Las bacterias tuvieron un papel clave en la formación de los Picos de Europa. Durante miles de años las bacterias estuvieron precipitando carbonatos en el fondo del mar. Luego, bruscos movimientos de las placas tectónicas empujaron todos estos carbonatos formando los picos de Europa. Éste es uno de los descubrimientos de Peter Westbroeck, el geólogo que Eduard Punset entrevista esta semana en REDES.
Para Westbroeck la geología y la vida están estrechamente relacionadas, no tiene sentido estudiarlas por separado. Se hablará del ciclo de las rocas, tectónica de placas, terremotos y tsunamis. En definitiva, de la actividad interior del planeta, sin la cual posiblemente no habría vida.
En el plató, el geólogo y profesor de planetología de la Universidad Complutense de Madrid Francisco Anguita y Nieves López, catedrática de Paleontología de la misma universidad, profundizarán en cómo la vida ha estado configurando la estructura y condiciones de nuestro planeta.
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