Mi metáfora favorita para Yidams es el Señor de los Anillos. ¿En serio? ¿Cómo funciona eso, te preguntarás? Divirtiéndome con el verso de Tolkien, “un anillo para gobernarlos a todos…”:
Un Yidam para enfocarlos a todos, Un Yidam para manifestarlos todos, Un Yidam para traerlos a todos y en el Vacío transformarlos.
De acuerdo, no más sobre El Señor de los Anillos hasta más tarde (¡y siéntase libre de saltarse esa pequeña sección si no es un fanático!)
Yidam es una forma contraída del tibetano yid kyi dam tshig y es el conjunto de prácticas (yogas) asociadas con nuestro samaya (compromisos). Yid significa literalmente «mente» Yid kyi dam tshig se traduce como: «samaya de la mente». Muchos de nosotros hemos usado la palabra Yidam como sinónimo de la deidad Iluminada asociada con esa preciada práctica, estrictamente hablando de una forma incorrecta de la palabra. Ciertamente podríamos decir “deidad Yidam” para referirnos a la deidad del compromiso, pero Yidam, como una sola palabra, se refiere estrictamente a las prácticas asociadas con esa deidad.
Yidam es nuestro compromiso de corazón
La característica definitoria de Yidam es la Unidad. Elegimos una práctica, una práctica apreciada de por vida, tal como nos la dieron nuestros maestros, con un linaje comprobado.
Podemos, en varios momentos, practicar varios yogas, pero nuestro compromiso central de por vida es con el Yidam. Una vez elegido, es justo decir que tu único Yidam se convierte en el representante de todas las formas de Iluminación. Cuando practicas tu Yidam, independientemente de cuál, estás practicando todas las formas Iluminadas. Es por eso que nos divertimos un poco con El Señor de los Anillos y el Anillo Único a continuación (no fanáticos, ¡simplemente sáltenlo!)
La definición incompleta de Yidams en Wikipedia y otros sitios no orientados a la práctica puede generar confusión. (Pista: ¡Yidam es mucho más que la deidad!) Usar la palabra Yidam como un «sustantivo» para describir su adorada deidad personal es confuso, especialmente para los nuevos budistas Vajrayana.
Esto quedó claro cuando recibimos este comentario en el video «Cómo elegir un Yidam» (incrustado a continuación) «¿Puedo hacer que el Buda Shakyamuni sea mi Yidam?» Es un sentimiento hermoso, pero estaba claro que Yidam estaba siendo interpretado como la deidad real, que no es exactamente el significado de «Yi», que significa «corazón» y «dam», que significa «compromiso» y «medios».
Venerable Zasep Rinpoche: breve enseñanza sobre cómo elegir y visualizar un yidam:
Está claro que muchos de nosotros suponemos que la palabra Yidam significa «deidad», lo que genera mucha confusión. Yidam es mucho más amplio que la deidad. Yidam es la práctica del corazón a la que dedicas tu vida (Yi es “corazón” y “dam es “compromiso”).
Comprometes tu vida a la práctica con el objetivo de la iluminación final. La deidad es un aspecto, uno de una docena de aspectos, de Yidam. El compromiso es con un sistema completo de práctica de meditación. De hecho, en una práctica de Yidam, puede haber (a menudo) múltiples deidades.
Vajrasattva como Yidam — practicando la perfección de la purificación, video:
“Medios de realización”
La definición más corta y significativa de Yidam sería «medios de logro», ya que Yidams incluye un ciclo completo de prácticas. ¿Qué estamos tratando de lograr? Transformación e Iluminación. No necesitamos múltiples Yidams, porque cada Yidam es un medio transformador completo para lograr el objetivo final de la Iluminación. Por lo general, se desaconseja mezclar varios métodos, no porque no pueda tener más de un Yidam, sino porque es confuso hacerlo.
