Ojo, que esta es una pregunta trampa. Claro que la psicología es una ciencia, y lo voy a ejemplificar con tres historias que espero, y en este orden, sorprendan, estremezcan y estimulen. Porque este artículo trata de tres experimentos científicos relacionados con la psicología y sus métodos. Y no me vengan los ortodoxos de lo cuantitativo y el laboratorio a confundir términos como el psicoanálisis con la psicología, que la primera es una disciplina psicoterapéutica de aproximación clínica y la segunda una disciplina científica que la engloba y clasifica.
Antes de entrar propiamente en los ejemplos les introduzco los tres métodos más habituales en psicología para adquirir conocimientos, y así podremos hablar con propiedad el resto del tiempo sin que algún lector se arranque por peteneras en los comentarios. Estos métodos son el método experimental, el correlacional y el método clínico. Las tres aproximaciones al fenómeno que se estudia se basan en el método científico-natural y parten de la observación de la conducta, a partir de la cual se hace una generalización, se formulan hipótesis y se propone una teoría explicativa. En las tres aproximaciones es fundamental que las observaciones puedan ser replicadas y las hipótesis contrastadas por otros investigadores.
La indefensión aprendida
No hace falta explicar el concepto después de ver el vídeo. La indefensión aprendida se basa en el hecho de que si nos encontramos ante un evento incontrolable nos preguntamos a qué es debido, y la respuesta que nos daremos determinará en gran medida nuestra reacción. La interpretación que hará cada persona de este suceso incontrolable dependerá del estilo atribucional propio, el cual viene dado por tres dimensiones (interno-externo, estable-inestable y global-específico). Una persona con estilo atribucional optimista (tendencia a explicar las causas de un suceso manera optimista) atribuye los sucesos positivos a factores internos, estables y globales y los sucesos negativos a factores externos, inestables y específicos. Por el contrario una persona con estilo atribucional negativo (tendencia a explicar las causas de un suceso manera pesimista) se caracteriza por el patrón contrario, atribuyendo los sucesos negativos a causas internas, estables y globales, y los sucesos positivos a causas externas, inestables y específicas. Este estilo representa un factor de riesgo para la indefensión y la depresión, y la estabilidad y la globalidad son las dimensiones más relevantes en el desarrollo de la misma, puesto que serían las responsables del mantenimiento de los déficit a lo largo del tiempo y en diferentes situaciones. La siguiente tabla ejemplifica las reacciones de una persona que suspende un examen en función de las tres dimensiones enunciadas:
Tabla sobre estilos atribucionales extraída del manual Psicología del aprendizaje de la UOC
Como podemos ver en el vídeo la autoestima de los alumnos disminuye cuando no son capaces de hacer frente a un problema —que en su caso es irresoluble— y eso les influye negativamente en la realización de la última pregunta mientras el resto de los compañeros sí pueden resolverla (indefensión personal). La autoestima no se verá reducida en caso de que nadie pueda resolver el problema (indefensión universal).
Bien, este experimento nos muestra la existencia de este fenómeno que denominamos indefensión aprendida, pero probar que la respuesta de cada persona al experimento tiene relación con un estilo atribucional específico es harina de otro costal. Lo podremos hacer mediante una aproximación correlacional al fenómeno. En términos generales, la aproximación correlacional estudia a los individuos, sin modificar ni el entorno ni el sujeto, como organismos únicos. El objetivo es conocer si determinado rasgo, basándose en la covariación de las respuestas, está relacionado estadísticamente con el fenómeno tal como se postula. Es decir, estudiaríamos mediante cuestionarios el estilo atribucional de los alumnos y junto con la respuesta obtenida mediante la inducción de la indefensión aprendida analizaríamos si la relación entre ambas variables tiene significancia estadística. Las limitaciones de la aproximación correlacional son que abusa de los autoinformes como instrumentos de evaluación centrándose en el rendimiento de los sujetos y que no estudia la causalidad, describiendo en su lugar relaciones de asociación entre variables. En Gaussianos explican muy bien que la correlación no implica causalidad. Los experimentos iniciales que realizó Seligman para postular su teoría sobre la indefensión aprendida se hicieron bajo un diseño experimental triádico englobado en la metodología experimental.
Bruce o Brenda
El vídeo con la dramática historia de David Reimer dura cuarentea y cinco minutos. Si prefieres leerla en cinco minutos puedes encontrarla aquí.
