Cientos de menores en todo el mundo son chantajeados por presuntos pederastas que les acosan hasta el punto de la autolesión e incluso el suicidio, según denunció hoy el Centro británico contra la explotación infantil y la protección en internet (Ceop).
La Ceop explica que niños desde 8 años son contactados por personas bajo identidad falsa que, tras ganarse su confianza, les obligan a realizar actos sexuales por la webcam y también a hacerse daño a sí mismos.
Esta organización, asociada a la Policía británica, ha realizado doce investigaciones en los últimos dos años en las que 424 niños en todo el mundo habían sido víctima de chantajes por parte de redes de pederastia o delincuencia.
De esos 424 menores identificados, 184 eran del Reino Unido, indica la Ceop.
Los delincuentes se hacen “amigos” de sus víctimas, con las que suelen compartir intimidades, y después las amenazan con divulgar sus conversaciones o grabaciones si los menores no acceden a ejecutar sus demandas sexuales.
En algunos casos, los acosadores pueden pedir dinero a cambio de no divulgar la información perniciosa a la familia y los amigos.
A nivel internacional, siete de los menores identificados en las investigaciones se suicidaron, incluido Daniel Perry, un escocés de 17 años que se quitó la vida el pasado 15 de julio después de ser embaucado por alguien que se hizo pasar por una chica americana.
Otros siete se autolesionaron, de los cuales seis eran del Reino Unido.
La directora de operaciones de Ceop, Stephanie McCourt, señala que los niños británicos parecen ser un blanco destacado de estas redes, en parte por el idioma, pues “el inglés es una lengua universal”.
“En segundo lugar, los delincuentes han admitido que piensan que puede ser más fácil acceder a los niños británicos al percibir esta sociedad como muy abierta y liberal”, añade.
A partir de las doce investigaciones, la Ceop ha propiciado varias detenciones en cuatro continentes, y en cuatro de las operaciones los infractores eran del Reino Unido.
La mayor investigación, llamada Operación K, afectó a 322 niños que estaban siendo chantajeados en todo el mundo, 96 de ellos en Gran Bretaña.
Las víctimas, en general chicos de entre 11 y 15 años, eran acosados en este caso por una banda de personas no europeas que fue capturada y que afronta un juicio en las próximas semanas.
Estos acosadores utilizaban hasta cuarenta perfiles de identidad falsos y otras tantas direcciones de correo electrónico para atraer a sus víctimas.
La red fue descubierta después de que una red social se percatara de que había actividad sospechosa.
“Los infractores tiene la falsa impresión de que pueden ocultarse detrás de internet, que pueden beneficiarse del anonimato que creen que les proporciona la red, pero eso no es cierto”, señaló McCourt, que advirtió de que, con cada movimiento del ratón, la Policía está más cerca.