¿Podemos hablar de una filosofía del Romanticismo?
En parte, si. Como todo movimiento estético y cultural, lascaracterísticas del Romanticismo son, de hecho, una especie defilosofía, de postura frente a la vida y el ser.
Ahora bien, la filosofía del Romanticismo, y acaso la de cualquier otro período, comienza en la construcción de su alma, en el entendimiento de sus formas e inclinaciones.
Sturm und Drang.
Sturm und Drang es una frase en alemán que significa «Tormenta e Ímpetu». Nadie sabe a ciencia cierta quién fue su autor, aunque se sospecha que en realidad pertenece a un grupo de escritores alemanes que impulsaron el movimiento.
La filosofía del Romanticismo, expuesta intensamente en la esencia del Sturm und Drang, podría simplificarse en dos postulados fundamentales:
- La libertad del artista.
- El único fin que debe perseguir el arte es la belleza.
El término Romanticismo, de hecho, era peyorativo en su tiempo. Se forjó en Inglaterra durante el siglo XVII, y su sentido, lejor de entender al romance como nosotros, expresaba la evolución (y retroceso) a lasnovelas románticas de caballería, las cuales nunca fueron del todo admitidas por los sabios.
La filosofía del Romanticismo, que chocó fuertemente con los clasicistas franceses, tiende a promover la libertad del ser, que en contraste con su situación real necesariamente la vuelve una filosofía pesimista.
Casi toda la filosofía del Romanticismo gira en torno a la incomprensión que sufrían los artistas, la cual debe haber sido la misma en todas las épocas, pero que aquí encontró no solo una resistencia, sino un deseo intenso de simbolizarla de una forma acorde a su ideología, es decir, mediante lo estético.
El filósofo del Romanticismo es, en cierta forma, el artista arquetípico de aquel período. Su alma valoraba el sentimiento por encima de la razón; es decir, lo voluptuoso y lo sensorial sobre la eficacia y la economía artística. No es extraño entonces que el Romanticismo suela despacharse con gruesos volúmenes prácticamente inabordables para el lector moderno.
Pero la filosofía del Romanticismo no se ciñe a lo estético en cuanto a lo estrictamente sensorial. Una de sus raíces principales se encuentra en la fuerte asociación entre el amor y la muerte; es decir, entre el hombre ínfimo que ama y sufre en tanto individuo aislado de la naturaleza. En este sentido, la contemplación sería uno de los ejercicios fundamentales de todo romántico.