Por Sputnik
Venezuela ha estado luchando por recuperar su oro del Reino Unido desde finales del año pasado, pero el Banco de Inglaterra ha rechazado sus solicitudes de repatriación. Sputnik recuerda otras veces en las que los Gobiernos y los bancos occidentales congelaron o robaron directamente la riqueza soberana de otros países.
La práctica de congelar o confiscar los activos de países que se encuentran en el territorio de los intereses financieros de EEUU y Europa no es nada nueva. Un informe de 1992 de las órdenes de congelamiento de activos extraterritoriales por parte de EEUU menciona más de una docena de casos de congelamiento o confiscación de activos de países como Irak, Panamá, Libia, Irán, Vietnam del Sur, Cuba, Nicaragua y varios otros Estados.
Irán
Los activos de Irán llevan congelados 40 años, desde la Revolución de 1979, cuando Washington cortó las relaciones diplomáticas con el país persa, prohibió las importaciones de petróleo iraníes y congeló unos 11.000 millones de dólares en activos —35.350 millones de dólares en la actualidad, teniendo en cuenta la inflación—.
En vísperas de la firma del histórico acuerdo nuclear de Irán, en 2015, se estimó que los activos congelados de Teherán, incluidos los derivados de la Revolución de 1979, así como las restricciones internacionales ligadas a la energía nuclear, ascendían a por lo menos 100.000 millones de dólares. El presidente del Banco Central iraní señaló que solo se podrían liberar unos 32.000 millones de dólares, un tercio del total, según el acuerdo.
El destino de una gran parte de la riqueza sigue siendo incierto. El 2016, el tribunal estadounidense ordenó el pago de dinero iraní a las familias de los soldados estadounidenses muertos en los atentados con camiones bomba del 23 de octubre de 1983 en Beirut (Líbano) sin tener documentos ni prueba alguna de la participación de Teherán en los ataques.
En 2018, un tribunal de Nueva York ordenó que los activos iraníes congelados se utilizaran para indemnizar a las víctimas del 11S, sin demostrar tampoco que Irán estuviera involucrado en los ataques terroristas. Según los expertos, durante la investigación todos los vínculos condujeron a Arabia Saudí.
Irak
En el caos de la invasión estadounidense de Irak en 2003 desaparecieron miles de millones de dólares. En 2010, una auditoría del Pentágono concluyó que no podía contabilizar 8.700 millones en la pérdida de dinero iraquí de petróleo y gas destinado a la reconstrucción.
Los medios de comunicación estadounidenses informaron esporádicamente sobre el caso de entre 10.000 y 15.000 millones en efectivo, la mayoría tomados de activos estatales iraquíes, que fueron enviados a Irak en 2004 para la reconstrucción pero se quedaron en el limbo.
Libia
Tras la intervención de la OTAN en el país, más de 13.500 millones de dólares vinculados con la familia del exlíder libio, Muamar Gadafi, y congelados en un banco belga se desvanecieron, informó la revista belga Le Vif. Las autoridades belgas, por su parte, insistieron en que esta información era falsa.
En 2012, más de 1.000 millones de euros en activos pertenecientes a la familia de Gadafi y a miembros de alto rango de su Gobierno fueron confiscados en Italia a petición de la Corte Penal Internacional.La Administración Obama congeló el récord de 30.000 millones de dólares de riqueza libia en bancos estadounidenses.
A finales del año pasado, se estimaba que el 70% de los 67.000 millones de dólares de la Autoridad de Inversiones de Libia en activos en el extranjero permanecen congelados por la ONU.
Se estima que unos 12.500 millones de dólares estadounidenses de la riqueza de Libia todavía se mantienen en los bancos británicos.
En 2018, los legisladores británicos consideraron confiscar una parte del dinero libio al estilo de los tribunales estadounidenses, para compensar a las víctimas del Ejército Republicano Irlandés, que se cree que había patrocinado Gadafi en la década de los 80.
“No existe ninguna base legal para que el Reino Unido confisque o cambie la propiedad de los activos congelados de la Autoridad Libia de Inversión (LIA). Pertenecen al pueblo libio”, declaró el jefe de la entidad, Ali Mahmud Hasan Mohamed.
Venezuela
El autoproclamado “presidente encargado” de Venezuela, Juan Guaidó, ha solicitado que la primera ministra británica, Theresa May, detuviera la repatriación de las 31 toneladas de oro que el Gobierno venezolano tiene en el Banco del Reino Unido. El político aseguró que, de esta manera, busca proteger los activos venezolanos.
El secretario de Asuntos Exteriores británico, Jeremy Hunt, apoyó a Juan Guaidó y lo calificó como “la persona adecuada para sacar adelante a Venezuela”, lo que propició que la devolución del oro se alejase aún más.
El jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro, quien asumió el segundo mandato el 10 de enero, calificó la declaración del parlamentario como un intento de golpe de Estado y responsabilizó a EEUU de haberlo orquestado.