David siempre se sintió atraído por las mujeres, incluso antes de la reasignación, cuando todavía era Brenda Reimer. Son espeluznantes las consecuencias de este tipo de experimentos que parten de una actitud prepotente y egoísta de profesionales —ahora no los llamaríamos así— que anteponen su carrera o sus ideas al cuidado de las personas que tratan. Cierto es que se trata de un caso límite, y que aunque podemos encontrar muchos más —igual o más terroríficos, recuerden a Mengele— tanto en medicina como en psicología son todos de hace unos cuantos años. Gracias al desarrollo de la ética en las profesiones clínicas, es imposible que la sociedad en general y el propio estamento científico acepten este tipo de prácticas. Y cuidado con las operaciones de fimosis (es broma).
No obstante John William Money no fue un loco, sino todo lo contrario, fue un investigador pionero en su campoque creía en la teoría de la tábula rasa y por eso se lanzó a la reasignación sexual de Reimer sin pensar en las consecuencias para el chico. Esta teoría postula que las diferencias psicológicas de sexo son totalmente culturales y no innatas. En la actualidad determinadas marcas neuroquímicas permiten asegurar que la identidad de género puede ser innata y vienen determinadas por la diferenciación sexual provocada por la acción de los esteroides sexuales, sobre todo durante el periodo perinatal. Además diferentes observaciones neuroanatómicas revelan que la anatomía del cerebro está asociada con la orientación sexual y la identidad sexual. Se ha observado que mediante la administración de sustancias estrogénicas y androgénicas a hombres y mujeres heterosexuales se generan patrones diferentes en la activación hipotálamica, por lo que la ciencia en este momento hubiera podido ayudar a David mediante un estudio de las regiones cerebrales que se activan diferencialmente según si la persona tiene una orientación homosexual o heterosexual, en respuesta a diferentes estímulos, sin tener que hacer reasignaciones basadas en análisis subjetivos. A continuación una imagen del tercer núcleo intersticial del hipotálamo anterior —INH3—, una de las zonas del cerebro en las que se puede observar una estructura dimórfica según la identidad sexual.
INAH3 en un cerebro heterosexual (izquierda) y un cerebro homosexual (derecha)
Fuente: «A Difference in Hypothalamic Structure Between Hetereosexual and Homosexual Men» Science, 253, pp. 1034-1047, 1991, American Association for the Advancement of Science.
La investigación clínica implica el estudio sistemático, en profundidad, de los individuos y se basa en el famoso «ojo clínico» de los médicos o los terapeutas. Como se puede ver en este caso arriba descrito, el análisis del problema siempre es subjetivo y trata con multitud de factores, muchos de ellos altamente complejos. La principal limitación de la aproximación clínica es la dificultad de replicar sus datos, por lo que en el caso de Reimer, las estrategias terapeúticas no podrían aplicarse del mismo modo a otra persona —afortunadamente—. Otras limitaciones son las interpretaciones subjetivas de los datos por parte del terapeuta y que las observaciones son asistemáticas. La principal ventaja es que estudia al individuo en profundidad, en su contexto, y se acerca a la relación real entre la persona y la situación.
¿Tienen memoria los peces?
Este original experimento que ha desarrollado la empresa española de biotecnología Neuron Biopharma pone de manifiesto que los peces sí tienen memoria en contra de la creencia popular de lo contrario. Específicamente el experimento pone de manifiesto que existe un hipocampo de los peces que les permite memorizar caminos de una forma similar a como lo hacemos los humanos. En Neuron Biopharma utilizan los peces cebra para el estudio del Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas. Otros de los experimentos que se han realizado con los peces cebra están relacionados con la ansiedad. ¿Tienen los peces ansiedad? Parece que también. Si colocamos a un pez cebra en una pecera circular, al inicio de su estancia el pez nada siempre pegado a los bordes, a medida que pasa el tiempo y el pez se encuentra más tranquilo comienza a moverse por el centro de la pecera de tal forma que el tiempo que pasa en cada punto de la misma es de igual duración. Si golpeamos la pecera el pez cebra se pone nervioso y vuelve a nadar por los bordes, pero ¿y si le añadimos al agua un poquito de Diazepam o similar? Pues que entonces vuelve a pasar el mismo tiempo en cualquier punto de la pecera. El pez cebra se ha convertido en un modelo animal para investigar diferentes procesos biológicos y sus cualidades genéticas y embrionarias se aprovechan para buscar nuevos medicamentos que permitan estudiar diferentes aspectos de las enfermedades neurodegenerativas.
Este experimento se ha realizado mediante el método experimental en el que la investigación supone la manipulación sistemática de variables para establecer relaciones causales; en contraste con la investigación clínica y correlacional hay un control experimental directo sobre las variables que interesan al investigador. El método experimental se realiza en el laboratorio y se controla al detalle todo lo que sucede. Las limitaciones de la aproximación experimental son que son pocas las variables que se pueden estudiar, la situación experimental se realiza en laboratorio por lo que no se puede generalizar a contextos más complejos y que por la propia naturaleza del método hay muchas variables que no se pueden controlar aunque se pretenda.