El gobernador de Isparta, Memduh Oğuz, entregó diplomas a 102 policías como reconocimiento por el excelente servicio prestado y elogió a los agentes de seguridad por no haber hecho concesiones a los manifestantes.

Según Oğuz, muchas personas llegaron a Isparta, en el sudoeste de Turquía, procedentes de las ciudades y los distritos vecinos. En total, alrededor de 6.000 personas participaron en las protestas que se organizaron en la provincia de Isparta, escribe el diario ‘Hürriyet’.

“Los manifestantes recogieron piedras y se pusieron máscaras para crear problemas. Pero nuestra Policía no respondió a sus provocaciones y mantuvo una actitud serena”, dijo Oğuz.

La ola de protestas en Turquía estalló en mayo. Lo que empezó con una acampada contra la construcción de un centro comercial en el estambulita parque Gezi desembocó en multitudinarias protestas, tanto en Estambul como en otras grandes ciudades del país. Los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas policiales por toda la nación dejaron varios víctimas mortales y unos 5.000 heridos. La quinta víctima, Ali İsmail Korkmaz, de la ciudad de Eskişehir, murió de un infarto.