De nuevo un terremoto superior a 6 y en un día en el que La Tierra ha sido alcanzada por una tormenta solar. La correlación es ya más que evidente.

Un nuevo terremoto ha vuelto a sacudir Siberia este domingo, teniendo casi el mismo epicentro que hace dos meses.

El sismo ocurrió en la República rusa de Tuvá y tuvo una magnitud de 6,8 grados en la escala Richter. Por el momento no se ha informado acerca de víctimas.

En la ciudad de Kyzyl, ubicada a 100 km del epicentro y que cuenta con unos 110.000 habitantes, muchos vecinos salieron corriendo de sus casas al sentir los temblores. Según testigos, algunas viviendas resultaron levemente dañadas.

El departamento local de Emergencias advirtió sobre posibles réplicas.

Las autoridades declararon el estado de emergencia y habilitaron campamentos para los que temen regresar a sus casas, mientras que en la zona se registra una temperatura de 20 grados bajo cero.

Los temblores se sintieron en un radio de 500 km.

Un terremoto semejante, de intensidad 6,7 grados en la escala Richter, se produjo en el mismo lugar el pasado 27 de diciembre.

En junio del 2010, los sismólogos rusos advirtieron sobre el creciente riesgo de un terremoto devastador en la región de Krasnoyarsk, principal ciudad de Siberia Oriental, donde residen casi un millón de personas y que vivió cinco sismos de entre 3 y 4 grados en la escala de Richter, entre los años 2000 y 2009.

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