Nombre egipcio: Dyehuty
Nombre griego: Thot
Divinidad griega: Hermes
Representación: Hombre con cabeza de ibis
«El de Dyehut», «El de Dyehut», nomo XV del Bajo Egipto. Dios local y creador en Hermópolis. Era un dios lunar medidor del tiempo, puesto por Ra en el cielo para dejar una luz tras su retirada; sus diferentes fases ofrecen a los hombres una medida inmediata del tiempo, por lo que Thot era el que medía el tiempo de los cielos; fue el que estableció el primer calendario y por eso se le dio su nombre al primer mes. Fue también el que consiguió los cinco días epagómenos que permitieron el nacimiento de Osiris, Seth, Horus el Mayor, Isis y Neftis; asimismo, asimismo, el calendario lunar es el que se empleaba para marcar los acontecimientos religiosos. Recibió el nombre de «Regulador de las crecidas de las aguas» y el de «Toro de las estrellas» por representar los poderes mentales de Ra; en la Baja Epoca Thot fue llamado «Atón de plata», como sol de la noche. Bajo la advocación de «Señor del Tiempo» era el que se encargaba de anotar, con la ayuda de Seshat, los años de reinado de cada faraón en las hojas de una persea, el árbol sagrado de Heliópolis.
Es un dios que tiene capacidad para dirigir a los demás, sean cuales sean sus rangos; es el auténtico primer ministro, el dios de la sabiduría que exhorta al soberano a actuar o le empuja a tomar una decisión; procura que las decisiones del demiurgo sean cumplidas, funcionando así como mensajero; transcribe dichas decisiones convirtiéndolas en ordenanzas; vigila la distribución equitativa de los impuestos y la legitimidad de los títulos de propiedad; se encarga también de convocar asambleas de dioses cuando la importancia del asunto a tratar lo requiere.
También fue el inventor de la escritura; patrón de los escribas, de las artes y de las ciencias, del juego del senet. Como dios de la escritura, era el inventor de todas las palabras, del lenguaje articulado; se decía que codificó las ceremonias que transforman a los muertos en espíritus, y sólo los sacerdotes podían tener acceso a este conocimiento. Regía la Casa de la Vida en Hermópolis. Era el arquitecto que conocía bien los trazados y trayectorias de todas las cosas; señor de los inventores y de la sabiduría, también estaba relacionado con la música como inventor de la lira.
En Menfis, según la teoría de la creación, se le considera como la lengua de Ptah, cuyo poder propaga la vida a través del mundo. Su poder sobre las palabras le hacía estar al corriente de las fórmulas mágicas y enseñaba las fórmulas capaces de liberar del mal a los que quería conservar con vida.. Con su palabra ayudó a revivir al desmembrado Osiris; hizo de juez en la disputa entre Horus y Seth, curando luego las heridas que se habían infligido mutuamente, por lo que lleva el epíteto de «El que separa a los combatientes»; fue por curar con su saliva el ojo dañado de Horus, identificado con la luna, por lo que recibió el control sobre este satélite; fue también quien repuso los genitales a Seth. En la síntesis osiriaca es un fiel partidario de Horus e Isis, ayudando a ésta en el embarazo, nacimiento y posterior cuidado de su hijo. Sin embargo no siempre hace buen uso de su saber, no faltándole duplicidad y mala fe; puede llegar al engaño y la falsificación; él se asegura de repartir las ofrendas entre los suyos, manipula el curso de los astros y roba a los dioses una parte de lo que les corresponde.Según el Canon Real de Turín sucedió a Horus cuando este abandonó su reinado.
Acompañó a Onuris y convenció a la diosa Tefnut para que volviera de Nubia. Ayudante de Maat en el ejercicio de la justicia era el que anotaba el resultado del pesaje del corazón en la balanza del juicio y enumeraba los cargos ante los jueces.
En Hermópolis se creó a sí mismo. En una estela menfita se le hace emanación de Ptah. En los Textos de las Pirámides es considerado como hermano de Osiris y conspirador junto con Seth. Según el papiro Chester Beatty, nació del cráneo de Seth. En un texto de Esna nació del corazón del creador en un momento de amargura. Se le atribuyó como hermana y compañera la diosa Seshat, identificada con Nehemetauey, en Hermópolis Magna, y a Nehemetauey en Bahu, capital del nomo XV del Bajo Egipto.
