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En ocasiones las explicaciones científicas son algo sumamente simple. Resulta muy satisfactorio cuando una explicación tiene todo el sentido del mundo y te remite a la “magia de las leyes de la naturaleza”. Pero no siempre es así. Hay científicos creando teorías tan descabelladas que es un poco complicado imaginar cómo llegaron a estructurar ese tipo de argumentos, conoce cinco de estas peculiares teorías a continuación.
1 – Antimateria es materia viajando al pasado.
El concepto de antimateria no es algo muy simple de asimilar: se establece como lo opuesto a la materia capaz de aniquilarse mutuamente cuando entra en contacto con ella, en una reacción explosiva dantesca. Para nada es algo ajeno a los humanos. De hecho, ya hemos sido capaces de detectar antimateria, e incluso logramos aislarla en aceleradores de partículas durante periodos de 15 minutos.
La aplicación más interesante de la antimateria es su capacidad para aniquilar la materia y liberar 90 cuatrillones de veces más energía. Este factor tan espectacular puede ser posible pues dicha aniquilación involucra un juego de viaje en el tiempo. Por ejemplo, la “interpretación Feynman-Stueckelberg” sugiere que la antimateria es materia que va hacia atrás en el tiempo. Entonces, cuando alcanza a la materia normal que va hacia el frente en el tiempo, no son solo dos “objetos” que colisionan, sino un impacto frontal en la cuarta dimensión.
Esta no es más que una de muchas teorías, pero lo increíble es que resulta efectiva en las ecuaciones. La antimateria invierte todos los tipos de cantidades importantes pero, en lugar de generar un nuevo tipo de materia, se obtiene el mismo efecto que multiplicando el tiempo por -1.
2 – La existencia oscilante.
Si arrojas una roca en un lago, irremediablemente el agua oscilará. De la misma forma, si chocan dos agujeros negros a la mitad de la velocidad de la luz, la existencia oscilará. Colisionan de forma tan feroz que el espacio a su alrededor oscila de forma detectable. No es algo particularmente sorprendente, sobre todo si tomamos en cuenta que 60 octillones de toneladas de singularidades están chocando. Einstein supuso estas “ondas gravitacionales” hace más de un siglo.
Una colisión de espacio-tiempo tan poderosa capaz de oscilar la realidad pareciera una invención del cine. Pero los científicos ya detectaron el fenómeno.
El 14 de septiembre de 2015, dos singularidades colisionaron, perturbando el tejido de la realidad. El equivalente a tres masas solares enteras fue convertido en energía de ondas gravitacionales, un proceso tan poderoso que pudimos sentir sus efectos a más de mil millones de años luz de distancia. Cada célula de tu cuerpo fue gentilmente sacudida por un par de agujeros negros colisionando a la distancia. La detección de esto se hizo en el Laser Interferometer Gravitational-wave Observatory (LIGO).
El LIGO está formado por dos grandes complejos ubicados en lados opuestos de los Estados Unidos, de forma que pueden usar ese trozo de continente como un atraso de 10 milésimas de segundo. En cada complejo, un conjunto de láseres aislados son monitoreados constantemente. Tienen una precisión tan exacta, que la más mínima variación en la lectura indica que el universo cambió.
La detección de ondas gravitacionales es tan impresionante que solo la teoría de la idea llevó a Russell Alan Hulse y Joseph Hooton Taylor a ganar el Premio Nobel de física en el año de 1993.
3 – El espacio-tiempo líquido.
La relatividad general es la teoría que se ocupa de explicar cómo funcionan los objetos masivos en el Universo. Por otro lado, la mecánica cuántica se ocupa de esos “pequeños detalles”. ¿Pero, en qué punto convergen? Es algo complicado. Hasta ahora, los intentos de crear una gran Teoría Unificada no han hecho más que venir a derribar todo aquello que creíamos conocer sobre el espacio y el tiempo.
Hay dos teorías sorprendentemente eficaces para explicar el Universo, pero son polos opuestos. Esa búsqueda por hacer coincidir la relatividad general con la mecánica cuántica (o encontrar algo más para sustituir ambas) es mucho más difícil que entrar en su corazón 🙁
Se han sugerido multitud de teorías físicas para resolver el problema, con nombres tan extravagantes como geometrodinámica, gravedad cuántica de bucles, etc. Uno de estos intentos es la teoría del vacío superfluido. Segúnesta idea, el espacio se asemeja a un fluido sin fricción. En este modelo, toda la realidad que percibimos no sería más que las olas de un océano – aparentemente con mucha acción sucediendo sobre una superficie lisa, pero esa superficie en realidad sería el resultado de muchas más partículas actuando de una forma singular.
