El cierre de la investigación está a la espera de un análisis reclamado a la Agencia Tributaria
La Audiencia rechaza levantar la imputación al secretario de las infantas
Carlos García Revenga, en el centro, llega a los juzgados de Palma.
El juez del caso Urdangarin, José Castro, ha resuelto una de las incógnitas abiertas en la investigación. Ha documentado de manera precisa y minuciosa el rastro dejado por un movimiento de 150.000 euros, una partida que entró y salió el mismo día, 27 de diciembre de 2006, en una cuenta en Caixabank, abierta por Iñaki Urdangarin y en la que podía disponer con firma como cotitular su esposa, la hija del Rey,Cristina de Borbón.
Por otra parte, la Audiencia de Palma ha rechazado levantar la imputación al secretario de las infantas, Carlos García Revenga.
En la documentación trasladada a las partes, en la causa judicial, consta el uso y dispersión de esta partida. Los datos y las pistas están plasmados en los registros informáticos bancarios durante dos meses. En una providencia del pasado 13 de noviembre, el instructor requirió a la Caixa que identificara cuentas, sumas, cheques, ordenantes y destinatarios de esta partidas entre aquella fecha finalista del año 2006 y el mes de enero de 2007.
Castro ha incorporado al sumario del también llamado caso Nóos el resumen de los traspasos y gastos efectuados por su titular y su mandataria con estos 150.000 euros, una cantidad que llamó la atención a los peritos investigadores por su fugaz permanencia en la cuenta, ni solo un día. El dossier de extractos lo ha librado la entidad bancaria. Hacienda reclamó, además, autorización para sondear judicialmente los movimientos de una cuenta del BBVA.
El instructor tiene asimismo sobre su mesa el último informe del grupo de Delincuencia Económica y Fiscal sobre gastos y facturas de los duques de Palma, en especial abonos por obras y decoración del palacete de Pedralbes, de Barcelona, propiedad de la pareja, embargado para afrontar la fianza civil de 6,1 millones impuesta a Urdangarin y su socio Diego Torres.
El juez Castro investiga desde hace más de siete meses la existencia de posibles indicios de un supuesto delito de blanqueo de capitales de la Infanta Cristina en la gestión de los presuntos fondos sucios generados por su esposo Iñaki Urdangarin. Por indicación -y apremio- del instructor la Agencia Tributaria, culmina su última aportación a la causa, sobre gastos personales y liquidaciones fiscales de los duques de Palma y su sociedad Aizoon. La incógnita judicial sobre la posible nueva imputación judicial o no de la infanta se resolverá previsiblemente en semanas.