Una multitudinaria marcha de campesinos e indígenas paraguayos recorrió este miércoles las calles principales del centro de Asunción reclamando una reforma agraria integral y señalando como golpista al actual gobierno.

Llegados desde distintos departamentos de la nación guaraní y agrupados en la Coordinadora de Organizaciones Campesinas e Indígenas de Paraguay, los manifestantes enarbolaron banderas y letreros con sus consignas, entre ellas el rechazo a la criminalización de las luchas sociales por el Ejecutivo.

La manifestación fue la primera de un anunciado plan de movilización de las centrales campesinas con motivo de la reciente autorización oficial de la importación de semillas transgénicas para la siembra del algodón impulsada por negociaciones con la multinacional estadounidense Monsanto.

“Transgénicas es igual a muerte”, señaló una de las consignas, al expresar así el criterio de los labriegos sobre el daño a las personas, el medio ambiente y la tierra por cultivos de ese tipo, los cuales son acompañados con agrotóxicos muy agresivos, también comercializados por Monsanto.

La marcha se detuvo ante las oficinas del Instituto de Desarrollo Rural y la Tierra reclamando a viva voz el fin de los desalojos a campesinos sin tierra y el fortalecimiento de la agricultura familiar en lugar de favorecer a los latifundios en manos de grandes empresarios exportadores.

Otra parada de los manifestantes se hizo frente al ministerio de Agricultura y allí, junto a las anteriores demandas, plantearon que continuarán su lucha por un plan de reforma agraria integral y un desarrollo sustentable para la producción del campo paraguayo.

La Coordinadora señaló que movilizaciones de este tipo continuarán en esta capital y en los restantes departamentos de Paraguay y ratificó la condena al gobierno surgido de la interrupción del proceso democrático en el país el pasado mes de junio.

Granma

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