En los últimos días, y sobre todo tras la tragedia que ha supuesto la DANA que ha destrozado parte de Valencia, corren por las redes sociales diferentes informaciones que asocian técnicas de geoingeniería con lo ocurrido.
La geoingeniería se refiere a un conjunto de técnicas y estrategias diseñadas para modificar deliberadamente el clima de la Tierra. Su objetivo principal es mitigar los efectos del cambio climático, especialmente el calentamiento global, y puede implicar intervenciones en los sistemas terrestres y atmosféricos.
Existen dos categorías principales de geoingeniería:
- Geoingeniería de reducción de la radiación solar: Estas técnicas buscan reflejar una mayor cantidad de luz solar de vuelta al espacio para reducir el calentamiento de la Tierra. Ejemplos que incluyen la inyección de aerosoles en la estratosfera o el blanqueamiento de nubes mediante la modificación de su composición.
- Geoingeniería de remoción de dióxido de carbono: Estas estrategias están diseñadas para eliminar el CO2 de la atmósfera. Métodos que incluyen la captura directa de aire, la reforestación y la modificación de procesos agrícolas para aumentar la absorción de carbono en el suelo.
La geoingeniería está promovida por diferentes agentes del propio modelo económico que nos ha conducido a la actual crisis climática, y presenta riesgos significativos e incertidumbres sobre sus efectos a largo plazo en los ecosistemas, la biodiversidad y los climas regionales. Viene a ser, como he contado, algo así como hacer negocio con la crisis climática poniendo en peligro a la Humanidad.
Además, plantea cuestiones éticas y de gobernanza sobre quién controla estas tecnologías y cómo se implementan. Si un país intenta cambiar sus condiciones climáticas sin aviso ni consenso previo, puede perjudicar a sus países vecinos.
Conocida geoingeniería
Esta «nueva» ingeniería es desarrollada desde hace decenios, unos proyectos han sido más o menos secretos y otros muy conocidos:
Proyecto Stormfury. Fue un intento de modificar huracanes mediante la siembra de nubes con yoduro de plata realizado entre 1962-1983.
Operación Popeye. Un programa militar de Estados Unidos durante la Guerra de Vietnam que buscaba inducir lluvias.
Sistemas de reflexión solar. Propuestas para dispersar aerosoles en la estratosfera para reflejar la luz solar.
Hay un artículo muy bueno que os resumo que se titula De blanquear nubes a fingir volcanes: 2018 será el año cero de la geoingeniería y está escrito por Samuel Martín-Sosa, del área de Internacional de Ecologistas en Acción. Y si queréis algo mío, podéis recurrir a un capítulo amplio sobre ello en mi libro del año 2009 La salud que viene.
En realidad la mayoría de la comunidad científica continúa hoy rechazando estas ideas, pero la cosmovisión de un planeta en el que se pueda reducir artificialmente la concentración del CO2 atmosférico o se pueda manejar la cantidad de radiación que llega a la tierra para modular la temperatura según convenga se abre paso en el pensamiento oficial y gana peso político.
Se vislumbra así todo un cóctel de técnicas que permiten, unas de forma ideal, y otras que se practican desde hace años en nuestro país aumentar y/o reducir a demanda lluvias aquí o allá, por ejemplo: En este caso para evitar que el granizo destroce cosechas en la Comunidad de Madrid.
Pero también se puede usar para que llueva.
Geoingeniería documentada
Quiero documentar bien todo esto de la geoingeniería porque parece que hay gente que dice que eso «es un bulo». No, la geoingeniería existe desde hace mucho. La Unión Europea, en junio de 2023 abría el debate sobre la geoingeniería para luchar contra el cambio climático.
Existe pues. Una de estas técnicas debatida es la inyección de aerosoles estratosféricos, como decíamos. Es decir, aviones que liberan partículas diminutas que reflejan la luz. Pero los expertos dicen que harían falta cientos o incluso miles de aviones especializados trabajando durante años.
Y luego está la modificación de la reflectividad de las nubes con la ayuda de partículas de aerosol liberadas desde barcos. ¿Absurdo verdad? Es como ponerle puertas al campo. Y todo para no cuestionarse que es el modelo social y económico actual, tan contaminante, el que está provocando la crisis climática.
La geoingeniería son parches todo lo más, sin cambiar profundamente el modelo consumista será muy difícil solucionar verdaderamente el gran problema en el que nos hayamos inmersos.
Geoingeniería en Valencia
Estos días se dice que se usan radares para «conducir» las nubes o que se bombardean las mismas de manera intencionada con yoduro de plata con no se sabe qué intenciones. Son acusaciones muy graves y cuanto más dura es una afirmación más importantes han de ser las pruebas, la documentación de la misma.
Lo que sí ha habido en la Comunitat Valenciana, como en Madrid, es la citada lucha contra el granizo. En todo caso, lo que procede es analizar toda esa información por quien competa, y si hay indicios de que puede haber algo de cierto en ello QUE SE INVESTIGUE. Sin miedo ni prejuicios y caiga quien caiga. Las personas tenemos derecho a saber.