“Amor no es amor…” Como ha dicho Shakespeare (Soneto 116), lo que parece amor algunas veces puede no ser amor. En tanto que el tema del amor ocupa un lugar preponderante en las inquietudes de las personas (y probablemente mucho de su tiempo y dinero), su principal preocupación generalmente se limita a encontrar el amor o ser amados a los ojos de los demás, en tanto que, descuidan e ignoran el significado del amor o de la capacidad de amar. La presunción que yace tras tal actitud podría muy bien ser la estimulada por un objeto externo. Por consiguiente, el remedio o solución de una vida sin amor, serìa encontrar tal objeto—-alguien nuevo y mejor.
Erich From, psicoanalista y filósofo social, considera el amor como un “arte” que “requiere conocimiento y esfuerzo”; él define el amor como “la acción de cuidar la vida y el crecimiento de aquellos que amamos” (el arte de amar, pp 1, 25). Si el amor es nuestra capacidad de sentir y actuar en bien de la felicidad y libertad de otra persona, la solución al problema de los sufrimientos derivados del amor, en el plano más fundamental sería, por lo tanto, una búsqueda no exterior , sino interior con miras al desarrollo de aquellas cualidades del carácter necesarias para tal fin y de la fortaleza interior que nos capaciten para amar genuinamente.
DOMINAR EL ARTE DE AMAR ES SOBREPONERSE A LOS DESEOS DE CONTROLAR O DEPENDER DE OTROS.-
Uno de los mayores obstáculos que nos impiden disfrutar el júbilo de amar es nuestra necesidad y deseo de controlar. Muchas veces confundimos nuestro deseo de controlar a “amor” puede ser el disfraz del deseo de manipular a los demás para nuestra propia satisfacción. En sus escritos, Nichiren Daishonin emplea a menudo la metáfora de una figura mítica llamada “el rey demonio del sexto cielo”, para representar el deseo profundamente enraizado en el ser humano de controlar a los demás. Cabe notar que, otro nombre empleado para referirse a este rey demonio significa literalmente: “aquel ser celestial que hace uso a su antojo de los demás” (jpn takejizaiten)). Mediante sus vividas descripciones de este “demonio”, el Daishonin parece querer indicarnos la importancia que tiene el que estemos conscientes y vigilantes respecto de nuestros deseos de usar a los demás como medios para nuestros fines egoístas.
Habida cuenta que la dependencia es esencial al control, el rey demonio emplea diversos ardides para hacer a la gente dependiente de él. Una de sus armas principales para estimular la dependencia es el falso afecto. A pesar de la idea generalizada de la apariencia del rey demonio como un fiero monstruo, a él le encanta mostrarse afectuoso, a fin de atraer a las personas y mantenerlas bajo su control. Se dice que el rey demonio se hace pasar por un buda o un padre.
Por ejemplo, el Daishonin afirma, “El demonio del sexto cielo está dotado de las treinta y dos características del Buda y manifiesta el cuerpo del Buda” (Gosho Zenshu, p. 114). El Daishonin también cita un texto budista que dice: “En tanto la persona no intente liberarse de los sufrimientos del nacimiento y la muerte y aspirar al vehículo de la Budeidad, el demonio cuidará de ella como un padre” (Los principales escritos de Nichiren Daishonin, p. 770). En verdad, hay en la tradición Budista un demonio llamado el “demonio de la misericordia” (Gosho Zenshu, p. 526).
Aquellos deseosos de controlar a los demás pueden a menudo aparecer como personas afectuosas— “cuidándoles” o “siendo amables con ellos” —con la finalidad de mantenerlos dependientes material y emocionalmente. En la obra teatral de Ibsen, “Casa de Muñecas”, él en, apariencias flamante esposo, Torlvard Helmer, pero en realidad persona dominante, le recuerda a su esposa Nora su “amor” expresado como manutención y sustento financiero en las siguientes palabras: “Mi hermosa mascota es muy dulce, pero escapa con impresionantes cantidades de dinero. Es increíble cuan costoso resulta para un hombre mantener ese tipo de mascota” (Acto I, trad. De James McFarlane y Jens Arup).
