“España reconoce a Israel como patria de los judíos por primera vez“, titulaba ayer el diario israelí Haaretz. Y lo desarrollaba: “La Ministra de Asuntos Exteriores de España presentó una nueva política en el conflicto israelo-palestino este sábado, declarando a Israel patria de los judíos por primera vez y diciendo que el asunto de los refugiados palestinos debería ser solucionado de una forma que no afectara a la estructura demográfica actual de Israel con mayoría de judíos. El discurso de Jiménez antes de la Asamblea General de Naciones Unidas es especialmente dramático a la luz de que España es considerado uno de los países punteros de la UE en el apoyo a los derechos palestinos. Adoptar una postura tan pro-israelí podría llevar a otros países a seguirla.”
En términos más amables la Cadena SER mencionaba que Trinidad Jiménez había respaldado “Palestina sea estado observador en la ONU“, es decir, avalaba el veto que Estados Unidos impondrá a la incorporación de Palestina a la ONU como estado de pleno derecho. Y continúa explicando que la ministra “ha defendido el establecimiento de un Estado palestino, siempre que se consiga a través de las negociaciones “, que es precisamente lo que defendió Netanyahu: que no valen las resoluciones de la ONU sino las negociaciones entre su poderoso estado nuclear y el acorralado pueblo palestino.
Esto supone que la ministra se independiza de lo aprobado en el Congreso de los Diputados (eso que según los demócratas fetén es lo único que representa al pueblo) a propuesta de IU-ICV y una vez rebajado por el grupo socialista en julio de este mismo año, que pedía apoyar negociaciones para el proceso de paz pero que al margen de que las hubiera o mandataba al Gobierno a apoyar “el reconocimiento del Estado palestino, como Estado soberano, contiguo, democrático e independiente que conviva en paz y seguridad con el Estado de Israel” esto es, un Estado libre e igual, no un Estado rebajado: el Congreso se había posicionado por el reconocimiento de un Estado de pleno derecho, no por el veto que Obama impondrá para sacar unos votejos sionistas a costa de los legítimos derechos de un pueblo machacado. Y se salta Trinidad Jiménez la legalidad internacional que marca desde hace 63 años que Palestina tiene derecho a un Estado (la propia ONU vulnerará con el veto de Obama y el aval del discurso de Jiménez las resoluciones de la ONU) y cuyas fronteras no son fruto de la negociación, sino las de 1967 (lo que habría que negociar son muchas otras cosas para que además de recuperar la legalidad se consiga la paz; pero los derechos robados se devuelven sin más, eso no es lo que se negocia en ningún caso).
Más grave es lo descrito en el diario israelí Haaretz pues supone un brutal reconocimiento del carácter etnicista de un Estado por parte de quien se supone que es una ministra de una democracia. Un demócrata no puede defender un Estado judío ni una república islámica ni un reino nacional-católico, ni un país ario, ni… Mucho menos condicionar los derechos humanos (la vuelta de los refugiados al hogar del que fueron expulsados) a que se preserve una composición étnica de ese país. Para que nos hagamos una idea: es como si en la Transición se hubiera condicionado la vuelta de los exiliados a que se preservara la estructura demográfica lograda desde el 36 de mayoría de derechas.
Si un mínimo humanismo fuera tenido en cuenta en la política española Trinidad Jiménez ya habría sido expulsada del gobierno y de su partido, que se dice demócrata y en cuyas filas tiene que haber miles de defensores de los derechos humanos incluidos, obviamente, los de los palestinos. En tales condiciones el Presidente del Gobierno pediría perdón por la indecencia democrática expuesta en nombre de su gobierno y haría una defensa de los derechos humanos y la legalidad internacional. Pero no estamos en ese camino, sino en el contrario y, de nuevo, de la manita del socio favorito, el PP.
http://blogs.tercerainformacion.es/iiirepublica/2011/09/26/trinidad-jimenez-y-la-democracia/
deberias averigua cuantos judios hay en el gobierno… y sobre todo en ambos partidos mayoritarios…
Entenderas entonces lo que le pasan a otros paises tomados gracias a infiltrar entre las elites politicas a semejantes individuos que anteponen los intereses de israel a los de su pueblo de acogida…. si hubiera el mismo numero de musulmanes qeu de judios en la direccion de los partidos politicos, los medios de comunicacion echarian chispas….
sobre la ministra solo hay que opinar una cosa…. esta implicada en la matanza de tripoli?…. pues si de alguna forma esta vinculada, no tiene mayor calificativo que criminal de guerra