Como cada año en esta época del año se van a comprar animales sobretodo cachorros de perro o gatos para regalar a los niños. Cuando llegue Semana Santa, la tres cuartas partes de esos animalitos serán abandonados en algún pueblo o carretera.
¿Porqué no pensar un poco, sólo un poco antes de comprar un ser vivo que ama, confía, siente y padece? No tengo nada en contra de las tiendas de mascotas pero primero con la cantidad de animales abandonados en las perreras ¿porqué no acudir a una? de paso haremos una buena obra.
¿O hay qué presumir de raza, pedigree y belleza?
Antes de dar el paso tenemos que sopesar los contras, criar un cachorrito necesita tiempo, paciencia y dedicación, enseñarle a ser limpio, sacarle de paseo, guardar las zapatillas preferidas, aquellas que tanto nos gustan antes de encontrarlas hechas unos zorros, cuidar de los muebles etc… Un cachorro da trabajo y mucho, lo digo con conocimiento de causa aunque jamás se me ocurrió abandonar a ninguno.
Luego tenemos que tener en cuenta los gatos , el tamaño etc…
¡Es que son tan monos de pequeñitos! Pero luego crecen, ocupan sitio, molestan y ¡hala a la calle!.
Si tenemos intención, buena por supuesto de regalar un perro hemos de tener en cuenta que adquirimos una responsabilidad, nadie nos obliga pero tenemos que hacerlo con la consciencia que un animal no es un juguete que se tira cuando uno se cansa de él, es una criatura viva y no se puede jugar con la vida de nada ni de nadie. Los animales tienen sus derechos lo mismo que los humanos y no caemos en la cuenta que tienen sentimientos y dependen de su dueño.
Estoy muy cansada de oír :”allí se queda para darse vida” ¿Qué vida pregunto? una vida de abandono no es vida ni mucho menos ¿Porqué no meternos en la piel de un perro abandonado sólo un instante? Por su cabecita pasan un montón de preguntas, tiene reacciones de todo tipo buscando a sus dueños porque él nunca los abandonaría. Siempre he tenido animales en mi casa y siempre fueron o maltratados o encontrados.
Muchas veces me avergüenzo de ver deambular en el pueblo perros dejados a su destino, al principio vienen relativamente contentos, esperan el feliz regreso del amo, luego pasan los días y se ve el cambio, vagan tristes con el rabo entre las patas traseras, las orejas gachas y buscando comida, van adelgazando y un buen día desaparecen… ¿Y ESO es darse vida?
Por favor lo pido, sé que no cambiaré el mundo pero antes de comprar un animal, un ser vivo pensadlo bien, es una atadura claro pero os lo devolverá con su confianza y su amor.
Pero bueno, ¿qué se puede esperar si el género “humano” es capaz de abandonar bebés, ancianos y todo lo que se interponga en su camino?