EL VERDADERO AMOR SE ENCUENTRA EN NUESTRAS SINCERAS ACCIONES EN PRO DEL BIENESTAR, FELICIDAD Y LIBERTAD DE LOS DEMAS
Es fácil confundir el control y dependencia con amor. En apariencia el amor egoísta, al igual que el amor del rey demonio, es engañoso, ya que en ambos casos están condicionados a la sumisión. Tal como indica el Daishonin, el rey demonio es afectuoso “en tanto y cuanto la persona no trate de alejarse de” su control (WND, 770). Algunas personas estarían dispuestas a darle cualquier cosa a sus “seres amados” solo con la finalidad de mantenerlos dependientes. Aquellos obsesionados con el control, a menudo les resulta difícil desear genuinamente la felicidad e independencia de los demás. Por el contrario, esperan ver a los demás desposeídos de una forma u otra, a fin de conservar su sentido de superioridad.
La prueba de nuestro amor, en ese sentido, estriba en la sinceridad al alentar y apoyar la autosuficiencia y libertad de quienes amamos. Como afirma el Daishonin: “La naturaleza del rey demonio es regocijarse de aquellos que forman karma en los tres senderos del mal y sufrir como consecuencia de aquellos que forman karma en los tres vehículos” (WND, 42). Aquellos con tendencia a dominar a los demás podrían fácilmente mostrar lastima por el sufrimiento de los demás, en tanto que interiormente se regocijan de su sufrimiento. El sufrimiento de los demás le da a quienes son dominantes la oportunidad de mostrar su superioridad y de esta forma recordarle a quienes sufren de su necesidad de dependencia.
En la esencia de una relación construida sobre el dominio y la sumisión se encuentra un profundo sentido de inseguridad e incapacidad de ambos lados. Aquellos poseídos por el deseo dominar no pueden encontrar sentido a sus propias existencias, por lo tanto, necesitan derivar la sensación de poder, subyugando a los demás. De forma similar, quienes se someten a una autoridad externa no pueden ver su propio valor. De allí que se sienten impulsados a convertirse en parte de alguien “mejor” y “más fuerte”, abandonando de esta forma su propia identidad e integridad. Para estas personas sumisas, el control significa protección contra su propia inseguridad. Los sometidos al control de una autoridad externa no pueden ver sus vidas como algo que vale la pena de ser vivido, si embargo, no pueden tolerar el vacío de no tener alguien por quien vivir. De allí que deben buscar un objeto externo con el cual fundir su identidad, de forma que, no tengan que enfrentar la debilidad y el vacío de sus propias vidas.
La relación simbiótica entre el que domina y sojuzgado se altera cuando el dominado descubre el valor de su propia vida y desarrolla fortaleza interior para volverse independiente. Entonces, la inseguridad de la parte dominante aflora como frustración y enojo. La siguiente descripción que hace el Daishonin del rey demonio ilustra su intenso miedo y ansiedad relacionadas con este tema: <<< Cuando nos acercamos al logro de la Budeidad… el rey demonio del sexto cielo, señor del mundo tripartita, hace el siguiente razonamiento: “Si estas personas se convirtiesen en Budas, sufriré graves perdidas en dos diferentes instancias”.”En primer lugar, si se liberan del mundo tripartita, se escaparan de mi control. Segundo, si se convierten en Budas, sus padres e hijos también abandonarán el mundo saha. ¿Cómo puedo impedir que esto ocurra?” (WND, 1094). “Cuando un mortal común durante el último día de la Ley está próximo a la Budeidad… este dominio es sorprendido”. “Y se dice a sí mismo: esto es de lo más molesto”. “Si permito que esta persona abandone mi dominio, él no solo se liberará a sí mismo de los sufrimientos del nacimiento y la muerte, sino que, igualmente, conducirá a otros a la iluminación”. “Más aún, se apoderará de mi reino y lo convertirá en una tierra pura. ¿Qué puedo hacer?(WND, 894-95). >>>
PARA AMAR VERDADERAMENTE, PRIMERO DEBEMOS LIBERARNOS DE LA “OSCURIDAD FUNDAMENTAL” DENTRO DE NOSOTROS
El rey demonio no desea que nadie logre la iluminación y se libere, ya que ello constituye un doloroso recordatorio de su propia incapacidad y dependencia. La paradoja de éste rey demonio, quién habita en “la cima del mundo del deseo y gobierna mundo tripartita” (WND, 508), es que él se encuentra dominado por su propio deseo de controlar. El rey demonio es un gobernante que no pude regirse a sí mismo. En la medida en que posee mayor control aumenta su necesidad del mismo. Perpetuamente movido por su debilidad e inseguridad interna, jamás se siente satisfecho. Es prisionero de la cárcel por él creada.
