiera puede construir su propio invernadero semienterrado, donde las plantas de su interior (también para preservar alimentos sin necesidad de electricidad ni electrodomésticos, conservar añadas de vinos y espumosos, o albergar a humanos y animales, si se diseña para ello) obtienen la temperatura constante de la tierra, garantizando la calidez en invierno con respecto a la temperatura ambiente, así como la frescura en verano.

Se trata de un tipo de invernadero ideal para producciones ecológicas compatibles con el respeto al medio ambiente, ya que tienen un mínimo impacto ambiental al no necesitar más energía que la inercia térmica del subsuelo, el calor desprendido por el estiércol animal y la radiación capturada a través del filtrado de los rayos solares.

En el siguiente vídeo se muestra la aplicación estas técnicas y otras, en la Granja ecológica en el Alto de la Paz, Bolivia:

El engaño del reciclaje y el negocio del PACKAGING

http://joanfliz.blogspot.com.es/

Todo el movimiento «ecologico» es una manipulacion, incluido el «problema del calentamiento» y tambien el del reciclado:

Cuando yo era pequeño gran cantidad de cosas que ahora se tiran a la basura para reciclar eran retornables – eso si es ecologico.

 Aquellos que tengáis cierta edad recordareis que las botellas de cerveza, agua, gaseosas, refrescos eran retornables. Para los más jóvenes eso consistía en que la primera vez que comprabas unas cervezas, comprabas las botellas más el líquido. A partir de entonces cada vez que ibas a comprar cervezas tenías que devolver las botellas vacías, ya que si no te las volvían a cobrar.
La botella devuelta era enviada a la fábrica donde se limpiaba, desinfectaba y se volvía a utilizar (esto si era ecologico).
El mismo camión que traía las cervezas, se llevaba las botellas vacías en su viaje de regreso.

Ahora el circuito de moda para esto que antes era tan simple es el siguiente:

Se compra la cerveza + la botella. No hay posibilidad de comprarlos por separado.
La cerveza se bebe y la botella que compras unas y otra vez se tira al contener de vidrio.
Vienen los de la basura y se llevan el contenedor a la planta de reciclaje de vidrio ubicada en un complejo llamado Ecopark, eufemismo moderno para el tradicional basurero.
Se descarga el material en inmensas montañas.
Se pasan por una cinta transportadora y un gigantesco imán separa los restos metálicos.

Luego un ejército de operadores separa el vidrio verde del incoloro, así como plásticos, papeles y todo lo que no sea vidrio que se haya “reciclado” por error.
Mediante cribas se separa el vidrio en trozos de tres tamaños: pequeños, medianos y grandes.
Los trozos grandes y medianos son pasados por máquinas trituradoras para convertirlos en pequeños.
A medida que se tritura hay que separar los trozos de etiquetas que van cayendo mediante otra instalación de aspiración y filtrado.
A la final el vidrio se almacena.
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Tailandia cierra Una isla por los destrozos del turismo

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Esta semana hemos asistido al anuncio, por parte de las autoridades turísticas tailandesas, del cierre de la isla de Koh Tachai al turismo y el motivo no puede ser más desolador: los daños ambientales. A partir del 15 de octubre y por tiempo indefinido, no será posible visitar el parque nacional de Similian, situado en esta isla.

Koh Tachai, situada en la provincia de Ranong fue declarada como la isla más hermosa del país asiático por beachmeter.com, sin embargo, esto no ha sido suficiente para concienciar a los miles de turistas que la visitan cada año de la necesidad de compatibilizar turismo y sostenibilidad. No, nada más lejos. De hecho, según palabras del director general del departamento de Parques Nacionales, Vida Salvaje y Conservación, Tunya Netithammakul, el turismo ha tenido como consecuencias “la aglomeración y la degradación de los recursos naturales y del medio ambiente”.

Con este cierre se pretende dar a los ecosistemas terrestres y marinos la oportunidad de regenerarse antes de que el daño haga que sean irrecuperables. Solo se excluyen de esta media dos centros de buceo de la zona, que podrán seguir funcionando ya que se ha considerado que este tipo de turismo no es dañino y que el buceador, ha sido educado para no dañar la naturaleza. Y en general, así es. Como excepción mencionaría aquellos centros de buceo que organizan feedings y a los buceadores que participan en ellos.

