«Rusia ha aprendido mucho y está desarrollando sistemáticamente una competente estrategia y tácticas», opina el analista militar Ryan Faith en su artículo para Vice News.

El 17 de noviembre después de la orden del presidente ruso, Vladimir Putin, sobre la intensificación de los ataques aéreos contra las posiciones de la organización terrorista Estado Islámico, la aviación a larga distancia se ha incorporado a la operación de la Fuerza Aérea de Rusia en Siria. Los bombarderos estratégicos rusos Tu-22, Tu-95 y Tu-160 lanzan modernos misiles de crucero contra los objetivos terroristas. Así, el Ministerio de Defensa de Rusia ha hecho público un video del lanzamiento de un misil secreto estratégico X-101 desde un Tu-160.

Una nueva generación de municiones con un fantástico alcance de proyectil, de 5.500 kilómetros, supera en varias veces la capacidad de sus homólogos europeos y americanos. El X-101 vuela a una altura de 30 metros a 10 kilómetros, es invisible al radar y muy preciso con una desviación máxima del objetivo de no más de 5 metros. Además, el misil es capaz de destruir blancos móviles, informa el periódico ‘Rossiskaya Gazeta‘.

El Ministerio de Defensa ruso ya ha recibido su primer bombardero estratégico actualizado Tu-95. Posteriormente, el Ejército tendrá dos más. Además, aparte de nuevas armas, a disposición del Ejército ruso estarán una aviónica moderna y un sistema de puntería y navegación basado en el sistema de navegación por satélite Glonass.