Hoy les quiero compartir una experiencia que viví ayer en las sesiones de fotos de Pink Power Panamá donde conocí y retraté a la pequeña María Victoria la cual me conmovió de sobremanera. Les platicaré porque:

En los cuatro años que llevo de gira en la campaña PINK POWER! he retratado y conocido a más de 10,000 mujeres. El mensaje primordial de la campaña es el de crear conciencia sobre la detección oportuna de cáncer de mama, no es una campaña para apoyar mujeres con cáncer sino de información a las mujeres sanas. La mayoría de las que han participado lo han entendido así desde el principio y han aportado su granito de arena al participar. Sin embargo en este camino me he encontrado con pocas mujeres que no han entendido la esencia del mensaje y solo asisten por querer tener una foto sin importarles la causa, ellas creen que con el donativo compran una foto y van con la expectativa que se les hará un estudio fotográfico. La mayoría de las mujeres que estarán leyendo esto han participado y sus razones tendrán al hacerlo pero ninguna me ha reclamado o exigido su foto de tal forma como lo hizo una mujer el día de ayer. Me dio mucha lastima leer su mensaje con un tono de enojo donde me reclama que su foto la cual había pagado no le ha llegado y que a ella le informaron que el día 24 de junio la recibiría, “quiero mi foto!!!” exigió. Le pedí una disculpa por el retraso y le envié sus fotos en ese instante antes de lanzar el video y álbum de esa ciudad. Le explique también que el propósito de la campaña es que cada mujer nos preste su imagen para utilizarla en la campaña ayudándonos a difundir el mensaje y no al revés donde les damos una imagen a ustedes para complacerlas con las mismas. Tendrá razón la señora en verse afectada por el retraso pues si bien es cierto se le indico una fecha y nos hemos retrasado por la saturacion de edición de fotos que tenemos. Esto me desanimó en ese momento por el esfuerzo que hay detrás de esta campaña y me hizo reflexionar durante la sesión de ayer si en verdad nos estábamos equivocando y enviando el mensaje incorrecto al usar las imágenes de todas ustedes y si era ya hora de parar la gira.

Justo durante mi reflexión le llegó el turno a María Victoria. Ella es una bella trilliza de 8 años y es ciega de nacimiento. Me hinque para que me pudiera escuchar y ella tocó mi rostro y mi pelo, me dijo: “Estas barbón y tienes el pelo corto”. Al sentir sus manos recorriendo mi cara tratando ella de imaginarme, me vino en fracción de segundos un pensamiento que me conmovió de tal manera que no pude evitar soltar una lágrima y una sonrisa. Me di cuenta que esta niña venía con el propósito firme de apoyar la causa. Ella nunca vería su foto. Ella solo posaría para mí sin esperar nada a cambio. Nos regalaría su imagen para que fuera utilizada sin condiciones sumándose a esta lucha contra el cáncer de mama. Su madre le había explicado a ella y a su hermana el propósito de la foto y ella con gran entusiasmo accedió participar. Ella sabía lo que hacía ahí y por eso me pidió que en su puño se leyera la palabra “HOPE”. María victoria nunca podrá ver a través de sus ojos pero si a través de su corazón. Día a día ella enfrenta y supera obstáculos. Una vez más tuve la fortuna de recibir un regalo de alguien, una lección de vida, un abrir de ojos.

Quise compartir esto con todas y todos ustedes y sobre todo con la mujer que exige su foto para que caigamos en conciencia sobre lo que significa su participación en la campaña, seamos más tolerantes y entendamos el significado de solidaridad. Gracias María Victoria por inspirarme y darme fuerzas y esperanza, como lo dice tu mano, y no dejarme vencer por nada.

Saludos desde Panamá, Martin Gavica