Aunque es el segundo planeta desde el sol y lleva el nombre de la diosa romana del amor, Venus no es nada agradable, al menos desde el punto de vista de la hospitalidad.
Para empezar, su temperatura superficial roza los 900 grados centígrados, haciendo de Venus el planeta más caliente del sistema solar.
Pero hay algo peor: una cubierta gruesa de dióxido de carbono con hasta 92 veces la presión de la atmósfera terrestre esconden un paisaje completamente seco. Las nubes opacas que bloquean nuestra visión de la superficie son de ácido sulfúrico.
Como se pueden imaginar, el estudio de Venus ha sido difícil. Pero poco a poco, los científicos están aprendiendo más sobre el vecino más cercano del planeta Tierra. Éstos son algunos de los mayores misterios en relación al objeto más brillante en nuestro cielo después del Sol y la Luna.
[youtube=http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=HqFVxWfVtoo]
El clima en Venus es Terrible
A Venus se le conoce como el «gemelo malvado» de la Tierra . En términos de tamaño, composición y posición orbital, Venus es prácticamente un planeta infernal .
En las edades tempranas de Venus, los científicos piensan que el planeta era mucho más parecido a la Tierra, con océanos y un clima mucho más frío.
Pero en unos pocos millones de años, un efecto invernadero desbocado parece haber tomado el poder. Venus esta aproximadamente un tercio más cerca del Sol que la Tierra, por lo que recibe el doble de cantidad de luz solar.
Este calor extra genera una mayor evaporación de agua de la superficie. A su vez, el vapor de agua atrapa más calor, se calienta mas el planeta, provocando una mayor evaporación, y así sucesivamente, hasta que los océanos desaparecieron.
Determinar exactamente cuándo y cómo Venus se convirtió en un horno ayudará para predecir el clima cambiante de la Tierra, y así evitar la posibilidad de compartir el destino de Venus.
Súper-rotación de la atmósfera
Venus gira sobre su eje mucho más lentamente que la Tierra (un día venusiano dura 243 días terrestres), lo que es más largo que el año de Venus, que tiene 224 días terrestres.
Contradiciendo esta pirueta, los vientos en la cima de las nubes de Venus puede llegar a 360 kilómetros por hora, o aproximadamente 60 veces el ritmo de giro del planeta.
(Los vientos son causados en parte por la rotación del planeta.)
Proporcionalmente, si las mismas ráfagas soplaran en la Tierra, los vientos ecuatoriales de las nubes alcanzaría unos sorprendentes 9,650 kilómetros por hora.
Venus gira al revés
Todos los planetas del sistema solar orbitan el Sol en sentido anti horario y casi todos giran en la misma dirección de sus ejes. Pero Venus no, tiene rotación retrógrada (Urano lo hace, también).
En Venus, en otras palabras, el sol sale por el oeste y se pone por el este.
Este giro hacia la derecha es probablemente el resultado de una colisión cósmica temprana en la historia de Venus. Muchos cuerpos grandes se precipitaron sobre el sistema solar joven entonces,Una mayor comprensión de la estructura y composición de Venus con los datos de las sondas que llegaran al planeta en el futuro deberán revelar qué fue lo que envió al planeta en su revolución hacia atrás.
El extraño rayo invisible
Sigue siendo una pregunta abierta si el rayo existe en las nubes de Venus. A pesar de la nave espacial Venus Express ha «escuchado» el rayo electromagnético estático que característicamente se produce en la Tierra, las cámaras todavía no captan el destello óptico
¿Cómo este rayo se puede formar? es misterioso. En la Tierra, un papel fundamental para la aparición de los rayos es desempeñado por los cristales de hielo dentro de las nubes, un ingrediente que es escaso en la atmósfera extremadamente árida de Venus.
¿Vida extraterrestre?
Aunque es una posibilidad muy remota,hay un argumento plausible para la vida de Venus, no en la superficie del planeta recalentado, pero si en las nubes.
A unos 30 kilómetros de altura, debe haber un lugar habitable, donde la presión y la temperatura son similares a la Tierra.
Para la energía, las criaturas flotantes semejantes a las bacterias podrían utilizar mucho sol o productos químicos en las nubes.
Por supuesto, estos seres tendrían que tolerar el ácido sulfúrico, aquí en la tierra estas criaturas son llamados extremófilos , estas formas de vida prosperan incluso en los entornos más hostiles.
Vale la pena explorar las nubes, por muchas razones, y uno de ellos es la posibilidad de algún tipo de vida exóticas.