Israel anunció el jueves 7 de noviembre de que está totalmente en desacuerdo con la nueva propuesta acerca del programa nuclear de Irán, que los Estados Unidos tienen previsto proponer en la Conferencia de Ginebra de dos días de duración que comienza en el día de hoy.

El primer ministro Binyamin Netanyahu, cuando se reunió con el Secretario de Estado de EE:UU. John Kerry en Jerusalén el miércoles por la noche, con amargura acusó al gobierno de Obama de ceder a la posición de Irán respaldado por Rusia. Si Teherán no cumple con el acuerdo, la propuesta de EE.UU. deja a Irán con la capacidad para enriquecer suficiente uranio de grado de armas en 10 días para construir varias armas nucleares.

Esta propuesta de EE.UU. insta a Irán a suspender el enriquecimiento de uranio de hasta el grado del 20 por ciento (a salto corto de armamento) y la construcción lenta de la planta de agua pesada de Arak para la producción de plutonio. A cambio, los EE.UU. ofrecen un comienzo en el alivio selectivo de las sanciones. Esta propuesta puede ser aprobada por las seis potencias en la conferencia de Ginebra.

Kerry recordó su promesa de que “ningún acuerdo es mejor que un mal acuerdo.” Israel dice que este acuerdo es malo, porque deja a Irán con todas las acciones para seguir acumulando uranio enriquecido al 20 por ciento y la posibilidad de prorrogar la producción de uranio de bajo grado al 5 por ciento sin restricciones.

Fuentes de DEBKAFILE informan que el problema palestino no ha salido a relucir en ninguna de las dos conversaciones que Kerry mantuvo con Netanyahu el miércoles. Ambos fueron dominados por la fila de Irán y terminó con diferencias tan amplias como nunca.

Israel acusó a Washington de capitular ante el plan que Moscú y Teherán le entregaron al presidente Barack Obama la semana pasada. Ese plan, según nuestras fuentes, implica la suspensión del funcionamiento de 10.000 centrifugadoras en todos los grados de enriquecimiento (3, 5 y 20 por ciento). Sin embargo, Irán cuenta con un total de 19.000 máquinas de las cuales sólo 9.000 están activas de todos modos. Por lo tanto, la oferta de congelar 10.000 centrifugadoras ya inactivas era un subterfugio. Sin embargo, este plan está siendo presentado por los rusos y ahora también por los americanos, como una gran concesión iraní.

La verdad es que a Irán se le permitió mantener sus centrales atómicas llenas de centrifugadoras intactas, operativas y disponibles para su uso en cualquier momento.
Esto significa que si Teherán decide mañana renegar de su acuerdo con Washington y las potencias del mundo, después de su aprobación en Ginebra, se mantendrá la capacidad de reanudar las operaciones de centrifugación en su totalidad y dentro de 10 días acumular suficiente material para construir varias bombas u ojivas nucleares.

En el momento en que Washington o el organismo de control nuclear quieran reaccionar, será demasiado tarde. Irán tendrá la bomba
La semana pasada, Moscú afirmó que Irán había aceptado solo esta admisión y desmintió la insistencia de Teherán de querer frenar su programa nuclear en su totalidad y además “frenar los procesos de fabricación de armas.” ya que su programa es con fines pacíficos y se expone como la denegación de pruebas de que Irán estaba comprometido en el desarrollo de armas nucleares lo cual según Moscù es falso.

Según nuestras fuentes, la “restricción” en la oferta sólo se refiere al proceso de miniaturización de una bomba nuclear para su uso en una ojiva o en un misil que se pueda dejar caer desde un avión.

En resumen, por lo tanto, el presidente de EE.UU. ha aceptado en esencia el actual programa nuclear de Irán como si se tratara de una “fotografía” y lo ha congelado en su situación actual. Teherán puede colocar el desarrollo nuclear en suspensión, sin renunciar a un solo componente de su programa.

La nueva propuesta estadounidense rompió la superficie este miércoles, cuando las siete delegaciones se reunieron en Ginebra para sesionar en la mañana, en el momento en que un portavoz anónimo de los EE.UU., dijo a los periodistas que Estados Unidos se propone ahora, como un primer paso, a que Iràn ponga fin a su programa nuclear y de esa forma poder avanzar más lejos. A cambio, Washington ofreció “, el alivio de las sanciones reversibles temporales muy limitadas.”

El portavoz dijo: “Esta fase debe incluir los niveles de enriquecimiento de uranio de Irán, sus existencias de material, así como la supervisión internacional.”

Israel no aprueba este plan.