El caso de koh Tachai es el más reciente, pero no será el último, como tampoco ha sido el primero.Recordemos que hace poco la isla griega de Santorini anunciaba su pretensión de controlar el flujo de cruceristas llegados diariamente a la isla a un máximo de 8.000 pasajeros; en ocasiones, llegan a desembarcar hasta 10.000 personas. También la zona costera de Cinque Terre, situada en el norte de Italia y declarada Patrimonio de la Humanidad por su orografía y arquitectura, pretende limitar el número de visitantes que recibe cada verano a 1,5 millones (en la actualidad es visitada por 2,5 millones cada verano). Así, aquellos interesados en visitar la región, tendrán que adquirir un pase a través de una aplicación que además, informará sobre cuál de estos cinco pueblos acumula mayor número de turistas.

Más allá de las acciones que pueda emprender toda autoridad turística con la intención de proteger sus recursos, también podríamos empezar a ejercer cierta responsabilidad los propios viajeros procurando que nuestro impacto en el medioambiente, sea el más leve posible. No se trata de grandes acciones, no. Son sencillos gestos… como no sacar una cría de delfín del mar para hacernos selfies con ella hasta provocar la deshidratación y muerte del pequeño mamífero marino; no ir a zonas de desove de tortugas marinas a montar a los niños en el caparazón de los animales hasta que huyan despavoridas en busca de otra zona de anidamiento; recoger la basura a nuestro paso por el Parque Nacional de Doñana cuando vamos de romería… Pequeños detalles que pueden hacer mucho por el ecosistema en el que estamos de visita.

Viajar abre las fronteras de nuestro pequeño mundo, facilita el contemplar otras perspectivas y amplia nuestra cultura, entre otros beneficios, pero tenemos que ser conscientes de que ciertas actividades turísticas tienen un impacto negativo en el entorno que estamos visitando, que estamos invadiendo durante unos días, para ser más exactos. Si vamos a un parque natural, o a unas ruinas mayas en una zona selvática, tal vez lo más conveniente no sea encender una hoguera, tirar basura o gritar, ya que ponemos en peligro o perturbamos de algún modo el ecosistema de aquellos que allí habitan, animales y plantas. El ejemplo es claro: ¿te gustaría que alguien fuese a tu casa a ensuciarla o a cambiar los muebles de sitio? ¿No? Pues piensa en estos términos la próxima vez que viajes a un entorno natural paradisiaco y tal vez, solo tal vez, no sea necesario cerrar más islas.

LA ISLA DE PLÁSTICO AFECTA A 267 ESPECIES ALREDEDOR DEL MUNDO

La Sopa de Plástico, también conocida como Sopa de Basura, Sopa Tóxica, Gran mancha deBasura del Pacífico, Gran Zona de Basura del Pacífico, Remolino de Basura del Pacífico y otros nombres similares, es una zona del océano cubierta de desechos marinos en el centro del océano Pacífico Norte, localizada entre las coordenadas 135° a 155°O y 35° a 42°N. Se estima que tiene un tamaño de 1.400.000 km².
Este basurero oceánico se caracteriza por tener concentraciones excepcionalmente altas de plástico suspendido y otros desechos que han sido atrapados por las corrientes de giro del Pacífico Norte (formado por un vórtice de corrientesoceánicas). A pesar de su tamaño y densidad, el lote de basura oceánico es difícilmente visible mediante fotografías satelitales y no es posible localizarlo con radares.

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Aida. Ideas geniales de macetas para plantar tus hierbas y verduras

El encanto de un jardín – o de un pequeño espacio dedicado a la jardinería dentro de tu casa – es también responsabilidad de la belleza y creatividad de las macetas que acogen tus plantas. Contar con el mismo modelo de maceta, con los mismos colores y formas puede dejar de sacar provecho de la belleza de tushierbas y plantas.

