Un día una mujer joven se acercó a su padre y tristemente le dijo:
— Papá ¡estoy tan cansada de todo! tengo muchos problemas en el trabajo, en mi vida personal y ya no tengo fuerzas…¿qué puedo hacer?
Su padre le respondió:
— Permíteme mostrarte:
Puso en el fogón tres ollas con agua y trajo una zanahoria, un huevo y café. Luego puso un ingrediente en cada uno de los tres recipientes. Al cabo de algunos minutos apagó el fogón y le preguntó a su hija:
— ¿Qué ha pasado con lo que puse en el agua?
— Pues papá, la zanahoria se coció, el huevo también. El café se disolvió, — respondió la chica.
— Así es, — respondió el padre, — pero si lo vemos más profundamente nos damos cuenta que la zanahoria, que era tan fuerte se hizo blanda y flexible. El huevo que parecía tan frágil y delicado se volvió duro. Su aspecto es el mismo, pero interiormente cambiaron, cada uno a su manera bajo una misma situación: el agua hirviente. Lo mismo ocurre con las personas: los que parecen fuertes pueden resultar siendo los más débiles y aquellos que parecen más indefensos y delicados se vuelven duros y rígidos…
— Vale pero ¿y el café? — preguntó curiosa la hija.
— Ah, pues el café es lo más interesante. Se disolvió completamente en el ambiente hostil y lo cambió, hizo del agua hirviente una bebida deliciosa y aromática. Hay personas que al entender que no pueden salir de determinada situación, deciden cambiarla y convertirla en algo positivo, poniéndose a disposición su conocimiento y a sí mismas para hacer de eso algo mejor. Es la elección de cada uno en qué convertirse luego de pasar por una situación difícil.
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«Yo soy yo y mi circunstancia»
Esto es así, el problema reside es cuanto el «yo» es el 1% y la circunstancia el 99%, esta equivalencia en países como España se repite constantemente.
Ya se esfuerzan algunos para que esto siga así
Ah Francisco, como menciona al final: «Es la elección de cada uno en qué convertirse. . .» Un abrazo.
Pero es que creo que hasta ignoran que tienen ese poder de elección, son autómatas de un sistema que trabaja para que sea así.
El separarse de lo convencional, de lo «de siempre» esta mal visto, pensar «el por que de las cosas» y «el por que no de otras» no esta en la agenda de la mayoría de las personas.
Los cambios, el avance de la sociedad esta solo sustentado en valientes transgresores, que pagan en su presente muy caro su osadía.
Nuestro futuro evolutivo?.
No sabemos cómo responderá nuestra especie y nuestro genoma al nuevo modo de vida moderno, lo que está claro es que estamos en un estado de continua evolución.
El ser humano ha cambiado la presión de selección de una manera que no se había hecho antes.
Nos hemos vuelto dependientes de la tecnología hasta el punto de que ya no importa ser diabético o miope a la hora de reproducirse.
Pero eso no significa que los procesos evolutivos no se sigan dando. El ser humano no ha dejado ni dejará de evolucionar.
Los cambios, los procesos evolutivos naturales son muy lentos en relación a la esperanza de vida de los mortales.
¿que sucede con los impacientes, están fuera de tiempo?
¿deben de conformarse con ir al ritmo de la manada, o cuando los cambios los autorice a conveniencia el gobernante?
La manera natural de evolucionar también esta sustentada por los cambios en la visión de las cosas y ello solo es posible por los que se «atreven» a disentir, enseñando otra manera, otro camino de conciencia a costa de un gran desgaste personal o incluso de la propia vida.
La verdad es que sí Francisco. En realidad todos venimos del mismo Big Bang que dio origen al universo. Aunque algunos solo ven la leña para el fuego, cuando cruzan el bosque.
Estan Francisco, lo que ocurre es que trabajan de tal manera, que pocos los conocen. Y a este mundo le es más facil comprar la mentira y el cuanto hay para mi. Esa fuerza de abajo, no deja de existir aunque no sean registrada, sea en España y en cualquier país. No se venden.
Aunque nos resulte sorprendente y difícil de aceptar, la mayor parte de la gente está satisfecha con la vida que lleva. Ansían mejorar sí, pero mayormente es una mejora material y de condiciones prácticas de vida. No buscan grandes cambios o revelaciones.
La gente quiere vivir bien, sin complicaciones y sin esfuerzo. No nos engañemos, la mayor parte de ovejas de un rebaño desean seguir siendolo, pocas anhelan ser perros de guía y menos aún son las que desean ser pastores.
…………Pero éso no implica que renuncien a la queja, claro.
A ver si las ovejas reaccionan porque se les acaba el tiempo,el pastor esta lejos ,los perros cansados de ladrar y viene el lobo.
Muy bueno José, muy gráfico y acertado Rocio
El habito emocional aprendido es hacerse uno con la circunstancia, identificarse emocionalmente con ella, fuese buena o fuese mala.
Siempre estamos mirando hacia afuera en lugar de mirar hacia adentro más concientemente.
Y ese habito lleva de la mano a otro habito que es el de «quejarnos» «justificandonos» de la experiencia de la circunstancia jj.
El que a su vez en un circulo visioso nos lleva a víctimizarnos , lo cual a su vez nos lleva a no realizar «cambios en nosotros mismos por comodidad» …….. y así una multitud de «Quejosos» desfilan diariamente por el cotidiano trajinar de la vida jé jé jé .
Un corto relato de realidad actual.