Barcos de guerra turcos acompañarán a todos los buques de ayuda turca a los palestinos en la Franja de Gaza, ha anunciado el primer ministro Recep Tayyip Erdogan.

También dijo que Turquía había tomado medidas para no dejar a Israel explote unilateralmente los recursos naturales del Mediterráneo oriental, según la traducción en árabe de los extractos de una entrevista realizada en turco en al-Jazeera.

Sus comentarios se produjeron después de que el partido gobernante en Turquía dijo que los lazos del país con Israel podrían ser normalizados si el Estado judío se disculpara por la muerte de nueve activistas pro-palestinos el año pasado y aceptara que debe pagar una indemnización a sus familias.

Las relaciones turco-israelíes la semana pasada tocaron fondo después de un informe de la ONU sobre el ataque israelí contra un barco de ayuda a Gaza el año pasado en el que  nueve activistas fueron asesinados. El informe de que el bloqueo naval de Israel a Gaza era legítimo, pero su incursión en la flotilla tratando de romper el bloqueo fue «excesivo e irrazonable».

Turquía ha expulsado a los altos diplomáticos israelíes, ha cortado los lazos militares con el país, se ha comprometió a presionar a otras naciones en apoyo de la candidatura de la condición de Estado palestino en las Naciones Unidas a finales de este mes y prometió mayor patrullaje naval turco en el Mediterráneo.

En respuesta, Israel ha sido conciliador. Binyamin Netanyahu, el primer ministro, dijo que el empeoramiento de las relaciones «no fue nuestra elección». «Nosotros respetamos al pueblo turco y sus tradiciones y queremos mejorar las relaciones», dijo Netanyahu.

Israel ha expresado su pesar por la pérdida de vidas a bordo de la flotilla, pero se ha negado a disculparse, diciendo que sus fuerzas actuaron en defensa propia.

Turquía, sin embargo, todavía está buscando una disculpa para normalizar la relación una vez vista como la piedra angular de la estabilidad regional.

«De hecho, no todos los puentes se han quemado con Israel», dijo Huseyin Celik, el vicepresidente del partido islámico gobernante Justicia y Desarrollo. «Nuestra embajada en Israel está abierta, y la embajada israelí en Ankara está abierta. Las relaciones volver a los viejos tiempos, si se disculpa Israel y acepta pagar una indemnización.»

El enfrentamiento con Israel llevó a un fuerte debate entre el partido de Erdogan y la principal oposición, el Partido Republicano del Pueblo, que llamó la política exterior del gobierno «un fiasco», aprovechando las respuestas airadas de los ministros del gabinete, que a su vez acusaron a la oposición de actuar como el «defensor de Israel».