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Algunas de las culturas más antiguas del planeta, herederas del conocimiento sagrado que propone la reunión y empoderamiento del ser humano, tienen como foco de atención la sexualidad sagrada. El ser humano es una divinidad en potencia capaz de crear realidad, por lo que necesita responsabilizarse de aquello que genera, que gesta y crea. La sexualidad sagrada nos habla de comunión y reunión entre los dos aspectos que conforman nuestra realidad, el femenino y el masculino. Nos habla de la danza entre el yin y el yang y del uso de la energía sexual para crear aquello que luego el corazón expandirá.
El tantra y el tao nos hablan también de la importancia del cuerpo y las posibilidades de establecer un uso sexual del mismo que nos permita elevar la energía generada para expandirnos en lugar de vaciarnos. Una forma de arte que permita preservar la energía sexual para dirigirla a los proyectos del alma y el corazón. Activar la kundalini es encender el canal central y hacer circular la energía sexual activando un movimiento toroidal que convierte al ser humano en generador de una genuina y sagrada energía libre que permite su autogestión y su autoregulación, esto es, abrazar el poder de afectar la realidad.
Emilio Fiel “Miyo”, fundador de la comunidad del arcoíris, chamán, escritor y maestro de tantra, nos habla desde la finca de Liuramae en Borja, España, de los principios fundamentales de esta profunda filosofía. Además, nos da algunas claves relacionadas con la sexualidad sagrada, la importancia de la respiración consciente y los roles del hombre y la mujer en la comunicación sexual sagrada.
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