Yidam, en el contexto dado por un maestro, es un conjunto de prácticas, utilizadas como nuestro «medio de logro», a las que nos comprometemos, que giran en torno a una deidad o mandala personalmente apreciada con un sistema completo de yogas. ¿Por qué mándala? Porque algunas prácticas de Yidam involucran múltiples deidades. Estas deidades tampoco están limitadas a una sola forma. ¿Por qué apreciado? Porque nos comprometemos a practicar el Yidam de por vida.
Una serie típica de «yogas» o prácticas que se encuentran en una sola práctica de Yidam podría incluir:
- Refugiarse en las Tres Joyas
- práctica de la bodichita
- votos
- Gurú Yoga
- Alabando el linaje
- Autogeneración de la deidad
- Ofrendas: mandala, bodichita, ofrendas de los sentidos, interior y otras
- otras prácticas únicas guiadas por maestros y comentarios del linaje de maestros exitosos.
Contraer “deidad de Yidam” a “Yidam” —como se hace en varios sitios de enciclopedias en línea— lleva a otros a pensar que la palabra Yidam no es más que nuestra forma personalmente apreciada del Buda Iluminado (o deidad), una deidad devocional en otras palabras. Aunque somos devotos de nuestra deidad Yidam, esta no es la definición correcta o completa de Yidam (Sin embargo, es la definición de Deidad Yidam, confusa, ¿no?) El Yidam debe estar asociado con un sistema completo como un «medio de logro.”
Ishta Yoga o prácticas apreciadas
Ishta Yoga significa prácticas apreciadas (más o menos) en sánscrito. Mientras tanto, “deidad Yidam” en sánscrito es Ishta-deva o devata (sánscrito: इष्टदेवता). Sin embargo, observe que Ishta-Deva es el equivalente de Yidam Deity, no Yidam. Ishta significa literalmente «apreciado».
Yidam como forma contraída del tibetano yid kyi dam tshig es el conjunto de prácticas asociadas con nuestra deidad samaya (compromiso), a menos que tengas el hábito de contraer “deidad Yidam” a Yidam. ¿Esto es ser quisquilloso? En absoluto, a juzgar por los comentarios en un video reciente de Youtube en Youtube (ver más abajo). Las definiciones incompletas o contraídas confunden a los nuevos estudiantes. Tienden a pensar que «Yidam» no es más que la palabra «deidad querida» en lugar de un conjunto de prácticas sujetas a compromisos, generalmente asociadas con una o más deidades. Es extremadamente confuso si dices que tu Yidam es 62-Deity Chakrasamvara. Hay 62 deidades en esta práctica. En otras palabras, piense en «mandala» en lugar de deidad, pero incluso entonces, esa no es la definición.
Definiciones incompletas en línea: ¡Yidam es mucho más!
Esto no se ve ayudado por la definición incompleta de alto perfil de Wikipedia: » Yidam es un tipo de deidad asociada con el budismo tántrico o Vajrayana que se dice que son manifestaciones de la Budeidad o la mente iluminada», que es incompleta hasta el punto de ser engañosa.
La Enciclopedia Budista Tibetana tiene una definición más correcta: “el foco de la meditación personal o retiro de por vida”.
Combinan aún más la definición al dar los sinónimos «deidad meditativa»; nuevamente, no es incorrecto, solo engañoso en su incompletitud. Sí, la deidad Yidam es parte del Yidam, por lo que no es del todo incorrecta, pero esta definición incompleta genera muchos malentendidos.
En otras palabras, prácticas. Por supuesto, la deidad es el sujeto de las prácticas, pero las prácticas se olvidan en la búsqueda de varios empoderamientos. Los empoderamientos solo te dan poder para practicar. Sin práctica, ciertamente no son Yidam. Tu “práctica” central es tu Yidam. Practicar significa que lo practicas, te dedicas a ello con todo tu corazón y te comprometes a ello mediante samaya con tu maestro. Normalmente, la práctica puede incluir varios yogas, hasta 11, por ejemplo, en la práctica de Vajrayoguini.