Es una teoría confusa y osada, por lo que ya hay gente intentando comprobarla. Estudios con rayos-X de alta energía y rayos gama de la Nebulosa del Cangrejo han refinado la hipótesis, confirmando que si el espacio fuera un fluido, estaría totalmente libre de fricción.
4 – El Universo de un único electrón.
¿Alguna vez te has preguntado cosas como: y si todos los seres humanos fuéramos un mismo ser? Los físicos ya lo hicieron, pero no creas que usaron sustancias alucinógenas, ellos prefieren algo más complicado como la mecánica cuántica.
John Wheeler fue responsable de ideas tan descabelladas como los reactores neutrónicos, moderadores de neutrones, la expresión “agujeros de gusano espaciales” y por darse cuenta que los agujeros negros quizá tenían algo que ver con la gravedad. Ese hombre también fue responsable por la “Hipótesis de un único electrón”, donde cada electrón existente – en tu cerebro, en el cerebro de tu vecino, en el cerebro de Justin Bieber – son todos “el mismo electrón”, que viaja adelante y atrás en el tiempo para ser todo electrón individual.
En otras palabras, las mismas cargas negativas que llevan químicamente estas palabras hasta tu nervio óptico son las mismas que podemos encontrar en Alfa Centauri, en la cola de un camello en el medio del desierto o en el Oscar que ganó DiCaprio.
Wheeler debatió esta idea con Richard Feynman, uno de los físicos más condecorados del mundo, y a Feynman no le pareció ninguna estupidez. Tanto así que habló de la teoría en su discurso de aceptación del Premio Nobel, dándole el crédito por inspirar a la hipótesis de la antimateria que viaja en el tiempo, que tocamos en el primer punto de la lista.
El “Universo de un único electrón” funciona pues los electrones son totalmente indistinguibles. Cada electrón es exactamente el mismo. No se construyen – son joyas minúsculas de la física saltando dentro y fuera de las constantes fundamentales de la realidad. Y no es una idea absurda sin un parámetro práctico. Muchas tecnologías que involucran a la mecánica cuántica están basadas en esa imposibilidad de distinguirlos.
La única razón por la que esta no es una teoría científica se debe a que, de hecho, no puede refutarse. Solo puedes aceptarla o ignorarla. Y eso que la ciencia es capaz de dar el más severo ultimátum del mundo.
5 – La realidad puede romperse sin previo aviso.
En el budismo se cree que las cosas sin naturaleza inherente representan al vacío. Para la física, el vacío podría ser una bomba de tiempo capaz de aniquilar el Universo. La idea incluso abarca la posibilidad de que el vacío pueda romperse. Los investigadores creen que el vacío es el estado de existencia con más baja energía. Pero, si existiera un estado de menor energía debajo de este, entonces toda nuestra realidad sería como una delgada capa de hielo sobre un lago congelado. Un pequeño agujero haría que todo se hundiera. Un universo enteramente nuevo irradiaría a partir del punto de fractura de la realidad, algo que llaman “evento de metaestabilidad del vacío”.
Toda vez que los cambios en las leyes físicas tienen que viajar a la velocidad de la luz, obedeciendo las leyes antes de sustituirlas, ni siquiera nos daríamos cuenta cuando el fin llegara. Simplemente dejaríamos de existir.
Una versión de los multiversos ofrece una idea un poco más divertida: menciona que la realidad sería como burbujas de universos estallando constantemente dentro y fuera de la existencia en cualquier instante, entonces nuestro universo es solo uno que aún no se ha destruido caóticamente a sí mismo.
Esta idea parece salida de una borrachera en un bar en lugar de una teoría desarrollada en un laboratorio, pero la verdad es que ya ha sido puesta a prueba por las máquinas más avanzadas que creamos hasta la fecha. Cuando el Gran Colisionador de Hadrones descubrió la masa del bosón de Higgs, fuimos capaces de determinar si nuestro universo era estable. La respuesta fue… más o menos.
El mínimo de masa que el bosón debía tener para que el universo fuera mejor que un globo viejo era de 129.8 GeV. La medición de la masa resultó en 125 GeV. El margen de error de esa masa mínima es de más o menos 5.6 GeV, de forma que el valor se ubica en un punto entre 124.2 y 135.4 GeV. Nosotros medimos 125.1, más o menos 0.2 GeV.
Todos estos números significan que no estamos seguros. Mientras no resolvamos la cuestión de la “realidad rompiéndose aleatoriamente sin ningún tipo de aviso”, la próxima vez que le preguntes si debes comerte la pizza entera, tomarte la cerveza o atascarte de chocolate, la física te dirá que lo hagas. – Cracked