Michael Hastings murió el 18 de junio pasado cuando su vehículo chocó contra un árbol en Los Ángeles. Antes del accidente, el reconocido periodista habló con varios amigos a los que les manifestó su preocupación por sentirse vigilado por el FBI.
La policía de Los Ángeles realizó la autopsia, pero sus resultados todavía no están listos. Los análisis toxicológicos llevarán algunas semanas.
El periodista sufrió el accidente mientras conducía su Mercedes Benz C250, unos de los coches más seguros de esa gama y que se encontraba prácticamente nuevo.
Un exfuncionario del Gobierno de EE.UU. declaró a la prensa que el accidente pudo haber sido provocado por un ‘hackeo’ al sistema de conducción del coche que manejaba.
Hastings había sido galardonado en varias ocasiones y era autor de varios reportajes de investigación que derivaron en escándalos políticos de grandes proporciones. Uno de ellos le costó el puesto a Stanley McChrystal, comandante jefe de la fuerza militar de EE.UU. en Afganistán.
En su último artículo Michael Hastings, había criticado al Gobierno de Obama por el programa de espionaje a la población civil.
Fuente: RT
Todavía hay mucha confusión sobre el asunto pero las fuentes rusas que informan a Sorcha Faal atribuyen la reciente muerte del periodista de la revista Rolling Stone que destapó el asunto del general Petraeus, Michael Hastings, habría sido asesinado desde un drone en California, cuando intentaba encontrar asilo en el consulado israelí de Los Angeles.
Se sabe también que Hastings recibió una amenaza del ayudante de Hillary Clinton, a consecuencia de sus investigaciones sobre la matanza del consulado USA en Bengasi, Libia
Estamos pues, ante un periodista con altas conexiones.
Su muerte ha “coincidido” con las pruebas en ese mismo lugar donde sucedieron los hechos del “Shadow hawk”, una aeronave no tripulada que, como reconoció recientemente el director del FBI, Mueller, está siendo utilizada por su agencia dentro del programa aprobado por Obama, que incluye el asesinato sin juicio previo de los considerados “enemigos del régimen”.
Los testigos afirman que el coche de Hastings no colisionó contra árbol o elemento alguno y más bien, explotó, lo que apoyaría la tesis de que fue destruido por un misil. Aquí, un vídeo.
En los últimos días, Hastings se había acercado a Wikileaks buscando asesoramiento legal y, sobre todo, parece que iba a ser el hombre en revelar la segunda parte de los documentos del hacker infiltrado en la NSA, Snowden, lo que bien podría explicar su asesinato.
Se sabe también que Hastings recibió una amenaza del ayudante de Hillary Clinton, a consecuencia de sus investigaciones sobre la matanza del consulado USA en Bengasi, Libia
Estamos pues, ante un periodista con altas conexiones.
Su muerte ha “coincidido” con las pruebas en ese mismo lugar donde sucedieron los hechos del “Shadow hawk”, una aeronave no tripulada que, como reconoció recientemente el director del FBI, Mueller, está siendo utilizada por su agencia dentro del programa aprobado por Obama, que incluye el asesinato sin juicio previo de los considerados “enemigos del régimen”.
Los testigos afirman que el coche de Hastings no colisionó contra árbol o elemento alguno y más bien, explotó, lo que apoyaría la tesis de que fue destruido por un misil. Aquí, un vídeo.
En los últimos días, Hastings se había acercado a Wikileaks buscando asesoramiento legal y, sobre todo, parece que iba a ser el hombre en revelar la segunda parte de los documentos del hacker infiltrado en la NSA, Snowden, lo que bien podría explicar su asesinato.
Una muerte muy oportuna,por lo tanto muy sospechosa