“Me refugio en el Buda Amida”

La Tierra Pura está aquí y ahora, dice el sensei Alex Kakuyo. Cantar el nembutsu puede ayudarte a ver eso.

Caligrafía japonesa del nembutsu, que se pronuncia «Namu Amida Butsu» en japonés.
Caligrafía vía stringfixer.com

El Budismo de la Tierra Pura enseña que hubo un monje llamado Dharmakara que vivió en un pasado distante. Horrorizado por la naturaleza contaminada del mundo, se involucró en prácticas ascéticas durante muchos años hasta que logró la iluminación y se convirtió en Amida, el Buda de la Luz Infinita.

El Buda Amida usó sus poderes milagrosos para crear una tierra de máxima felicidad, que proporcionó a sus habitantes las condiciones ideales para alcanzar la iluminación. Cuando los bodhisattvas de las diez direcciones preguntaron cómo podían entrar en su tierra pura, Amida respondió: «Si deseas nacer en mi reino, llámame a la mente una y otra vez».

La belleza de la tierra pura de Amida es que no solo existe en un lugar lejano; existe en este mundo presente. La advertencia, sin embargo, es que debemos purificar nuestras mentes para verlo. Un método de purificación es el canto nembutsu : » Namu Amida Butsu «, que se traduce como «Me refugio en el Buda Amida».

Cuando recitamos el canto, purificamos los tres misterios del cuerpo, el habla y la mente, que crean nuestro karma volitivo. De esta manera, plantamos semillas de mérito y nos limpiamos de las impurezas. También expresamos gratitud por los pequeños placeres de la vida, como una taza de café caliente, una buena noche de descanso y una agradable conversación con amigos.

Nembutsu es una práctica simple de tres pasos que cualquiera puede hacer.

Paso 1. Purifica tu mente

Mire una imagen del Buda Amida o visualícelo. Los practicantes a menudo lo imaginan vistiendo túnicas con un halo alrededor de su cabeza. Está de pie y ambas manos se sostienen en el gesto de «bien», con las puntas de los dedos pulgar e índice tocándose. Los dedos de su mano derecha apuntan hacia el cielo, mientras que los dedos de su mano izquierda apuntan hacia el suelo.

Paso 2. Purifica tu cuerpo

Mantenga sus manos en gassho colocando sus palmas juntas frente a usted. Este gesto calma la mente y es una expresión de simpatía y gratitud.

Paso 3. Purifica tu discurso

Recita Namu Amida Butsu diez veces, enfocándote en la sensación física de las palabras en tu garganta.

El canto nembutsu es una expresión de gratitud. Te permite eliminar tus impurezas al reflexionar sobre las cualidades del Buda Amida. Cuando haces esto, te das cuenta de que Amida no está separada de ti. Él vive en tu corazón y en el corazón de todos los que te rodean.

https://www.lionsroar.com/i-take-refuge-in-amida-buddha/

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