Abydos fue el centro religioso de mayor veneración popular de Egipto. Los “misterios de Osiris” en los que se reproducía ritualmente la muerte y la resurrección del dios, atraían a peregrinos de todos los rincones del país. Mucha gente deseaba participar en las ceremonias de ultratumba como símbolo de su participación en la resurrección del dios Osiris, y construían pequeños cenotafios en ladrillo y erigían estelas en el área intermedia entre el templo de Osiris y los cementerios. Estos, que se extendían en una zona de 1’5 Km. aproximadamente al suroeste de Kom el-Sultán, hasta el templo de Sethy I, son mucho más extensos que otros yacimientos funerarios locales.
En el Imperio Medio los faraones empezaron a construir cenotafios en Abydos, cosa que culminó en la XIX dinastía con los templos de Sethy I y de Ramsés II. Las tumbas privadas del Período tardío tienen, por lo general, en Abydos unas pirámides de ladrillo con un remate piramidal en piedra (pyramidium).
Nombre moderno: Abidos
Nombre clásico: Abidos
Nombre egipcio: Abedyu, Tyeny
Situación: 26º 11′ N 31º 55′ E
Interior del templo, nótese la gran cantidad de jeroglíficos en las paredes y columnas.
El Templo de Abydos, fue ordenado edificar porSeti I, padre del faraón Ramses I I , hace 3150 años. En su interior podemos ver algunos de sus jeroglíficos muy particulares
El sector señalado es el siguiente
Si se observa bien se verán un HELICÓPTERO y dos AVIONES cuya comparación es la siguiente
Un moderno helicóptero que todos conocemos y un prototipo alemán de la II GM diseñado por Werner von Braun . Muy parecidos.
Los eternos egiptólogos que no ven mucho y todo quieren justificar, encontraron la siguiente explicación (sin sustento por supuesto)
El primer problema al que tenemos que hacer frente es saber si se trata efectivamente de un dibujo verdaderamente encontrado en un jeroglífico. Hoy en día, la digitalización de las imágenes nos permite crear cualquier foto que deseemos. Asumamos que se trata de una imagen realmente tomada de un jeroglífico egipcio. El propio Georgeos Díaz encontró la solución hacia 1995 y la publicó en el Número 1 de la revista española Arqueología y Enigmas de la Historia en Abril de 1996, así como en las revistas La Esfinge: Revista de Egiptología y la Revista de Egiptología: Osiris. Posteriormente, y por consulta de otros estudiosos, Katherine Griffis-Greenberg, de la Universidad de Alabama (Birmingham, EEUU), miembro del American Research Center in Egypt y de la International Association of Egyptologists Special Studies, corroboró los resultados de Díaz. La solución es que se trata de un palimpsesto en el cual se confunden los textos antiguos con los nuevos. Un palimpsesto es un texto escrito sobre otro que no fue completamente borrado y son comunes en papiros. En este caso se trata de una inscripción en bajo relieve. Para borrar el texto antiguo colocaron argamasa. Parte de esa argamasa cayó y así estamos en presencia de una superposición parcial de ambos textos.
El problema está en que el borrado y sobre escritura se utilizó en papiros, pero en grabados sobre argamasa o piedra la cosa es diferente y aquí no se aprecian grabados que se pudieran haber mezclado.
Se demuestra mediante estos cortes.
Si se amplían las fotografías se verá que no hay superposición dañada alguna. Además, durante años nadie se preocupó ni se alarmó por un dibujo raro y ahora JUSTAMENTE en ese lugar aparece un desprendimiento milenario de argamasa.
Evidéntemente el “avioncito” y Osiris tenían una relación muy estrecha, en la fotografía se puede observar que en la parte superior derecha, nuevamente encontramos el avión.
Aquí no se puede hablar de argamasas desprendidas ni cosa por el estilo, hasta está pintado distinto a lo que lo rodea.
También llama la atención que en más de una representación de los dioses, éstos sostengan algún tipo de cetro, arma o antorcha con una extraña similitud a los aisladores modernos de alto voltaje