maestroviejo cree que este tipo de investigaciones es un nuevo paso pero en sentido contrario.
El ser consciente debe superar precisamente los malos recuerdos para ser fuerte y alcanzar el equilibrio.
Siempre se aprende de las derrotas, del dolor, cuando van acompañadas de amor por parte de un ser querido o un guía o tutor.
El posthumanismo significa la destrucción del ser espiritual y el abrazo a la máquina y al control del cuerpo mediante la tecnología.
Se persigue un nuevo ser definitivamente alejado del universo y anclado en la dependencia de una sociedad consumista, sin valores, ni objetivos salvo el de sobrevivir sin importar como.
De qué sirve educar a los niños, si con una pastilla, con un chuche, con …. Algo fácil, el truco, que no requiere esfuerzo, y se consigue todo.
Puedo matar y luego tomarme una pastilla y ser feliz.
Pero lo que ha matado esa pastilla, es la capacidad del que la toma para mejorar su karma, su ser, su esencia.
¿Imagina poder poner fin para siempre a sus peores recuerdos? Experiencias traumáticas o dolorosas podrían desaparecer de nuestro cerebro gracias a una pequeña molécula que eliminaría las evocaciones dolorosas dejando el resto de nuestra memoria ilesa. De momento, se ha logrado con ratones. Un primer paso para obtener medicamentos antirecuerdos.
Científicos del Brain and Behavior Discovery Institute (Georgia, Estados Unidos) y del Institute of Brain Functional Genomics de Shanghai (China) experimentaron con ratones con una leve modificación genética.
La revista Neuron explica cómo este grupo de científicos les añadieron una enzima y les realizaron varias pruebas de memoria. El resultado fue que los roedores encontraban más problemas para recordar que un ratón normal. Tras varios experimentos coligieron que los ratones eran capaces de aprender y memorizar, pero la actividad excesiva de la molécula de la memoria provocaba que no pudieran recuperar recuerdos recientes e, incluso, antiguos.
Gracias a esta enzima se comprobó que los ratones habían borrado estos recuerdos, hasta el punto de que olvidaran aquello que les daba miedo. El primer paso está dado. Ahora sólo queda ver hasta dónde se puede llegar y quizá podamos olvidarnos de nuestros traumas.
Precedentes
El año pasado, científicos canadienses afirmaron que era posible poner fin a los malos recuerdos, en particular a los que causan el llamado Trastorno por Estrés Postraumático (TEP).
Según investigadores de la Universidad McGill en Montreal, los traumas, temores y ansiedades asociados a un recuerdo en particular podían ser eliminados con la intervención de medicamentos. El estudio apareció en la Revista de Investigación Psiquiátrica.
Una droga para olvidar
Años antes, en 2005, científicos en Estados Unidos descubrieron que un medicamento, utilizado comúnmente para reducir la presión arterial, podría ayudar a la gente que había vivido eventos traumáticos.
El equipo de psiquiatras de la Universidad de Cornell, en Nueva York, descubrió en pruebas con animales que el betabloqueador propranolol podía interferir en la forma en la que el cerebro almacena los recuerdos.
Según los investigadores, la terapia psicológica que se le da a la gente que sufre síndrome de estrés postraumático, por haber sido víctima de un evento violento como los ataques ocurridos en Londres o Madrid, no siempre es efectiva, y por eso se buscan otras alternativas.
Experimento con ratas
El estudio, publicado en la revista Nature, se llevó a cabo con ratas que habían aprendido a temer a un sonido que precedía a los choques eléctricos. La investigación demostró que las ratas perdían ese miedo si se les suministraba propranolol cuando se iniciaba el sonido.
Fuente: caracol.com
Estamos viviendo una época en la que la paranoia elitista, lleva a sus fieles científicos serviles (ahora ya por miedo, a quedarse sin trabajo, luego de estudiar años y años, o no (vaya Vd a saber, siempre hay un cerebrito de turno, que lleva el proyecto)) a invertigar más allá del sinsentido humano de las cosas.
Me da la sensación de que los de la (élite), se están dando cuenta de un tiempo a esta parte, de que el sistema democrático, impide o impidía mejor dicho, la fácil consecución de unos planes con que adueñarse cínica y codicieramente, de todos los recursos del planeta, sólo para sí mismos.
Haciendo de paso, completamente dependientes al resto de los seres, que poblamos este planeta.
Sus armas son la desinformación (la mentira) y el miedo (el terror), que posibilitan a todas luces una truculenta manipulación, que sirve sólo que a sus desalmados fines.
La situación no puede ser más diáfana a ojos vista de todo lo que está aconteciendo y de lo que se silencia en los medios convencionales, que usan con una maestría diabólica.
Si les dejamos a su libre albedrío, esto es el fin.
Actuemos y unámonos en el sólo fin de desenmascarar públicamente, sin miedo y con coraje. Denunciemos a los cuatro vientos, sus actividades inhumanas en unas cortes pro derechos humanos a escala planetaria, que podemos llegar a crear entre todos. Pongámonos a trabajar todos juntos en este y cualquier otro proyecto de calado, que permita a todos los seres de este planeta, convivir en plena concordia y mejor juicio. Las venideras generaciones, no se merecen un mundo diseñado sólo para sufrir. Supuesto que se viene a la Tierra a vivir en plena conciencia planetaria y en paz.
Totalmente de acuerdo contigo maestro, las experiencias nos enseñan como vivir, para no volver a caer en errores, superos cada dia mas, lastima por las personas que lleguen a usar esas pastillas…