Añade color a tus macetas: contenedores azules, naranjas o amarillos pueden resaltar los colores naturales de tus plantas y dar una alegría instantánea a tu jardín. Puedes pintar de azul tuplanta de tomate o de amarillo tu planta de perejil, los contrastes consiguen resultados increíbles.

Si no tienes espacio en tu casa, la mejor opción son las macetas colgadas. Puedes dar más encanto a este invento colgando cestas con tus plantas dentro. Combinación de hierbas aromáticas dentro de una bonita cesta presa en el techo es una pieza decorativa muy bonita.

Sea creativo y ecológico, recicla envases, cajas y contenedores usados, convirtiéndoles en macetas o jardineras. Las viejas cajas de madera tiradas a la basura por las fruterías son excelentes macetas para crear una mini huerta dentro de casa. Utiliza también viejas tazas de café, ollas antiguas o aquel contenedor de tinta oxidado de tu garaje.

Cultiva flores comestibles para dar vida y color a tus platos de ensalada.

Combina macetas de diferentes tamaños y texturas para crear un jardín democrático. Prueba mezclar pepinos, tomates y pimientos, el resultado, además de saludable, es muy bonito estéticamente.

Sea cual sea tu maceta, asegúrate de ubicarla en un local donde reciba sol y que pueda ser accedido fácilmente. Esto, además de dar destaque a la maceta para que sea apreciada, también facilitará tus tareas de jardinería, como poda o riego y permitirá que recojas hierbas frescas mientras preparas la comida. Coloca tu maceta en la puerta de la cocina, en la encimera o al lado de tu silla de cocina favorita.

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El ecologismo de las abuelas.

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En la cola del supermercado, el cajero dice a una señora mayor que debería traer su propia bolsa de la compra porque las bolsas de plástico son dañinas para el medio ambiente

La señora pide disculpas y explica: “Es que en mis tiempos no pensábamos en la ecología”

El empleado le contesta:
Ése es el problema que tenemos ahora. La generación de ustedes no se preocupó de preservar el medio ambiente.
Tiene razón –dijo la señora-. En aquellos tiempos no pensábamos en la ecología.

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Aida. Crean un pavimento que brilla por si mismo y se recarga con el sol

José Carlos Rubio, es un investigador y profesor de la Universidad de San Nicolás de Hidalgo Michoacán, México, desde hace años investiga formas de mejorar y darle funcionalidades adicionales al cemento. Después de mucho esfuerzo, encontró una manera de poder producir pavimento capaz de emitir luz y con una vida útil de cien años.

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Según Rubio, el problema más importante en el proceso fue el hecho de que el cemento es un cuerpo opaco, que no permite que la luz lo atraviese. Luego de mucho estudio y diversas experiencias logro una solución.

El investigador explicó cuál es la lógica detrás de esta invención. El cemento es un polvo que cuando se añade a agua se disuelve como un comprimido efervescente. En este punto el material empieza a asemejarse a un gel muy fuerte y resistente, mientras que se forman escamas cristalinas, pero estas escamas son completamente indeseables.

Para resolver el problema, Rubio se dedicó a cambiar la estructura del cemento, para eliminar las escamas y dejarlo por completo en forma de gel, logrando así absorber la energía del sol, para luego devolverla al medio ambiente en forma de luz. Este cemento “brillante” se hace con una base de arena y arcilla, y el único desperdicio de su fabricación es el vapor de agua.

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El cemento puede absorber la energía del sol durante todo el día, y permanecer iluminado hasta por 12 horas. Además, el investigador explica que es posible controlar la intensidad de la luz para evitar que el brillo sea molesto para ciclistas y motoristas, y el material puede ser de color azul o verde. Lo mejor de todo es su vida, hasta un centenar de años.

La tecnología está siendo adaptada para la comercialización y los científicos también están estudiando su inclusión en yeso y otros productos de construcción como una alternativa natural para reducir el consumo de energía en entornos donde la iluminación se hace necesaria.

Ecocosas

Aida. HomeAgricultura ecológicaLas 10 verduras más fáciles de plantar en casa. Las 10 verduras más fáciles de plantar en casa.

