Un colegio policial británico entrena a agentes saudíes a aplicar técnicas que facilitan la persecución y la tortura de los activistas pro democracia.
De acuerdo con un informe de la organización pro derechos humanos Reprieve, publicado el martes por el diario británico Telegraph, una academia de estudios policiales británica pactó en 2009 con el Gobierno de Riad un acuerdo para enseñar a policías saudíes a tomar huellas dactilares, técnicas forenses e investigación de escenas de crimen.
Sin embargo, los documentos muestran que el propio colegio británico ha reconocido un alto riesgo de que “estas capacidades hayan sido utilizadas para identificar a personas que más tarde llegaron a ser torturadas o sometidas a otras violaciones de derechos humanos”.
“Es escandaloso que la policía británica esté entrenando a agentes saudíes en el uso de las técnicas que, según admiten en privado, posibilitan arrestos, torturas y sentencias a muerte de la gente”, denuncia Maya Foa, una de las responsables de Reprieve.
El programa también tiene prevista formación en seguridad cibernética, análisis de celulares y sistemas televisivos de circuito cerrado.
“Los servicios ofrecidos incluyen enseñar habilidades de alta tecnología que fácilmente podrían ser aplicadas para atacar a activistas pro democracia en Arabia Saudí”, sostiene Reprieve, que exige el cese inmediato del programa.
La situación de los derechos humanos en Arabia Saudí es criticada a menudo por las organizaciones pro derechos humanos. James Lynch, director adjunto de Amnistía Internacional (AI) en Oriente Medio y África del Norte, informó hace dos semanas de la ejecución por la monarquía saudí en lo que va del año de al menos 94 personas, una cifra “superior a la del año pasado en el mismo período”.