Más adelante, la definición se acerca, cuando escriben:
“Los ejemplos de yidams incluyen las deidades de meditación Chakrasamvara, Kalachakra, Hevajra, Yamantaka y Vajrayogini, todas las cuales tienen una iconografía, mandala, mantra, ritos de invocación y práctica distintivos”. Sería más correcto decir “Los yidams son una práctica con una deidad meditacional, iconografía, mandala, mantra, prácticas específicas”.
A menos que digas «deidad de Yidam», la palabra Yidam en sí misma pretende describir las «prácticas guiadas por el maestro de una deidad de meditación personal a la que te comprometes de por vida».
Añadir «guiado por el profesor»
Aunque algunos de nosotros somos llevados a nuestro Yidam a través de nuestros karmas y preferencias, por lo general debemos alinearnos con un linaje y un maestro probados. “Maestro guiado y autorizado” es un aspecto importante de Yidam, ya que ningún Yidam (ciertamente ninguno de los enumerados anteriormente) puede practicarse como Yidam sin el empoderamiento y las enseñanzas de un maestro. (Eso no significa que no puedas considerar a Chakrasamvara o Vajrayoguini o Tara como deidades devocionales. ¡Ciertamente puedes! Pero no puedes practicarlos como Yidams sin la bendición y el entrenamiento del maestro debido a la complejidad de las prácticas profundas de por vida. Es la enseñanza y el entrenamiento que transmite los diversos yogas lo que constituye el verdadero significado de Yidam: la práctica del vínculo del corazón.
Yidam es una forma abreviada de yid kyi dam tshig . Yid significa literalmente «mente». Yid kyi dam tshig se traduce como: «Samaya de la mente». Debido a que uno de los métodos incorporados en esta práctica de mente Samaya incluye una deidad budista de un solo enfoque, generalmente personalizado para el estado mental del practicante y la guía del maestro, se asoció con la Deidad Yidam. Esto ha llevado a errores de traducción en enciclopedias y Wikipedia. También conduce a malentendidos con los nuevos estudiantes de Vajrayana.
Por ejemplo, en un video reciente de YouTube, un espectador comentó: «¿Puedo simplemente visualizar al Buda Shakyamuni como mi Yidam?» (parafraseado). Por supuesto, puedes dedicar tu mente y tu práctica al buda Shakyamuni, pero eso no la convierte en una práctica yidam. Simplemente describe nuestro objeto de devoción. Ciertamente, Shakyamuni es y será tu deidad preciada, pero no puedes pensar en eso como tu Yidam a menos que sea un sistema completo, con linaje para demostrar su eficacia, que te haya dado un maestro calificado.
¿Qué es un Yidam, entonces?
Yidam va mucho más allá de la deidad y está destinado a describir la práctica de su corazón tal como la dio su maestro, un paquete completo de prácticas enfocadas en la deidad de nuestro corazón, que incluye visualizarse a sí mismo como la Deidad Iluminada, refugio, hacer ofrendas, alabanzas y, a menudo, un completo conjunto de prácticas guiadas por el profesor hasta la práctica del mandala corporal inclusive. Por ejemplo, Vajryogini, como Yidam implica no solo a Vajrayogini en sí misma, sino a los 11 Yogas. Sin embargo, la verdadera esencia del Yidam es que es nuestra práctica. Como explicó el gran maestro Ringu Tulku Rinpoche (video incrustado):
“Tenemos los tres Refugios, Buda, Dharma y Sangha. En el nivel Vajrayana, a veces decimos Lama, Yidam y Khandros. Es más o menos lo mismo. El Buda es el maestro; el Lama es el maestro. Dharma es la práctica, Yidam es la práctica. Y Sangha es la comunidad o las personas que nos ayudan a aprender el Dharma. Entonces Khandros, o Dakas, Dakinis y Dharmapalas, son la comunidad”.
