Historia en Breve
La alimentación emocional es cuando se encuentra a sí mismo comiendo por razones que no son para satisfacer hambre física real
La alimentación emocional da un escape de la incomodidad, dando una sensación momentánea de placer y satisfacción cuando esté sintiendo algo que no quiere sentir
Hay cinco herramientas poderosas sobre cómo ponerle fin a la alimentación emocional de una vez por todas. Seguir estos pasos toma práctica y un poco de valor, pero si los sigue no sólo parará su alimentación emocional, sino que también aprenderá a comenzar a disfrutar de sus alimentos – y su vida – de una nueva manera.
Por Allison Dryja
He estado ahí. Comienza con un puñado de zanahorias, se mueve a unos pedazos de queso y cuando se da cuenta, está hasta los codos en un vaso con helado.
Se va a la cama exhausto y enfermo, sintiéndose fuera de control y como si se estuviera saboteándose a sí mismo.
¿Se identifica?
Se llama alimentación emocional, y sucede más seguido de lo que piensa. No siempre tiene que limpiar su refrigerador en una noche para caer víctima de la alimentación emocional.
Este fenómeno puede golpear en cualquier momento, cuando se encuentra a sí mismo comiendo por razones que no son para satisfacer hambre física real.
Cuando trabajé en mercadeo, no tardé mucho en descubrir que las compañías alimenticias luchan constantemente para hacer una conexión entre la comida y emociones. Para crear promesas de mercadeo de alimentos atractivas como un beneficio emocional más allá de la comida en sí misma – como comodidad, excitación, pertenencia, etc.
Mi trabajo como mercadóloga fue hacer estas conexiones aún más atractivas y convincentes, al alimentar nuestra creencia colectiva que comer ciertos alimentos nos da satisfacción emocional.
Cuando finalmente me di cuenta de las implicaciones completas de lo que estaba haciendo, renuncié.
Comencé curando mi propia relación con la comida, y ahora ayudo a otras mujeres a hacer lo mismo al cortar sus patrones de alimentación emocional y reconectando con nuestros cuerpos.
He creado cinco herramientas poderosas sobre cómo ponerle fin a la alimentación emocional de una vez por todas. Seguir estos pasos requiere práctica y un poco de valor, pero si los sigue no sólo parará su alimentación emocional, sino que también aprenderá a comenzar a disfrutar de sus alimentos – y su vida – de una nueva manera.
1.No Se Abandone
La alimentación emocional da un escape de la incomodidad, dando una sensación momentánea de placer y satisfacción cuando esté sintiendo algo que no quiere sentir.
Comer de más tiene un efecto entumecedor y suavizante de sentimientos indeseados, y aleja nuestra atención de ellos. La clave para terminar este patrón es no abandonarse cuando sus emociones se enloquecen, pero en lugar de eso invitarlas dentro y permítase sentirlas.
Dígase a sí mismo que está bien sentirse triste, enojado, cansado – usted elige. Dé la bienvenida a emociones negativas con amabilidad y curiosidad, y pregúnteles qué quieren de usted. Esto incluye sentimientos intensos de culpa o enojo que tienden a seguir un episodio de alimentación emocional.
Acérquese a sus sentimientos con amabilidad, y su cuerpo comenzará a entender que no tiene que comer de más para protegerse de sus sentimientos. Además, a través de la escucha de sus emociones, descubrirá qué es lo que realmente quiere, y puede crear nuevas estrategias para una mayor satisfacción.
2.Mantenga el Principio del Placer
¡Haga del placer una prioridad en su vida! Dele sabor a su agua con fruta, use ropa suave y cómoda, tome baños de burbujas. Dele a su cuerpo otras formas de experimentar el sentirse bien, además de comer. Si se encuentra a sí mismo en medio de un atracón, intente permitirse divertirse por completo.
Siéntese y saboree cada mordida. Mientras más centrado esté en qué tan bien se siente comer, más difícil será comer al punto de sentir dolor. Muchas veces la alimentación emocional es sólo el intento de nuestro cuerpo de experimentar placer.
3.Coma Sólo Cuando Realmente Tiene Hambre
Los comedores emocionales tienden a no comer cuando realmente tienen hambre, lo que hace que quieran comer después. Como el autor Geneen Roth dice, “Para cada dieta, hay un atracón igual y opuesto.”
Así que en su lugar, coma alimentos reales, sanos y nutritivos cuando experimente hambre física. Hacer esto le enseñará a su cuerpo que no está en, como lo llama el defensor de la pérdida de peso Jon Gabriel, “modo de inanición”.
El autor del Método Gabriel dice, “Se vuelve muy eficiente al almacenar grasa y pierde la habilidad de quemarla.” Esto significa que comer cuando tenga hambre no sólo hace que tenga una menor disposición de atracarse, pero también le dirá a su cuerpo que es sano perder peso.
4.Prepárese para Su Siguiente Atracón al Conocer Sus Catalizadores
Descubra sus catalizadores y haga una estrategia. Si sabe que come cuando se siente sola, planee llamar a un amigo o escriba en su diario mejor. También, siempre cargue comida con usted para que nunca se sienta privado.
La alimentación emocional puede ser la reacción de su cuerpo a sentirse privado, así que cree nuevas maneras de nutrirse a sí mismo. Abastezca su refrigerador con alimentos deliciosos, sanos, llene su calendario con cosas emocionantes por hacer y sea disciplinada sobre dejar tiempo para sí mismo para relajarse.
5.Despierte a Su Belleza Propia
Si supiera lo hermoso/a que es, no se negaría comida para intentar cambiarse. Tampoco comería emocionalmente como liberación, porque no habría tensión de la cual liberarse. Cualquier cambio en la dieta sería por amor propio y cuidado para su hermoso cuerpo.
Somos una cultura donde se espera que las personas quepan en un molde imposible por el bienestar de la ganancia capital. La Dra. Gail Dines dice, “Si mañana, las personas despertaran y decidieran que les gustan mucho sus cuerpos, sólo piense en cuántas industrias quebrarían.”
Es hora de despertar a nuestra belleza y alimentar nuestros cuerpos con el amor y ternura que realmente merece.
*Para artículos relacionados y más información, por favor visite la página de Via Organica
http://articulos.mercola.com/
mauandayoyi.blogspot.com.ar
En realidad son dos los mal hábitos que se presentan en la conducta de alimentarse :
uno es alimentarse por acción ansiosa y el otro del que poco se habla es alimentarse justamente por hábitos horarios .
En uno se como no por hambre sino por calmar una ansiedad y en el otro se come «comunmente» sin tener hambre y «casi por obligación»jjjj .
Es muy raro ver un ser humano que come «por que tiene hambre»jjjjjjjjjj.
Este es un muy buen ejemplo de lo facil que es poder encasillar mentalidades de las masas … sin que se percaten de ello, para que realicen algo sin sentido primario .