Tengo 28 años. Hasta los 14 años he vivido en un ambiente de malos tratos en mi casa. Mi padre maltrataba a mi madre hasta que se murió. He tenido bastantes parejas e historias, pero todas han terminado una vez sentía que la cosa iba en serio. He perdido gente que me ha tratado muy bien, a veces creo que soy un poco “garrapata” en estas cosas, necesito que constantemente me suban el ego y la autoestima, no soy capaz de quererme yo misma. Eso me acaba haciendo ser una persona capaz de ser infiel, lo peor de todo es que no soy consciente del daño que hago, no lo pretendo, pero acaba sucediendo así. A veces creo que lo mejor es estar una temporada sola, pero necesito eso, creo que necesito no quedarme a solas conmigo misma.

Otra cosa que he descubierto en mí misma es mi miedo a repetir la historia, de dar con una persona maltratadora, eso me hace huir. En mi última relación, de la que estoy saliendo, creo que encontré la persona más parecida a mi padre. Fue lo que me hizo abrir los ojos, darme cuenta de que estaba con una persona que hasta físicamente se parecía, una persona que hacía disminuir mi autoestima, muy crítica, una persona a la que llegué a tener miedo, no sé si por mi pasado o por su forma de ser… Lo peor de todo es que siempre vi cómo era y toleraba lo que hacía, toleraba sus ataques, sus estallidos… le perdonaba. Viví escenas en las que volví al pasado. Lo peor de todo es que sigo queriendo a esa persona, y creo que no era para tanto, siempre sentí que no era de fiar…vamos, lo más parecido a mi padre de lo que vi nunca. Cuando pienso esto, creo que me vuelvo loca, que no puede ser así, que mi mente juega malas pasadas. A día de hoy sigo en mi espiral de búsqueda de “autoestima”, conociendo gente que no quiere nada más, gente que solo quiere pasar el rato y en el fondo creo que no estoy preparada ni quiero una relación de verdad, necesito que me suban el ego y silencien mis miedos.

He pensado en ir a un psicólogo, pero no sé cómo empezar a hablar, no sé qué contar.

B ( correo e.)

Quizá sea cierto que el miedo a repetir la historia te haga huir de las relaciones amorosas, pero es una explicación demasiado sencilla para una situación tan compleja. ¿Por qué supones que no ser capaz de quererte a ti misma te lleva a ser una persona infiel? Más parecería que es tu miedo a querer a otro lo que te lleva a serle infiel ¿Qué te llevaría a repetir? ¿Por qué no podrías elegir un destino diferente al de tus padres? De hecho, en principio construyes relaciones de las que dices que no te dabas cuenta del daño que hacías. Estabas quizá más identificada con tu padre y eras tú quien se iba y hacia daño sin poder evitarlo, como si se te impusiera esa forma de proceder. Al decir que tu mente te juega malas pasadas, estás nombrando algo que tiene relación con el psiquismo humano. Cuando hay conflictos inconscientes, se sufre de aquello que conscientemente se rechaza y, más allá de la voluntad, se elijen parejas que no llegan a buen puerto. Quizá escapando de ser como tu madre, preferías ponerte del otro lado y que no fueras tú la que sufría. Hay muchas formas de maltratar al otro, y también las hay de maltratarse a una misma. En el modo que tienes de hablar de ti también hay cierto maltrato. Cuando dices, por ejemplo, que necesitas estar sola un tiempo, parecería que quieres defenderte de los conflictos que una pareja te provoca, pero a la vez dices que necesitas no quedarte a solas contigo misma, quizá porque en primer lugar la lucha la tienes planteada dentro de ti. Te has identificado con tu madre, por ello elijes un hombre parecido a tu padre. ¿Pero por qué te identificas con ella en lo que más la rechazabas? Quizá en un intento de entenderla y de sortear la culpa que inconscientemente puedes tener por lo que has debido de sentir y pensar durante tus primeros 14 años de vida, cuando tuviste que soportar un ambiente familiar tan patológico.

La solución para salir de esa compulsión a repetir algo de lo que le pasó a tu madre estaría en elaborar psicológicamente el tipo de deseos, fantasías y culpas inconscientes que te llevan a establecer los vínculos que organizas. Me parece una buena idea la de acudir a un psicólogo. Una psicoterapia psicoanalítica sería conveniente. Con esta carta ya has empezado a hablar. Concédete el espacio adecuado y busca ayuda. Puedes huir del otro pero nunca de ti misma.

NEUROSIS DE DESTINO

Algunas personas aparecen marcadas por desgracias o fracasos repetidos. Rupturas amorosas, amistades peligrosas, enfrentamientos laborales, enfermedades continuas… Los acontecimientos desagradables parecen perseguirlas como si estuvieran sometidas a una especie de fatalidad o destino que arruina su vida. Según el psicoanálisis, las causas de estos sucesos se deben buscar en el inconsciente, y están provocados por lo que Freud denomina la “compulsión a la repetición”, que se caracteriza por una fuerza de la energía psíquica que tiende a repetir algo que ya se sintió y que produjo una excitación elevada, aunque fuera dolorosa.

Estos sucesos se manifiestan como una fatalidad externa de la que el sujeto se siente víctima al desconocer los mecanismos inconscientes que se han puesto en marcha para volver a sufrir algo que conscientemente rechaza.

El fracaso es muy a menudo un autocastigo que la persona se inflige a sí misma, porque no soporta la satisfacción que conlleva la realización de su deseo.

“Tengo miedo a repetir la historia” — Mujerhoy.com –  http://www.mujerhoy.com/psico-sexo/sentimientos/tengo-miedo-repetir-historia-684733062012.html#VzW1H1Q6IOn3etcL