Ringu Tulku Rinpoche presentando Yidams:
El señor de los anillos: ¿un anillo, un Yidam?
Esto nos lleva a mi metáfora del Anillo Único: si no conoces El Señor de los Anillos , ¡sáltate un par de párrafos! (A “Un Yidam para enfocarlos a todos”).
Yidam literalmente significa prácticas «ligadas al corazón» (refiriéndose a nuestro preciado camino que nos dieron nuestros maestros). Dado que es una práctica, tiene el poder de transformar nuestra mente, tal como el Anillo Único busca transformar todos los anillos en El Señor de los Anillos.
Un anillo o un Yidam: enfoque para la transformación
Al igual que el Anillo Único en El Señor de los Anillos, podemos usar nuestro único Yidam personal para reunir todos los conceptos y formas de Iluminación en un solo foco, y enfocarnos singularmente en nuestra meta de Bodhisattva, para beneficiar a todos los seres sintientes. Es hábil practicar un Yidam a la perfección, en lugar de tratar de hacer “un poco de esto, un poco de aquello”. En otras palabras, sea el maestro de un dominio.
En la epopeya de fantasía El señor de los anillos de JRR Tolkien, un simple anillo en manos de un simple hobbit, de un condado poco conocido, amenaza con derrocar al mundo. Indistintamente llamado el Anillo Gobernante, el Anillo Maestro y la Perdición de Isildur, el Anillo Único tiene el poder «mágico» para unir todos los poderes del mundo, todos los demás anillos. La inscripción dice:
“Un anillo para gobernarlos a todos, un anillo para encontrarlos, un anillo para traerlos a todos y atarlos en la oscuridad”. [1]
¿Cómo logró esto el malvado Sauron? Invirtió todo su poder y enfoque en la creación de One Ring para subsumir a todos los demás. (Por supuesto, eso es un problema en su caso, ya que perdió el anillo «precioso»).
Como metáfora, esto funciona para ilustrar el poder de One Yidam:
Un Yidam para enfocarlos a todos
Nuestro Yidam personal une todos los conceptos de Buda y la Iluminación en una forma que resuena perfectamente para nosotros. En el contexto de la instrucción singular de Yidam, como enseñó el gran Señor Atisha, podríamos parafrasear como «Un Yidam para gobernarlos a todos».
Un Yidam para enfocarlos a todos, Un Yidam para manifestarlos todos, Un Yidam para traerlos a todos y en el Vacío transformarlos.
Single Yidam nos enfoca
Aunque no buscamos “atar” nada en la oscuridad, el Yidam de un solo enfoque, o la práctica de escuchar la meditación, tiene el poder de potenciar nuestros logros. (¡Recuerde, el Yidam es nuestra práctica!) Yidam no es una deidad que adoramos, aunque tenemos devoción, por supuesto, es una práctica que emprendemos diligentemente para transformar nuestras mentes.
Desde este punto de vista, no es del todo exacto pensar en tu Yidam como Buda, aunque un Yidam es un Buda Iluminado. Yidam es en realidad la práctica del corazón de nuestro maestro que transmite la práctica del Dharma. Es lo que practicamos durante toda nuestra vida para lograr nuestra propia Iluminación final en beneficio de todos los seres.
No tenemos que tener un Yidam. Muchos budistas no lo hacen. Sin embargo, como método, como el Anillo Único en la fantasía épica, el método de un Yidam es muy poderoso, potenciando nuestras meditaciones de una manera tangible, profunda y rápida. Esta es una de las razones por las que Vajrayana se define como el Camino del «Relámpago»: «Vajra» se traduce literalmente como rayo, y «yana» significa camino. Por qué Camino del relámpago como metáfora. ¡El rayo es asombrosamente poderoso y rápido a la «velocidad de la luz»!
