500 gramos de cristales de fósforo y magnesio fertilizarían una tonelada de tierra útil
Un nombre: la doctora en ingeniería química y ambiental Dafne Crutchik. Un problema: la caída de las reservas de fósforo y la escalada de precios del mercado mundial de fertilizantes. Una solución: el pis.
Estos días Crutchik ha sido noticia porque ha desarrollado un nuevo método de procesar la orina humana y extraer fácilmente todo el fósforo que hay dentro. Y, aunque parece una cosa tan rara como divertida, tiene todo el sentido del mundo.
De hecho, la idea no es original. En sitios tan dispares como Estados Unidos, Francia o la Estación Espacial Internacional, el uso de orina está a la orden del día. Desde hace años el Rich Earth Institute de Vermont (EEUU) tiene un programa dedicado a examinar la seguridad y eficiencia de usar la orina con este fin.