Foto: Juan Moriz, Salvador Freixedo y Magdalena del Amo, en una cena con amigos. |
Hoy todo el mundo habla de la cueva de los Tayos, relacionada con el hallazgo de Juan Moricz. Sin embargo, el húngaro no se refería a ese lugar cuando hablaba de lo que encontró en las profundidades. Lo dice Salvador Freixedo que mantuvo con Moricz una relación bastante cercana. Este es el relato de Freixedo:
«Esta historia es quizá la más interesante de cuantas conozco. Es completamente desconocida, porque, excepto Andreas Faber-Kaiser, nadie de esta parte del océano conoció a Juan Moricz. Cuando Jiménez del Oso y Benítez estaban haciendo una serie y quisieron ir, Moricz me pidió referencias. No sé lo que le dije en ese momento, pero él no estaba por la labor de recibirlos, por su resquemor con la prensa, a raíz del libro de Eric Von Daniken y el de dos periodistas franceses que, faltando a la ética más elemental, publicaron una conversación “off the record” con algunos añadidos inventados. ¡Pero en esencia lo que dice el libro es cierto!, porque esa misma historia me la contó a mí Moricz.
«Cuando empezó a comunicarse con los indios en magiar antiguo lo tomaron por una especie de enviado. Eso le facilitó la entrada a la cueva, que, hay que aclarar que no es la cueva de los Tayos que todo el mundo conoce, sino una gruta a la que se accede desde una pared completamente vertical. Allí, según él decía, se encontró con los intraterrestres, y con un gran tesoro material. Yo he visto algunas de esas piezas que le permitieron llevar prestadas. Pero lo que realmente cambió su vida fue el hallazgo de una biblioteca de tablillas de oro, donde estaría escrita la historia desconocida de la humanidad. También encontró un esqueleto de cuatro metros, que estaba vitrificado. Él pensaba hacer un gran congreso internacional para revelar esta verdad al mundo. Para conseguir financiación había recibido del gobierno la concesión para explotar una mina de oro, en la que invertí una pequeña cantidad de dinero Pero Juan Moricz murió sin cumplir su objetivo. ¿Alguien interesado en que el secreto no fuera desvelado? Dejo ahí la pregunta».
via sabiens.2
Cierto que el oro resiste bien el tiempo, pero no resiste muy bien los golpes y incendios, y no es muy abundante
buscando logica, si yo quisiera escribir algo realmente importante, lo escribiria en el mismo super resistente material de mi OVNI, ó en roca granito, si soy intraterrestre. y no en uno que dada la codicia humana van a fundirlo para venderlo. y …adios historia.
Freixedo, un jesuita y no lo sabe? Juan Moricz , era argentino y había formado un grupo con gente de Ecuador, y dejo sus escritos donde explicaba las causas, que le impidieron terminar lo que se habían propuesto ya que nunca iba aceptar, jefes que los condicionaran. Y nos perdimos el poder conocer, la verdadera historia…
Como se mezclan las cosas. Las tablillas no eran de oro.
La cueva no tiene oro.
No eran intraterrenos ( aparte tampoco existen los llamados intraterrenos ).
Hay otra teoría,
Encontrandose juan Morizc en la cueva de tayos en forma circunstancial pasa a traves de un vortice energetico que en ese momento friccionaba en el lugar, por lo cual «paso» a otro «lugar», sin percatarse/darse cuenta de la situación … y al regresar a nuestro tiempo quedo «traumado» por la experiencia ( que no fue mala,ya que la paso muy bien y bien recibido ) ya que la experiencia en si altero su cerebro ( por ello los viajeros del tiempo deben tener una preparación psicologica previa a fin de realizar una experiencia programada ), cerrandose o negandose a aceptar haber pasado dicha experiencia.
Luego alrrededor de esa experiencia terceras personas le agregaron o dimensionaron los hechos .