La jardinería está de moda. Y ¿por qué no? Plantar unas cuantas semillas en su tejado o en su patio trasero produce resultados orgánicos, deliciosos y ahorro de dinero, también. Además, abril es el mes nacional de la jardinería. Aquí le mostramos algunos cultivos y consejos sobre cómo hacerlos florecer.

Cesta de frutas y verduras ecológicas

http://www.productosecologicossinintermediarios.es/Cesta-frutas-y-verduras

Frutas y verduras de temporada.
Para comer de una forma sana, equilibrada y respetando el medio ambiente.

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Tomates

Originaria de América del Sur, esta roja y regordeta planta herbácea perenne es rica en nutrientes como la niacina, potasio y fósforo, antioxidantes como licopeno, pigmentación y caroteno y vitaminas A, C y e. Los tomates pueden aportar un jugoso sabor a una variedad de platos como pastas, bocadillos y ensaladas.

Después de que la última helada del invierno se haya descongelado, elija un lugar en el patio que reciba mucha luz solar y pruebe el nivel de pH del suelo – que deseablemente esté entre 6 y 7. (Para aumentar el nivel de Ph, agregar Cal. Para reducirlo, añadir azufre.) Repartir compost en esta área y mezclarlo con el suelo. Cavar un agujero para cada semilla, dejando al menos 15 centímetros entre semillas, cubrirlas y presionar firmemente en el suelo. Regarlas con una botella de aerosol un par de veces por semana.

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Rábanos

Existentes en tonos rojo, morado y blanco, estos tubérculos fueron cultivados`por primera vez hace miles de años en Europa. Los rábanos son una gran fuente de potasio, ácido fólico, magnesio y calcio y son usados comúnmente en aderezos de ensalada o como guarnición para ensaladas.

Los rábanos crecen en el suelo con un nivel de pH de alrededor de 6 o 7.  Escoja un lugar soleado en su jardín y plante las semillas un centímetro y medio por debajo de la superficie del suelo con dos centímetros y medio de espacio entre cada una. Regar ligeramente cada dos días. Los rábanos se cultivan muy rápidos y deberían estar listos para cosechar en varias semanas. No espere demasiado, o empezarán a deteriorarse.

PhotobucketCalabacín

Calabacín

A finales de 1800, de una mutación espontáneas de verano surgió el primer calabacín en Italia. Normalmente tiene forma de pepino. Esta verdura, amarilla o verde, es baja en calorías y rica en potasio, ácido fólico y manganeso. El calabacín puede ser hervido, frito o al vapor como una sabrosa guaqrnición o rellenos y al horno como un plato exquisito.

En un montículo de compost de 15 centímetros de  alto y dos metros de ancho, sembrar varias semillas de calabacín. El espacio entre cada montículo será aproximadamente de medio metro de distancia, regar abundantemente cada día y esperar a que brote en un par de semanas. Deberían estar listos para cosechar un mes más tarde.

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Remolacha

Evolución de las plantas silvestres en el Mediterráneo, la remolacha, tiene una raíz carnosa que puede ser hervida y comida, añadida a una ensalada o utilizada para hacer sopa. La betaina, uno de los nutrientes principales en esta verdura de profundo color rojo o púrpura, es conocida por mejorar la salud cardiovascular.

Limpiar y fortalecer las semillas sumergiéndolas en agua a temperatura ambiente durante un día. Arar la tierra y quitar las piedras de la parte superior. Cada 2 centímetros planta una semilla y regar por lo menos una vez al día.

PhotobucketZanahoria

Zanahorias

Esta verdura de raíz bienal fue domesticada primero durante el siglo x en el Afganistán de hoy en día. Rica en vitamina A, antioxidantes y fibra dietética, el color naranja de la zanahoria es el resultado del caroteno que sintetiza cuando crece. Las zanahorias son deliciosas como un snack saludable,  al vapor o incluso al horno en un pastel.

Dejando varios centímetros entre agujeros, excavar a menos de 2 centímetros de profundidad y un sembrar un par de semillas  en cada uno. Asegúrese de que el suelo permanece húmedo pero recuerde regar menos cuando las zanahorias empiezen a crecer.

