2. Sentarte en el inodoro y ver que el papel higiénico se acabó.
3. Ir a tirar algo en el cesto de basura y ver que no hay bolsa de resíduos.
4. Escuchar tu propia voz en los mensajes de audio de WhatsApp.
5. Esa corridita que nos mandamos para no perder el bus.
6. Dar la misma corridita y que la puerta del metro se cierre en tu cara.
Nadie sabe que es peor, quedar afuera o adentro.
7. Sonreirle a alguien que te gusta y luego darte cuenta que tienes algo pegado en los dientes.
8. Ducharte y tener que salir corriendo por la casa desnudo porque te olvidaste de agarrar una toalla.
9. Cuando saludas a alguien que no te estaba saludando a ti.
Qué ganas de ser invisible.
10. Decir chau y luego volver a encontrarte con la persona.
Una sonrisa es la mejor solución.
11. Decir “buenas noches” de día y “buenos días” de noche.
12. Estirarte y darte cuenta que tu blusa esta rota justo en la axila.
13. Errarle a la letra de la canción cuando estas cantando a los gritos.
Y luego darte cuenta que alguien te estaba observando.
14. Mojarte los pantalones justo AHÍ y tener que interactuar con seres humanos.
15. Olerte la axila discretamente y que te esten mirando.
16. Levantar la mano para parar el subte sin darte cuenta.
Quien nunca hizo esto que tire la primera piedra.
17. Ser simpático sin saber que tu cremallera esta abierta.
Esos son los momentos en que te preguntas porqué no han creado una maquina del tiempo aún.
18. Mandar un beso al terminar de pedir delivery.
”- Señor, su pedido llegará en 30 minutos.
– Gracias, beso”.
– Gracias, beso”.
19. Bajar una escalera mecánica que está parada.
El primer paso siempre es el peor.
20. Asustarte con un insecto que en realidad no era un insecto.
Era solamente una bola de pelos. Felicitaciones.
Fuente: Difundir.org
Gracias domi, ja ja muy bueno para levantar el ánimo.