En las prácticas de meditación, nada es más efectivo que un solo enfoque. No hay un Yidam con el poder de unir a todos los demás; la conclusión es que todos son, en esencia, lo mismo. Elegimos un Yidam que resuena con nosotros.
El Venerable Zasep Rinpoche describe nuestro sentimiento por nuestro Yidam como “pasión, sin apego, aunque la metáfora que usó para explicar el nivel de pasión fue la pasión de un niño por su juguete favorito. [Vea el video incrustado para obtener más de esta excelente charla de 6 minutos, «¿Cómo podemos visualizar Budas y Yidams, incluso si no tenemos imaginación o habilidad para la visualización?»
Rinpoche dijo: “Entonces, cuando tienes eso, es como un niño, un niño pequeño, fantaseando con juguetes. Vas a la tienda de juguetes y todo lo que piensas son juguetes. Como un niño pequeño con su camión de juguete.
Automáticamente, boom, tu mente se ha ido. Atraído. Porque quieres esto, te gusta esto, estás tan emocionado. Los yoguis, o yoginis, deberían tener este tipo de entusiasmo o pasión.
Ese es uno de los propósitos de Yidams. Las cualidades iluminadas de todos los Budas son las mismas, pero las características visualizadas de un Yidam son diferentes de las de otro. Elegimos el que “nos atrae” como el niño con su juguete nuevo.
Como explica Zasep Rinpoche, “con esa inspiración, esa energía, entonces puedes visualizar, más rápido. Eso significa que sus habilidades de visualización mejorarán más rápido. Tu concentración mejorará.”
El gran maestro Dzongsar Khyentse Rinpoche reflejó este nivel de entusiasmo al hablar de Tara:
Los devotos de Tara, especialmente los devotos de grandes universidades como Nalanda, se vuelven locos. La anhelan, la alaban, realmente suplican, la suplican”.
El anhelo, el amor, la pasión y el asombro son métodos. Necesitamos alabar, adorar, rezar, postrarnos, no solo por el mérito y la purificación, sino para acercarnos a esa verdad última de que: “La deidad no es otra que la unión de la claridad y el vacío, la unión del vacío y la compasión. [5]
“Todos los Budas son Uno”
En el Avatamsaka Sutra, dice: «Todos los Budas son un Buda». Muchos de nosotros tenemos prácticas fragmentadas. Un día estamos haciendo nuestra Práctica del Buda de la Medicina, al día siguiente Tara, al día siguiente, Manjushri, y así sucesivamente. Además, Un Buda puede tener muchas formas, como Avalokiteshvara, el Buda de la Compasión, que tiene formas iracundas, femeninas, masculinas y otras que se adaptan a las mentes de sus practicantes:
Padmasambhava, el maestro Lotus Born, también explicó el concepto de que todos los Budas son de una sola esencia, en una enseñanza a Lady Yeshe Tsogyal.
“El cuerpo, el habla y la mente de todas las deidades son manifestados por los tres kayas de acuerdo con la percepción de aquellos a ser domesticados. De hecho, no importa cómo aparezcan, si practicas uno, los estarás practicando todos. Si logras uno, los habrás logrado todos”.
Él reforzó esto aún más en respuesta a la pregunta de seguimiento de la Señora:
“Aunque los Sugatas se manifiestan como varios tipos de familias y formas, por medios hábiles para domesticar seres, en realidad son inseparables, el estado de igualdad.
Si fueras a practicar todos los Budas con esta comprensión de su inseparabilidad, tu mérito sería el más eminente. Pero si hicieras eso mientras consideras que las deidades yidam tienen diferentes cualidades que deberían ser aceptadas o rechazadas, serías inmensamente oscurecido”.
¿Por qué hay tantas formas?
