La Mesa de Atención Primaria alerta de que no se están cubriendo jubilaciones ni bajas
La situación “representa un deterioro en la calidad de la atención a la población infantil”
El Colegio de Médicos de Madrid (Icomem) considera que la falta de pediatras en los centros de salud de la región “representa un deterioro en la calidad de la atención a la población infantil”. La Mesa de Atención Primaria de esta institución ha denunciado hoy mediante un comunicado público que no se están sustituyendo las jubilaciones, bajas y vacaciones de los pediatras que trabajan en los ambulatorios, lo que obliga a que sean otros profesionales –los médicos de familia– los que se encarguen de asumir a los pacientes infantiles.
“Las familias afectadas se ven obligadas a desplazarse a centros alejados de su domicilio, en contra de la accesibilidad, la continuidad de cuidados y la equidad, esenciales para una atención de calidad”, señala el texto. Añade que “la Mesa de Atención Primaria advierte de que situaciones de esta naturaleza representan un deterioro de la calidad en la atención a la población infantil madrileña” y solicita que la Administración sanitaria tome “las medidas necesarias para que todos los niños madrileños tengan acceso a un pediatra en el centro de salud cercano a su domicilio”.
Los representantes de los pediatras en el Icomem sospechan que la Comunidad de Madrid podría estar llevando a cabo “un cambio subrepticio” del modelo actual. “El modelo que tenemos actualmente en España consiste en que a los niños los atienden pediatras en todos los niveles asistenciales”, explica Ángel Carrasco, pediatra en el centro de salud Potosí (Madrid) y portavoz de la Mesa de Atención Primaria (AP). “Se ha comprobado en numerosos estudios que ese es el modelo que mejor funciona, el más beneficioso para los niños. En países como en Reino Unido, donde solo hay pediatras en los hospitales y son losgeneral practicioners (médicos de familia) los que atienden a los menores en primaria, los resultados son peores en, por ejemplo, exceso de mortalidad evitable”, añade.
La Mesa de AP del Colegio de Médicos teme asimismo que ese cambio de modelo podría estar sustentado en un intento de reducir costes. “Puede parecer que es más barato que a los niños los atiendan médicos de familia, pero se sabe que eso no es así. Los pediatras evitamos costes al sistema puesto que derivamos menos a los hospitales y recetamos menos antibióticos”, señala Carrasco. De momento, esta institución carece de datos concretos sobre número de centros de salud en los que faltan profesionales. Sin embargo, asegura que “cada vez se reciben más quejas”. “La situación se está deteriorando y queremos dar un toque de atención”, explica el portavoz.
Los pediatras llevan años denunciando la situación de sus consultas en la región. En 2009, una encuesta realizada por sociedades científicas mostró que uno de cada cinco médicos que atienden a niños en los centros de salud no es pediatra y que casi el 6% de las plazas estaban sin cubrir cuando se realizó la encuesta (el verano anterior). La situación está empeorando, asegura ahora el Colegio de Médicos. “Con los recortes, se ha reducido mucho el presupuesto de los centros de salud para cubrir suplencias”, señala Carrasco.