El exorcismo es el acto o ritual de rechazar y expulsar del cuerpo de una persona, de un objeto o lugar, a un ente o fuerza, por lo general maligna, que lo ha invadido con la intención de controlarlo, causando con ello terribles consecuencias. Para librarse de esa presencia no deseada y revertir esta dramática situación, ha de emplearse este peligroso ritual, llevado a cabo siempre por manos expertas y preparadas, en la figura de un sacerdote o representante idóneo, según lo estime cada una de las religiones y sus dictámenes.
En el caso del hinduismo el exorcismo goza de gran importancia y se encuentra situado en un lugar destacado dentro de sus rituales espirituales, dada su vital importancia a la hora de combatir los avatares del mal en todas sus formas.
Los cuatro «Vedas», textos canónicos sagrados, escritos en Sánscrito védico, lenguaje utilizado para su redacción y originarios de la cultura hindú, se constituyen en su representación más antigua. Señalados además con la palabra «apauruseya», denotándolos como elementos que no han sido fruto de la mano humana y sí de la acción divina y que fueron oídos y comunicados en primera instancia por los «Rishis» o sabios, seres pertenecientes a una clase peculiar de humanos divinos, a diferencia de sus similares mortales.
En la tradición del hinduismo, el origen de estos «Vedas» se acredita directamente a Brahma, Dios de la creación, y están divididos en cuatro colecciones, siendo la última, de nombre Atharva Veda, en la cual se dice, están contenidos todos los secretos relacionados con la magia, la alquimia y sus rituales, lo cual le otorga una gran importancia.
Es en esta escritura que se exponen los medios y procedimientos necesarios para llevar a cabo un exorcismo hindú, haciendo uso del ritual védico Yajna, en el cual se ofrece al fuego la Samagri habana, una preparación de hierbas especiales, como medio para alcanzar a Dios, acompañado del cántico de los «mantras» adecuados para este tipo de ceremonia y la quema de incienso como ofrenda.
Asimismo se emplean ciertas lecturas adecuadas al propósito y se hace uso de imágenes icónicas y religiosas, que los acompañarán durante el proceso. Resalta especialmente el Kirtan, práctica comúnmente utilizada por el Vaishnavismo, importante rama del hinduismo, el cual consiste en cantar estos «mantras» o «himnos» con el acompañamiento de instrumentos musicales y algunas veces acompañados de narraciones o actuaciones por parte de quien la realiza.
Son muchas las tradiciones en una religión tan rica y variada como el hinduismo, nutrida por cientos de culturas a lo largo de miles de años de historia y aunque existen variaciones o características que difieren en las celebraciones de sus ceremonias más representativas por parte de cada uno de sus sectores, el procedimiento principal y su propósito se mantienen intactos hasta nuestros días y el exorcismo no escapa de esta tendencia. Y es que aunque las costumbres cambien y las imágenes y oraciones sean únicas para cada lugar o lengua, la situación es la misma al momento de luchar contra el mal y expulsarlo del lugar donde se ha arraigado, convirtiéndose éste en un procedimiento universal, solamente tintado por el lugar donde se realice.