En 1983, el psicólogo Howard Gardner propuso la existencia de diferentes tipos de inteligencia. En su libro “Frames of Mind” postuló que la inteligencia no es un conjunto unitario sino más bien una red de capacidades que trabajan de manera más o menos sincronizada.
Con su Teoría de las Inteligencias Múltiples echó por tierra la idea clásica de la inteligencia, proponiendo que todos somos hábiles en diferentes áreas. Hay personas con un talento especial para los números y otras que son excelentes comunicadores.
Por eso, Gardner redefinió el concepto de inteligencia como el “potencial biopsicológico para procesar información que puede activarse en un entorno cultural para resolver problemas o crear productos que son valiosos en una cultura”. Por consiguiente, el tipo de inteligencia que desarrollemos dependerá tanto de los factores genéticos como de nuestra experiencia.
Los diferentes tipos de inteligencia que podemos desarrollar
En un primer momento, Gardner propuso la existencia de 7 tipos de inteligencia, pero luego incluyó dos inteligencias adicionales y con el paso del tiempo se han ido añadiendo otros constructos que amplían nuestra visión de la inteligencia.
1. Inteligencia lógico-matemática
La inteligencia lógico-matemática se refiere a la capacidad de analizar problemas de manera racional, realizar operaciones matemáticas e investigar cuestiones científicas. Implica la capacidad de calcular, cuantificar, considerar proposiciones e hipótesis y realizar operaciones lógicas complejas.
Estas personas utilizan el pensamiento abstracto y simbólico, desarrollan habilidades de razonamiento secuencial y siguen patrones de pensamiento inductivo y deductivo. De hecho, tienen la capacidad de desarrollar ecuaciones y pruebas, hacer cálculos y resolver problemas abstractos por lo que se sienten cómodos en el campo de las Matemáticas y la Física.
2. Inteligencia lingüística
La inteligencia lingüística se refiere a una sensibilidad especial al lenguaje hablado y escrito. Se manifiesta como la capacidad para aprender idiomas y usar el lenguaje de manera eficaz para lograr ciertos objetivos. Los escritores y grandes comunicadores, por ejemplo, poseen este tipo de inteligencia.
Las personas con inteligencia lingüística utilizan el lenguaje para expresar y apreciar significados complejos. Poseen la capacidad de analizar la información verbal y no verbal con gran precisión, comprenden las palabras y el lenguaje no verbal, siendo capaces además de crear productos que involucran lenguaje oral y escrito.
3. Inteligencia espacial
La inteligencia espacial implica la capacidad de reconocer y manipular patrones en un espacio amplio, como la que utilizan los navegantes y pilotos, así como patrones en áreas más confinadas, como el caso de los escultores, cirujanos, ajedrecistas o arquitectos.
Este tipo de inteligencia hace referencia a la capacidad para pensar en tres dimensiones. Las personas que la tienen tienen una extraordinaria capacidad para reconocer y manipular imágenes espaciales detalladas y a gran escala. También suelen tener una imaginación muy activa.
4. Inteligencia corporal-cinestésica
La inteligencia cinestésica o corporal es la capacidad para usar todo el cuerpo o partes del mismo para resolver problemas o crear productos. Las personas con este tipo de inteligencia pueden llegar a ser excelentes deportistas o bailarines, por ejemplo, pero también pueden desempeñarse como cirujanos, mecánicos, fisioterapeutas o carpinteros.
Las personas con inteligencia cinestésica o corporal resuelven los problemas a través de un vínculo profundo mente-cuerpo. Alcanzan un gran control de los movimientos automáticos y voluntarios, de manera que pueden usar su cuerpo de manera altamente diferenciada y competente para resolver diferentes problemas.
5. Inteligencia musical
La inteligencia musical se refiere a las habilidades de interpretación, composición y apreciación de los patrones musicales. Las personas con este tipo de inteligencia tienen la capacidad de reconocer y crear tonos, ritmos y timbres musicales.
Suelen tener una gran facilidad para aprender canciones y ritmos, así como para componer música y tocar diferentes instrumentos musicales. Desarrollan una sensibilidad especial ante la música y pueden detectar fácilmente los tonos incorrectos o los instrumentos no afinados.
6. Inteligencia interpersonal
La inteligencia interpersonal es la capacidad de comprender las intenciones, motivaciones y deseos de otras personas y usarlos para relacionarse de manera asertiva con los demás. Las personas que tienen este tipo de inteligencia desarrollan la capacidad para reconocer y comprender el trasfondo psicológico de los demás.
La inteligencia interpersonal implica, por tanto, el desarrollo de una comunicación verbal y no verbal efectiva. Estas personas notan las diferencias entre unos y otros, son sensibles a los estados de ánimo de los demás y tienen la capacidad de gestionar diferentes perspectivas desde una postura empática.
7. Inteligencia intrapersonal
La inteligencia intrapersonal se vuelca fundamentalmente hacia adentro ya que implica la capacidad de entenderse a uno mismo. Estas personas no solo son conscientes de sus deseos, sentimientos, estados de ánimo y expectativas, sino que utilizan esa información para gestionar de manera inteligente su vida.
