por Sott.net
En los últimos meses estamos dando a conocer las secuelas que sufren incontables personas que han pasado por los quirófanos de las clínicas que operan de la vista con láser. Alguna de ellas se anuncian en las televisiones de manera encubierta, lo que está siendo sancionado. Son también clínicas que amenazan a sus víctimas por contar lo que les han hecho en los ojos.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha abierto un expediente sancionador a la sociedad Atresmedia (grupo al que pertenecen las televisiones Antena 3 y La Sexta) por la posible emisión de publicidad encubierta de la Clínica Baviera en el programa de Objetivo Bienestar. Dicho espacio trataba sobre la cirugía para la corrección de presbicia o vista cansada.
La sanción podría llegar hasta el medio millón de euros. Durante la emisión de ese «espacio de salud», que se supone divulgativo y sin fines comerciales, se entrevistaba a supuestos viandantes acerca de la cirugía para la corrección de presbicia, los cuales de manera indirecta animaban a la cirugía, mientras de fondo se podía ver uno de los centros oftalmológicos de la clínica en cuestión.
Incluso en un momento de la emisión se graba a un supuesto cliente dentro de la propia clínica.
El único oftalmólogo que intervino, Rafael Bilbao Calabuig, trabajador de la Clínica Baviera, ofreció una imagen completamente trivial de este tipo de cirugías, obviando cualquier riesgo y hablando tan solo de las supuestas «ventajas». Aunque el vídeo podía verse en internet, ahora sospechosamente su contenido es de pago.
Que la citada clínica haga un uso abusivo de la publicidad en las televisiones ha indignado a las víctimas de la cirugía refractiva, la que se hace con láser (algunas de las cuales, como el presidente de la Asociación de Afectados por Intervenciones de Cirugía Refractiva (Asacir), Alejandro López, deben sus secuelas a su paso por dicho centro sanitario (en el vídeo que podéis ver a continuación narra su caso):
En este caso, la denuncia hacía referencia a la participación en el programa, en febrero de 2015, del Dr. Valentín Jiménez Mateo-Sidron, trabajador también de la Clínica Baviera, en donde y según la propia CNMC:
el tratamiento dado a la información adquiere un tono comercialcon menciones que apelan a las virtudes y ventajas de dicha clínica, incluso con primeros planos de su página web».
Se prevé que en breves Competencia emita definitivamente la sanción a TVE. A mí me parece que si es grave intentar manipular a la opinión pública con publicidad encubierta, más lo es que sea para promocionar productos sanitarios (operaciones de la vista con láser) de baja evidencia científica sobre su eficacia y seguridad.
La existencia de incontables personas que sufren secuelas permanentes tras pasar por el quirófano de esos establecimientos así lo atestigua. Y peor aún es que las televisiones, por motivos comerciales, sólo den voz a las clínicas y sus negocios y no ofrezcan los testimonios de las víctimas. ¿No es además TVE un servicio público?
Así lo explican desde Asacir en un comunicado:
Consideramos muy grave que una televisión pública tenga que ser sancionada, si es que al final sucede esto, por publicidad encubierta a una clínica privada de salud, Clínica Baviera, habiendo incurrido, además, en la banalización de un tipo de procedimientos quirúrgicos no justificados médicamente, como es la cirugía refractiva (operaciones de miopía, hipermetropía, astigmatismo o presbicia), que presenta una importante incidencia de secuelas y efectos secundarios a corto y largo plazo, de relevancia más que suficiente como para pasarlo por alto.
No olvidemos que la cirugía refractiva es asunto de controversia entre los propios profesionales del sector visual, y considerada como el área más ‘mercantilizada’ dentro de la oftalmología.
Esperamos que RTVE vuelva a tratar el tema en cuestión, pero de esta vez de una manera objetiva e imparcial, lejos del enfoque comercial que se dio en repetidas ocasiones y que se resume en anteponer los beneficios económicos de las clínicas privadas dedicadas al negocio, frente a la salud de todas las personas, lo cual es inadmisible en cualquier práctica periodística, pero más aún en una televisión pagada por todos y todas.
Aunque hasta ahora ha rehusado en darnos voz, confiamos en que RTVErectifique, así como en su disponibilidad para subsanar dicha conducta».
Quizá no sea casual que algunas clínicas que se anuncian en las televisiones de manera encubierta sean también las que amenazan a sus víctimas con emprender acciones legales contra ellas por difundir lo que les han hecho en los ojos. Todo muy sucio como veis. Queda cada vez más claro que tras la oferta de la cirugía refractiva hay un buenpelotazo económico a la vista, nunca mejor escrito.