Los indignados tienen previsto volver a congregarse en la madrileña Puerta del Sol el próximo viernes para «vivir» la apertura de la campaña electoral, a pesar de la prohibición de la Junta Electoral de realizar manifestaciones y concentraciones en diferentes zonas de la capital.

Esta acción, consensuada en la última Asamblea General de Sol, representa «la continuidad de la desobediencia civil colectiva que se viene realizando desde el 15 de mayo«, según se recoge en un comunicado de la web de Acampada Sol.

Precisan además que «el objetivo es la reflexión ante la campaña electoral que se avecina y las restricciones en el uso de los espacios públicos, que quedan reservados para los partidos políticos negando otras formas de organización y participación democráticas».

La prohibición de la Junta Electoral de Madrid, recogida en un edicto publicado el pasado 12 de octubre, detalla los locales oficiales y lugares públicos que quedan reservados para la celebración de actos de campaña, entre ellos diferentes calles y plazas como la emblemática Puerta del Sol.

Fue «en respuesta a esta prohibición», cuando un grupo de personas «trabajó la propuesta de invitar a la ciudadanía a reunirse para vivir juntas la apertura de la campaña electoral», según la nota.

Durante la jornada se podrán realizar asambleas, debates electorales «no partidistas», explicaciones de las opciones de voto y cualquier acción que «promueva el debate democrático y ciudadano en el espacio público».

Además, está previsto que a las 00:00 horas dé comienzo una pegada colectiva de carteles en los que, de forma irónica, se pide el voto para los presidentes de Bankinter, Banco Pastor, BBVA o Banco Santander.

El jueves se celebrará una asamblea para decidir las actividades definitivas para el díaSi bien, las actividades definitivas se decidirán en una Asamblea General Extraordinaria que tendrá lugar el jueves, en la que se propondrá, entre otras iniciativas, que la jornada se utilice para dar a conocer a la ciudadanía el «modelo de cambio social» que se ha ido fraguando durante los casi seis meses de vida del 15M.

Con esta medida, el grupo de trabajo 20-N, busca oponer este modelo a unos programas electorales, «que representan la continuidad de un modelo agotado, insolidario, injusto e insostenible».

Entre las actividades previstas para la campaña electoral, también se contempla convocar una movilización a nivel estatal para el próximo día 13 de noviembre, una iniciativa que será planteada en la próxima Asamblea General de Sol.

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