Quienes poseen este tipo de inteligencia también desarrollan la autocognición; es decir, comprenden cómo funcionan sus procesos cognitivos (pensamiento, atención y memoria), lo cual les permite tomar mejores decisiones y resolver problemas de manera más eficaz.
8. Inteligencia naturalista
La inteligencia naturalista es la capacidad de percibir las relaciones entre las especies y las personas, reconociendo las posibles diferencias o semejanzas entre ellos. Estas personas son capaces de identificar, discernir, observar y clasificar miembros de grupos o especies de la flora y fauna con relativa facilidad.
Sin embargo, quienes tienen este tipo de inteligencia no solo identifican la variedad que existe en el mundo natural, sino que también tienen una sensibilidad especial hacia el medio ambiente. Sienten una curiosidad natural por investigar su entorno y estar en contacto con la naturaleza.
9. Inteligencia emocional
La inteligencia emocional podría considerarse como una conjunción de las inteligencias interpersonal e intrapersonal ya que implica la capacidad para reconocer y gestionar las emociones propias y ajenas. Propuesta por los psicólogos Peter Salovey y John Mayer, está compuesta por cinco capacidades esenciales: autoconciencia emocional, autocontrol emocional, automotivación, empatía y habilidades sociales.
Por tanto, las personas inteligentes emocionalmente son conscientes de sus estados de ánimo y de las emociones y sentimientos de quienes los rodean, siendo capaces de gestionarlos de manera asertiva. Estas personas tienen una gran granularidad emocional y empatía, pero no permiten que las emociones los desborden sino que cuentan con los recursos psicológicos para encauzarlas adecuadamente.
10. Inteligencia existencial
Gardner definió la inteligencia existencial como “la capacidad para situarse a sí mismo con respecto al cosmos y los rasgos existenciales de la condición humana, como es el significado de la vida y de la muerte, el destino final del mundo físico y psicológico en profundas experiencias como el amor a otra persona”.
Las personas que tienen este tipo de inteligencia tienen una propensión a reflexionar sobre su existencia y pensar sobre el sentido de la vida y lo que podría suceder luego de la muerte. No solo tienen una vida espiritual rica, sino que desarrollan una tendencia a filosofar y cuestionarse todo, basándose en su profunda capacidad de autobservación y observación del entorno.
11. Inteligencia creativa
La inteligencia creativa es el resultado de combinar intelecto con imaginación para dar lugar a una idea o un producto original. De hecho, aunque la inteligencia implica resolver problemas, no siempre conduce a soluciones originales. Las personas con inteligencia creativa, en cambio, piensan fuera de la caja y a menudo llegan a soluciones novedosas.
Este tipo de inteligencia implica la capacidad para ir un paso por delante e imaginar múltiples posibilidades que aún no se han materializado. Se trata de personas con un pensamiento abierto y flexible que son capaces de ver las cosas desde diferentes perspectivas para encontrar respuestas poco habituales o novedosas.
12. Inteligencia colaborativa
En el entorno organizacional y de las redes sociales ha surgido un nuevo tipo de inteligencia que se refiere a la capacidad para trabajar en equipo para lograr una meta común. La inteligencia colaborativa implica una deliberación ordenada que permite a un conjunto de personas crear un mejor conocimiento compartido y tomar decisiones, con mayores posibilidades de superar los retos y dificultades que plantean las distintas actividades humanas en un entorno cada vez más complejo y cambiante.
Se trata de un tipo de inteligencia muy especial ya que implica ser capaces de trabajar con los demás, compartir conocimientos y formas de hacer, para lograr un objetivo común. De hecho, es una inteligencia de carácter eminentemente práctico ya que está más orientada a la acción. Estas personas se sienten cómodas trabajando con los demás y dan lo mejor de sí en esos entornos colaborativos.
¿Son válidos todos estos tipos de inteligencia?
La Teoría de las Inteligencias Múltiples ha sido muy criticada. Muchos psicólogos consideran que se trata de talentos, más que de inteligencias en el sentido más estricto del término. Sin embargo, sin duda es una propuesta atrevida que se diferencia de las concepciones clásicas de inteligencia ya que no se limita a las habilidades que se han reconocido tradicionalmente como las manifestaciones de inteligencia y que se suelen premiar en los contextos académicos.
La idea de que existen diferentes tipos de inteligencia concede un estatus de igualdad a otros talentos, habilidades y capacidades, que no se limitan a la inteligencia lógico-matemática y lingüística. Por tanto, la idea de que existen diferentes tipos de inteligencia presupone una revolución en toda la sociedad al conceder importancia – o al menos poner el foco – en habilidades menos valorizadas por el sistema escolástico tradicional.
Fuentes:
Larivée, S. (2010) Las Inteligencias Múltiples de Gardner. ¿Descubrimiento del Siglo o Simple Rectitud Política? Revista Mexicana de Investigación en Psicología; 2(2): 115-126.
Chen, J. (2004) Theory of Multiple Intelligences: Is It a Scientific Theory? Teachers College Record; 106(1): 17-23.
Gardner, H. (1987) The Theory of Multiple Intelligences. Annals of Dyslexia; 37: 19-35.
Gardner, H. (1983) Frames of Mind: The Theory of Multiple Intelligences. Nueva York: Basic Books.