• Reemplazar el cartílago es un problema persistente, pero una nueva investigación muestra algunos caminos potenciales para avanzar.
• Millones de residentes en Estados Unidos (quizás hasta el 3 por ciento de la población) tienen una cadera o una rodilla artificiales, o ambas.
• Un nuevo “andamio” inyectado de péptidos y polímeros podría apoyar y estimular el crecimiento del cartílago.

El cartílago es un problema muy importante en la medicina articular: es tan delicado que perderlo suele ser un camino irreversible y sin retorno que lleva a un reemplazo articular o a una vida de dolor. Pero si un equipo de científicos de la Universidad Northwestern tiene algo que decir al respecto, algún día podremos realmente generar nuestro propio cartílago nuevo.

El equipo de investigadores anunció recientemente, en un estudio publicado en la revista PNAS Applied Biological Sciences, que tienen las primeras pistas en la mano sobre cómo podríamos reconstruir el cartílago de la rodilla utilizando un armazón de polímero . “Cuando el cartílago se daña o se descompone con el tiempo, puede tener un gran impacto en la salud general y la movilidad de las personas”, dijo el líder del estudio, Samuel Stupp, en un comunicado de la universidad. “El problema es que, en los humanos adultos, el cartílago no tiene una capacidad inherente para curarse”.

En un artículo de 2015 , investigadores médicos no relacionados calcularon que siete millones de estadounidenses vivían con al menos una rodilla, cadera o ambas reemplazadas en el año 2010. Ese porcentaje combinado, de alrededor del 2 por ciento, solo ha aumentado desde entonces: un 0,25 por ciento en 1980, un 0,8 por ciento en 1990 y un 1,37 por ciento en 2000. Y los investigadores dijeron que solo seguiría aumentando.

Entonces, ¿por qué la investigación sobre la regeneración del cartílago ha tardado tanto? Bueno, una razón podría ser que los científicos se han centrado en el cartílago de imitación durante algún tiempo, pero este grupo se centra en el cartílago real.

Dicho esto, durante mucho tiempo se consideró que era casi imposible regenerar el cartílago humano, por lo que mejorar los cartílagos de imitación, los reemplazos de cartílago hechos solo parcialmente de cartílago y los procedimientos de reemplazo fue lo mejor que pudimos hacer durante mucho tiempo. La Clínica Mayo, por ejemplo, terminó recientemente un ensayo clínico de un procedimiento conocido como RECLAIM , en el que el cartílago existente se “pica” y se recombina en una especie de receta de pastel de carne de la Gran Depresión que amortigua las articulaciones. Pero este procedimiento es para un tipo específico de paciente joven y atlético con una lesión reciente en el cartílago. Las personas mayores con artritis o problemas de por vida no están cubiertas, o, al menos, todavía no lo están.

Entonces, ¿cómo hace este nuevo andamiaje para lograr lo que durante mucho tiempo parecía imposible? La estructura está hecha de ácido hialurónico y un péptido bioactivo, y está dopada con nanoseñales especiales para engañar al cuerpo y hacer que “reconstruya” el cartílago donde no se ha construido ninguno. El ácido hialurónico es un polímero natural hecho de azúcares complejos en el cuerpo, que proporciona a las nuevas células de cartílago una sustancia viscosa agradable a la que adherirse. Y los péptidos son simplemente cadenas de aminoácidos; en este caso, es uno que responde bien tanto al agua como a la grasa (anfifílico), y mantiene una estructura incluso después de ser inyectado en forma de “suspensión”.

Este estudio fue un ensayo con ovejas, que tienen una articulación similar a la de la rodilla que es un buen análogo de nuestras rodillas humanas. Las ovejas tienen una capacidad de carga similar a la de los humanos, y su cartílago es igualmente lento para regenerarse. Y tras las pruebas, el andamio produjo mejores resultados para el cartílago de las ovejas con el tiempo. El equipo de Stupp también está investigando algo que llaman «moléculas danzantes», explicó la declaración de la universidad, que utilizan un enfoque diferente para estimular la producción natural de cartílago.

La durabilidad no es la única razón para optar por el cartílago natural en lugar del artificial. Muchos de los pacientes que necesitan reemplazos de rodilla son mayores y los riesgos asociados con cirugías como esta solo aumentan con la edad. Una solución completamente no quirúrgica podría ayudar a las personas que no son aptas para la cirugía.

Además, estimular la producción de cartílago en el propio cuerpo no conlleva el riesgo de una respuesta inmunitaria ni de otras complicaciones relacionadas con el uso de materiales externos en el cuerpo . A medida que nos volvemos más conscientes de los efectos secundarios de los reemplazos de cadera de metal sobre metal a base de cobalto (como la metalosis y el envenenamiento por cobalto ), estos productos naturales tienen mucho más atractivo a largo plazo.

“Nuestra nueva terapia”, concluyó Stupp en el comunicado, “puede inducir la reparación de un tejido que no se regenera de forma natural . Creemos que nuestro tratamiento podría ayudar a abordar una necesidad clínica grave e insatisfecha”.