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La filosofía del consumo
La sociedad, explicó, inventó a inicios del siglo XX la estructura del consumo, un esquema según el cual, si uno puede comprar todo lo que quiera comprar, será feliz. Durante casi 50 años, la gente creyó en ello, pero a mediados del siglo XX la sociedad comenzó a darse cuenta de que no es así, agregó. Entonces surgió «una filosofía del consumo» consistente en tener para poder hacer y hacer para poder ser alguien en la vida.
«El razonamiento es perfecto. La trampa es maravillosa. Tienes que tener para poder hacer y tienes que hacer para poder ser. Tú quieres ser, tienes que tener. Dedícate a tener, porque, si no tienes, no haces, y si no haces, no eres», subrayó el famoso escritor.
La importancia es lo que eres, no lo que tienes
Sin embargo, agregó, este esquema está tan bien pensado por la sociedad de consumo que «la secuencia entre estas cosas es cierta, solo que el orden está perversamente invertido».
«Lo que en realidad sucede es que tienes que ser para poder hacer, porque si no eres no haces nada y lo que tienes es consecuencia de lo que haces y así debe ser (…).La importancia es lo que eres, no lo que tienes», afirmó Bucay.
A su juicio, nos hemos centrado en ser una sociedad consumista y nos hemos transformado en una estructura social de mercado donde todo se puede vender, olvidándonos de trabajar para ser.
¿Qué es la felicidad?
El autor de ‘El camino de la felicidad’ o ‘Llegar a la cima y seguir subiendo. Claves para un camino espiritual’ ofreció en RT su propia definición de la felicidad.
La felicidad es un camino y no un puerto de llegada
«Yo entiendo la felicidad como la certeza de la convicción de estar en el camino correcto, no como la alegría de lo que has conseguido», indicó. Por eso, agregó, «la felicidad es un camino y no un puerto de llegada».
«Tu pareja es un maestro»
Asimismo, Bucay destacó las lecciones que uno aprende de su pareja y recordó que en la obra ‘Amarse con los ojos abiertos’, que escribió junto con Silvia Salina, señala que una pareja es un maestro al que tienes que escuchar como se escucha a un maestro zen.
«Cuando tú discutes con tu pareja, deberías tratar de ver cuál es el aprendizaje que esta discusión está dejándote», aconsejó.
Los avances tecnológicos
El psicoterapeuta también habló acerca de los progresos tecnológicos. «Las redes virtuales acercan a los que están lejos, pero alejan a los que están cerca», destacó.
En su opinión, está muy bien lo de contar a miles de personas lo que uno hace, pero «no hay nada mejor que sentarse en un café con cuatro amigos para hablar de estupideces durante dos horas».
Bucay siempre tan sencillo y cercano, gracias Vania.