Desde los tiempos más antiguos se ha reconocido el poder sugestivo de la cadencia del ritmo impartida al lenguaje más que a su misma significación y generalmente las salmodias, invocaciones, o conjuros de las prácticas mágicas son cantadas.
La psicología admite que la música es capaz de provocar en el organismo del auditor reacciones internas que involucran una serie de fenómenos que abarcan desde la modificación del ritmo respiratorio y de la circulación sanguinea hasta la modificación de la secresión glandular.
Por tal motivo cabe asignar una significación terapeutica a la música especialmente en las afecciones nerviosas.
Por supuesto la música no se limita a esos afectos fisiológicos y es para la humanidad el lenguaje “UNIVERSAL DEL SENTIMIENTO Y LA PASIÓN”
La audición musical convenientemente dosificada y adaptada a la propia naturaleza y a las circunstancias produce siemptre efectos beneficiosos y estados espirituales elevados ayudando a deshechar conflictos psíquicos y estados depresivos.
Un instrumento de cuerda puede elevar el espíritu a planos emocionales de trascendencia, inconcebible para un razonamiento mental; un instrumento íntimo como la guitarra o el arpa puede producir estados emotivos de exquisita delicadeza y un instrumento de viento, como el oboe impone una idea de lajanía e infinito.
MÚSICA DE LAS ESFERAS:
Expresión empleada por Pitágoras que fue le primero en descubrir una relación matemática entre las frecuencias de los varios tonos de la escala musical.
Al postular que las órbitas de los planetas mostraban una relación similar basadas en su distancia del centro
definió la relacion mutua de susu órbitas como “Armonía de las Esferas”.
Pitágoras vivió hace 2500 años y desde pequeño se le veía jugar con cuerdas pero estas
Cuerdas tenían la particularidad que no eran comunes y corrientes, sino rígidas como las que se utilizaban en instrumentos musicales como la Lira.
Pitágoras utilizaba cuerdas de diferentes longitudes que tensaba y pulsaba una a una para producir distintas notas musicales.
NUMEROS MUSICALES:
Finalmente halló dos cuerdas que daban notas separadas por una octava; es decir si una daba el Do bajo, la otra daba el Do agudo.
La razón de longitudes de las dos cuerdas cuyas notas diferían en una QUINTA”; una de las notas era un Do, por ejemplo, y la otra un Sol.
La cuerda que producía la nota más baja era, ahora exactamente vez y media más larga que la otra. La razón de las longitudes era de 3 a 2.
MARIA ISABEL CUMPLIDO.