Aún cuando se dice que él usa a su antojo a los demás, en verdad nunca es libre de la realidad interna de su vida. El rey demonio, por lo tanto, es incapaz de amar.
El rey demonio se dice que habita en el sexto y màs alto reino del mundo del deseo, pero su “amor”, si se le pudiese denominar como tal, tiene como resultado una profunda insatisfacción y sufrimiento bajo su aparente placer celestial. Como William Blake expresa en su poema, respecto de ese amor egoísta: “El amor que busca satisfacer el yo/Atar al otro a su deleite: /Se regocija en la incertidumbre del otro, /Construye un Infierno en el Paraíso “ (El Terrón y el Guijarro” de Canciones de Experiencia, ed. D. V. Erdman).
A fin de, amar genuinamente, debemos ser libres. Ser libre conlleva entonces, descubrir nuestro valor intrínseco. En el soneto citado anteriormente, Shakespeare dice: “Que nada impida la unión de mentes en perfecta armonía / Presenten los impedimentos”. Uno de los grandes impedimentos a nuestra capacidad de amar es la ilusión respecto de la verdadera naturaleza de nuestro ser—la Budeidad. Ese tipo de ilusión conduce a una ausencia de capacidad y a la dependencia. La figura mítica del rey demonio es simbólica de esta ilusión, que como dice el Daishonin: “La oscuridad fundamental se manifiesta como el demonio rey del sexto cielo” (WND , 1113). Arrojar luz sobre esta “oscuridad fundamental” interior mediante el fortalecimiento de la confianza en la Budeidad dentro de nuestras vidas, es por lo tanto, una practica esencial para el arte de amar.
IDEAS PARA LA REFLEXION
¿Ve usted señales en su vida del “amor del rey demonio” (en otras palabras, control disfrazado de amor?). ¿Còmo maneja sus problemas de inseguridad y necesidad de controlar a los demás en el mundo de sus relaciones?.
Al amor que se remonta sobre las diferencias entre el ser y los demás se le puede considerar como una de las piedras angulares de la ética universal humana. (Por ejemplo, podemos ponderar la Regla Dorada de la tradición Judeo-Cristiana y el ideal Budista de la misericordia hacia todos los seres humanos). ¿De qué forma nuestra capacidad de amar a los demás resulta importante para erradicar la violencia y crear la paz?.
http://seikyocriollo.blogspot.com.es/2006/02/lo-que-el-amor-no-es.html
Para mi, si hay una persona, que no se ve realizada, si no tiene alguien que la ame, se siente perdid@, si se esta toda una vida esperando lo que nunca llegará, y que se crea que el amor todo lo puede incluso, capaz de soportar lo indecible, incluso cree sus mentiras, como verdades absolutas,eso para mi no es amor, simplemente es ser esclavo de esa idea que se forjo erróneamente de que es el amor.
El amor no te obliga a esperar, ni que aceptes una canita al aire, o un maltrato psicológico o una paliza, no debe humillar, ni faltar al respeto, el amor no es aguantar todo lo que te echen encima y no te den tu lugar, el amor es compartir, respetar , amar y perdonar pero nunca perder tu dignidad y tu individualidad y libertad, siempre respetando los sentimientos de otro, para no herir… Si el amor te hace sufrir y lo consientes esto no es amor es sadismo y esclavitud, esto es lo que me ha suscitado el cuadro al principio del articulo
He comentado pocas veces antes en tu blog. Ahora que reencuentro todo en la página y me regocijo por ello, al encontrar este post emergen ciertas sensaciones que, a lo mental, se contradicen y en lo sensacional reacciono con desaliento.