Su Eminencia Jamgon Kongtrul Rinpoche Tercero.[2]
«¿Por qué hay tantos? Los yidams son formas puras visualizadas que se manifiestan a partir de la esencia vacía de Dharmadhatu como la lúcida demostración de la compasión de nuestro Lama”. El objetivo de la práctica de Yidam es fundamental para comprender estas formas: “¿Cuál es el propósito de la práctica de Vajrayana? Purificando la percepción impura de uno de todas las apariencias y experiencias.”
Práctica hábil: ¡elige uno y solo uno!
Por supuesto, los meditadores más sofisticados saben que las cualidades iluminadas de una deidad meditativa son las mismas que todas las demás. Ningún Yidam es más poderoso que otro. Ningún Yidam es adecuado para todos. Con medios hábiles, los Budas Iluminados pueden tomar cualquier forma. Es un síntoma de nuestros propios flujos mentales fragmentados que saltamos de una práctica a otra, incluso cuando nuestros maestros nos dicen «una práctica es todo lo que necesitas». (Un anillo… está bien, golpeándolo hasta la muerte…)
Algo menos hábil es nuestra práctica. Nuestros maestros nos dicen que elijamos un Yidam y nos concentremos toda la vida en la práctica, o hasta que logremos realizaciones. Eso funcionó bien en la antigua India y el Tíbet, donde los grandes Maha-Siddhas eligieron una práctica y se dedicaron con total concentración. Hoy, nuestro mundo moderno, nos impulsa de esta manera y de esa manera. Un día rebosamos de entusiasmo por practicar Vajrayoguini. La próxima semana estamos emocionados de «probar» Yamantaka.
Deberíamos tomar en serio el consejo que el gran sabio indio Atisha le dio al maestro tibetano Rinchen Sangpo: “Algunos de ustedes, los tibetanos, han tratado de lograr cien deidades pero no han logrado obtener un solo logro, mientras que algunos budistas indios han obtenido los logros de cien deidades al lograr la práctica de una.”
Zasep Rinpoche reforzó esta idea en su breve enseñanza (video):
No necesitas tantos Yidams. Es por eso que Atisha dijo ‘Es mejor practicar un Yidam’. Si practicas correctamente un Yidam y lo logras, entonces los logras todos juntos.
Elegir tu One Yidam
Guru Rinpoche aconsejó a Lady Yeshe Tosgyal cómo elegir un Yidam y por qué hay tantas formas:
“Dado que los medios y el conocimiento están practicando el cuerpo, el habla y la mente espontáneamente presentes a través del método de yoga sadhana, todos los innumerables sugatas, pacíficos e iracundos, figuras principales y séquitos, se manifiestan de acuerdo con aquellos que deben ser domesticados de cualquier manera que sea necesario. — como figuras principales y séquitos pacíficos e iracundos.
Pero como todos son del mismo gusto en el estado de dharmakaya, cada persona puede practicar el yidam al que se sienta inclinado”. [3]
El secreto: permaneció enfocado en un Yidam
En otras palabras, para cada uno de nosotros, individualmente, nuestro “anillo único” puede ser cualquier Yidam, pero el secreto es permanecer enfocado en una deidad con todo tu corazón, mente y enfoque.
Una vez que elegimos y nos mantenemos enfocados, como enseñó el difunto gran Gelek Rimpoche: “Es por eso que no tienes que pensar, ‘Sí, tengo a Lama Vajrayoguini aquí, pero me he olvidado de Shakyamuni, me olvidé del Buda de la Medicina. , me olvidé de Tara allí. ¿Qué le ha pasado a mi refugio?”[2]
¿Qué es el Yidam en última instancia?
Guru Rinpoche explicó la naturaleza del Yidam, en última instancia, a Lady Yeshe Tsogyal:
“Date cuenta de que tú y la deidad del yidam no sois dos y que no hay ninguna deidad del yidam aparte de ti. Te acercas a la deidad yidam cuando te das cuenta de que tu naturaleza es el estado de dharmakaya que no surge”. [3]
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