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Espinacas

En primer lugar se encontraron formas tempranas de esta planta anual en el mundo antiguo en el subcontinente indio. Alta en calcio y hierro, esta verdura de hoja verde se come de múltiples formas.

Mezclar la tierra con compost y plantar las semillas de espinacas a  menos de 2 centímetros de profundidad, colocándolos al menos a 5 centímetros de distancia para dar espacio para el crecimiento. Mantener el suelo húmedo.

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Guisantes

Datan de la edad neolítica en Jordania, Siria y Turquía, los guisantes crecen en la vaina de la semilla de una leguminosa. Una buena fuente de vitaminas A, B y C, estas pequeñas esferas verdes pueden ser asadas para un sabroso aperitivo o utilizadas en frituras, guisos y sopas.

Cultivar el suelo con compuestos ricos en nutrientes. Tenga en cuenta que su suelo debe escurrir bien a fin de que los guisantes florezcan. El espacio entre bcada semilla debe de ser de varios centímetros de distancia y siembre a 2 centímetros de profundidad. Las semillas recién plantadas requieren de 1 centímetro de agua cada semana, mientras que las plantas más maduras necesitan 2.

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Pimientos

Nativos de centro y Sudamérica, estas verduras verdes, amarillas, rojas o naranjas tiennen un rango de sabor desde el picante al dulce. Contienen nutrientes como tiamina, folato y manganeso y pueden ser cocinadas con arroz y carne o en ensaladas, salsa y pasta.

Crecen mejor en tierra caliente, sembrar las semillas a 15 centímetros de distancia. Regarlas frecuentemente, mantener el suelo húmedo, o pueden saber amargos una vez cosechados.

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Lechuga

Disfrutado en el antiguo Egipto como afrodisíaco, la lechuga es una buena fuente de ácido fólico y vitamina se utiliza A. Como el principal ingrediente en la mayoría de las ensaladas, esta verde hoja vegetal, de los cuales hay docenas de variedades comunes, también puede servir de relleno para hacer bocadillos, hamburguesas y tacos.

Asegúrese de que las semillas esten plantadas entre 20 y 40 centímetros de distancia y regarlas cada mañana. Evitar hacerlo por la noche, ya que esto podría causarles enfermedades.

PhotobucketCebolla

Cebolla

La cebolla es rica en fibra dietética, ácido fólico y vitamina C. Estas hortalizas en forma de bulbo añaden sabor a una variedad de alimentos, como salsas, sopas, ensaladas, guisos y mucho más.

Arar la tierra a 15 centímetros de profundidad. Plantar las semillas a un par de centímetros de profundidad y varios centímetros de distancia.

Fuente: Productos Ecológicos Sin Intermediarios

Los árboles ‘duermen’ por la noche

Científicos europeos observan movimientos de hasta diez centímetros en ejemplares de 5 metros de alto
Científicos de Austria, Finlandia y Hungría han demostrado que los árboles se mueven durante la noche, es decir, que ‘duermen’. En concreto, han observado movimientos de hasta diez centímetros, en árboles de 5 metros de alto, utilizando láser, que no altera el sueño de las plantas, a diferencia de la fotografía convencional.

Imagen: MrsBrown. Fuente: Pixabay.
La mayoría de los organismos vivos adaptan su comportamiento al ritmo del día y la noche. Las plantas no son una excepción: las flores se abren por la mañana, y algunas hojas de los árboles se cierran durante la noche.

Los investigadores han estado estudiando el ciclo de día y noche en las plantas durante mucho tiempo: el sueco Carlos Linneo observó en el siglo XVIII que las flores siguen abriéndose y cerrándose en un sótano oscuro, y Darwin registró el movimiento nocturno de las hojas y tallos de las plantas y lo llamó «sueño».

Pero aún hoy en día, este tipo de estudios sólo se han realizado con pequeñas plantas cultivadas en macetas, y nadie sabía si los árboles duermen también. Ahora, un equipo de investigadores de Austria, Finlandia y Hungría ha medido el movimiento del sueño de árboles adultos utilizando una serie temporal de nubes de puntos escaneados por láser, que constan de millones de puntos cada una.
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