Ejemplos del tema citado somos, apreciamos y percibimos: sintonizamos. Está expuesta una manera de sobrepasar las ideas con un bastón de -lo que considero como único pecado-, que en sí mismo se define como CULPA. Un traje que no traje, que al llegar no sentimos. Justamente anoche vi la fotografía de una niña nacida hace unos días, hija de una persona cercana, ¡CON UNA EXPRESIÓN MARAVILLOSA EN SU ROSTRO! Sí, sonrisa y calma, pero más allá…
En lo mental puedo deducir recorridos, simbolizado esto en términos fractales discurre una trayectoria de contemplación «en-donde» podemos focalizar en zoom, in u out y salir por conexos vibratorios. [ Tal vez salgo de tema, pero lo digo ] Algo así como la expresión lingüística derivada por numerología, un supuesto que imaginé posible por familiarizar palabras y conceptos de acuerdo a las combinaciones cifradas, de letras con números, de sonidos con vocablos y todo ello derivado en abstracciones expresivas de lo mismo que definen. ¿A caso las expresión es sinónima de sí? ¿esto significa que, a lo práctico de este vocabulario imaginado, cada frase por letras conexas y sumatoria en general, derivarían en expresiones de lo mismo? Y que pueden acoplarse en el sentido, restarse por correspondencia intencional.
En la misma metáfora del idioma que acabo de exponer, acompaño la opinión de-esto-que-tratamos y denominamos Amor. ¡Una frase constituida en lo «dadá» celebra un cadáver exquisito por resucitar en conexión del incierto!
Si bien podemos proyectar realidades y, de hecho, reconectamos y recolectamos frutos de la misma semilla que, somos y podemos vitalizar: existe relación entre las ocurrencias del durante, en el supuesto del espacio, a la distancia del tiempo marcado por velocidad en el absurdo del vacío u lleno absoluto. Conformamos lo mismo, el proceso es individual y lo único que nos vale, como seres independizados y sintonizados en esta porción de realidad, es el sentirnos verdaderos, a su vez y manera razonables, comprendidos por una sensación que NO depende pero pende del mismo «cielo y tierra» que nos une y no podemos obviar, a veces. La abstracción que determina al Ego nos puede resultar una paradoja muy correcta y verdadera, como el opuesto de paradoja. El hecho de celebrar la propia libertad en calidad de experiencias, a los tonos que pueda uno transitar y los puentes que lleguen u enviemos, siendo responsables. Palabra que resalto. Esto mismo, volviendo a lo egóico, responsables por el eco, sí. Pero así también como la reafirmación de lo que contenemos o permitimos que fluya a través nuestro. Verdad-Amor resonante. Las partículas cercanas (obviando «espacio») sólo reflejan, al parecer externo, aunque internamente también predican su propia nota y así, transmuta el cambio evolutivo, con potencialidad. Energía es neutra, es-fuerza que no fuerza, sino sugiere adaptación a los órdenes estructurales, sea esto materia, éter o sensación.
Bendito des-ahogo, hermano.
GRATITUD.
Jesús Prochotsky
Con mi careto de extranjero,
judío errante, de pastor griego
y mis cabellos a los cuatro vientos,
yo vendré mi dulce cautiva,
mi alma gemela, mi fuente viva,
vendré para beber tus veinte años
y seré príncipe de sangre,
soñador o bien adolescente,
como te guste escoger,
y haremos de cada día
toda una eternidad de amor
que viviremos a morir
Giuseppe Mustacchi
Gracias Vania
Siempre me ha gustado mucho Giuseppe Mustacchi
Y esta canción en especial.
Recuerdo que cuando estudiaba francés en la escuela (el inglés no se consideraba entonces), esa canción me ayudó en la pronunciación y tambien en la consciencia.
Un saludo
Linterna con poca pila, jajaa comparte con el maestro algo de este excelente canta autor.
Vania, hermoso,…siempre tan atinada y precisa.
Un abrazo.
marge
Hola marge, como vas? por aquí también, tratando de cargar pilas, y sabes? tengo un truco que la mayoría de las veces funciona:,
Me digo, fuerza, fortaleza, paciencia, pero principalmente gratitud! recordándonos que todo sucede de manera perfecta, que todo lo que haya tenido que experimentar en los últimos tiempos tuvo sus fieles propósitos en mi vida y en la de cada individuo y ser vivo de este hermoso planeta, porque es bonito ah qué sí?
Entonces me vienen los recuerdos por los que tengo que sentir gratitud y siento que la paz me inunda, para luego poder seguir cargando pilas.
Cuando están cargadas me viene la rebeldía,y me desplayo, así como el samsara, vuelta y volver a empezar. jajajaa es como las ruedas de goma se inflan y se desinflan.
Abrazos de energía.
Perdón Domi, y maestro, puse mi dccion de correo privado y salió el avatar que los identifica a Uds ., veo si puedo corregir, disculpen por favor.
marge.