En Hermópolis se le representaba en forma de babuino, tomada de Hedy-ur, o generalmente de ibis, o con cabeza de estos animales y con la luna creciente y el disco sobre su cabeza; en las manos llevaba los instrumentos de escriba.
Frecuentemente forma pareja con Horus de Letópolis. Se le adoraba en la ciudad de Hermópolis (Hnmw, la de los ocho, la de la Ogdóada ) en donde era dios principal desde tiempos muy remotos, aunque probablemente era originario del Delta. En Egipto era conocido como Dyehuty o «Semsu», el grande e incluso el «dos veces grande» y los griegos lo identificaron con Hermes, añadiéndole el apelativo de Trimegisto («Tres veces muy grande»); muy cerca de Hermópolis, en Tuna el-Guebel, se encuentra la necrópolis de los babuinos y de los ibis. También se le adoró en Hermópolis Parva. Tuvo además culto en Serabit el-Jadim, especialmente en el Reino Nuevo, y en Nejeb tenía una capilla de tiempos de Ramsés II. Sus fiestas se celebraba con higos y miel y sus adoradores se saludaban con la frase «dulce es la verdad»; los días de celebración era los días 1 y 19 del mes de Thot, de Thot, primer mes de la estación de Ajet. Su nombre lo llevaron los Faraones llamados Thutmes («Nacido del dios Thot»).
Hermes Mercurio Trismegisto Mosaico de la catedral de Siena, 1488
Intentar seguir las huellas de sus textos es muy difícil, los originales egipcios han desaparecido y lo único que queda son copias medievales de las traducciones al griego de la época alejandrina.
Según Jámblico:
Para la filosofía hermética lo importante no es el mensajero sino el mensaje.
Todas las cosas de aquí abajo tienen su origen arriba, y el hombre es el puente de unión que a través de su conciencia une los dos mundos.
Por eso Hermes Trismegisto puede asegurar que «lo que esta arriba es como lo que esta abajo».
Transmisor de las doctrinas universales. El fue uno de los primeros habitantes de las Dimensiones Altas que llego la conciencia terrena. Fundo con otros maestros espirituales el imperio Atlantis, donde era maestro atlantes de la luz. Después se marcho del continente que estaba apunto de hundirse para transmitir sus sabidurías y doctrinas universales a otros continentes. Así pues puso la primer piedra de las culturas altas del Egipto y de muchas doctrinas espirituales y esotéricas. En Egipto creó la grande pirámide Gizeh, hoy llamada pirámide Cheops, la cual fue su centro de inauguración y sabiduría.La mas conocida de esas escrituras es la «tabula smaragdina» los tablones de esmeralda. Esos 13 tablones de esmeralda forman parte de las obras mas antiguas y místicas de la sabiduría antigua. En ellas Hermes Trismegistos ha dejado su sabiduría para la posteridad.
lo que está arriba es como lo que está abajo
y lo que está abajo es como lo que está arriba,
para la realización de los milagros de la Cosa Una.
Y como todas las cosas proceden de Una, por la mediación de Una,
así todas las cosas tienen su origen en esta Cosa Una por adaptación.
El Sol es su padre, la Luna su madre,
el Viento le lleva en su vientre, su nodriza es la Tierra.
Este es el padre de toda perfección, o consumación de todo el mundo.
Su poder es integrante, si es convertido en tierra».
» Tu separarás la tierra del fuego,
lo sutil de lo denso,
suavemente y con gran ingeniosidad.
Ello asciende de la tierra al cielo y desciende nuevamente a la Tierra
y recibe el poder de los superiores y de los inferiores.
Así tienes la gloria del mundo entero;
por esto toda oscuridad huye ante ti.
Esta es la fuerza fuerte de todas las fuerzas,
venciendo todo lo sutil y penetrando toda cosa sólida.
Así fue creado el mundo.
De allí fueron todas las maravillosas adaptaciones,
de las cuales ésta es la manera.
Por esto soy llamado Hermes Trimesgistus,
teniendo las tres partes de la filosofía del mundo entero.
Lo que tengo para decir es completo concerniente a la operación del Sol».
Bonito e interesante artículo. Gracias Domi.
muy buen articulo y muy claro y a la vez profundo. gracias
Yilda