Dinamarca está cada vez más cerca de convertirse en la primera sociedad sin dinero en efectivo en el mundo, ya que el gobierno propone que los minoristas ya no deben estar obligados a aceptar pagos en efectivo.
El gobierno danés ha dicho que a partir del próximo año, los negocios tales como tiendas de ropa, restaurantes y estaciones de servicio ya no estarán legalmente obligados a aceptar pagos en efectivo.
La propuesta forma parte de un paquete de medidas de crecimiento económico, cuyo presunto objetivo es reducir costes y aumentar la productividad de las empresas danesas.
A pesar de que parece una medida drástica, los daneses ya casi no usan dinero en metálico.
Casi un tercio de la población utiliza una aplicación oficial del Danske Bank llamada MobilePay, que conecta el teléfono móvil con los teléfonos de otros usuarios o con un sensor en las cajas, lo que permite confirmar los pagos con un simple click en la pantalla del smartphone.
Tecnologías similares como PAYM están disponibles en el Reino Unido, mientras que Google Wallet convierte el teléfono en una tarjeta sin contacto.
Los países nórdicos de Dinamarca, Suecia, Noruega, Finlandia e Islandia son líderes mundiales en los pagos sin efectivo – los pagos en efectivo, incluso para los más pequeños objetos, como un paquete de chicles.
Mucha gente aplaudirá la llegada de estas tecnologías que pronto nos convertirán en auténticos esclavos, pues nuestros propios bancos y gobiernos podrán bloquear con un simple click el acceso nuestro dinero electrónico y puesto que no tendremos otra manera de tener dinero, tendrán un control absoluto de nuestras vidas.
Felicidades, amigos escandinavos: sois tan “civilizados”…