John Matthews, arcano «Apple-Quert», The Green Man Tree Oracle, 2008.
Una de las claves para encontrar a Diana Quer podría estar en la obra La Diosa Blanca (Madrid, Alianza, 2014) de Robert Graves. En ella el erudito inglés hace un ejercicio de virtuosismo siguiendo el rastro de diversas tradiciones que giran alrededor de la Gran Diosa, vinculando la cultura clásica grecoromana con la del norte de Europa. Creemos que el ritual de Diana Quer está siendo orquestado desde este ámbito cultural por lo que conviene conocer este último trasfondo mítico-ritual.
Como dice el título, el culto de las divinidades femeninas ocupa un lugar central en esta obra, y entre ellas una de las más destacada es Diana. Pero lo más sorprendente es que esta divinidad está estrechamente vinculada con la letra «Quert» del alfabeto celta o druida Ogham, también llamado Alfabeto de los Árboles. Este es otro indicio más de que lo que estamos viendo en el caso Diana Quer es un ritual en toda regla, como decimos posiblemente orquestado desde logias mistéricas noreuropeas. Pero vayamos por partes.
LOS DÁNAOS
El nombre de Diana se asocia desde antiguo a una confederación de tribus matriarcales, llamados tuatha dé Danaan, ‘la gente del dios cuya madre es Danu’, o simplemente confederación dananea o dánaos. Invadieron Irlanda desde Britania a mediados de la Edad del Bronce. Eran adoradores de la diosa Danu, que encontramos también masculinizada en forma de Dôn o Donnus, y que se vincula a Diana (LDB, p. 87). Según una tradición irlandesa que aparece en el Libro de las invasiones, esta confederación dananea llegó a Irlanda desde Grecia, pasando entre medias por la actual Dinamarca o ‘Reino de los dánaos’, que habría tomado su nombre de ellos.
Ya entonces esta Danu, esta Diana arcaica, esta diosa de los dánaos matriarcales, aparece asociada con las cacerías de ciervos y las jaurías de perros, y todo ello con el Inframundo:
«En el Romance de Pwyll, El Príncipe de Dyfed, Arawn aparece como un cazador en un gran caballo pálido, persiguiendo a un venado con la ayuda de una jauría de perros blancos con orejas rojas —los sabuesos del Infierno muy conocidos en el folclore irlandés, galés, de las Highlands escocesas y británico» (LDB, p. 87).
En el monumento de New Grange (3.300-2.900 a. C.) se encontraron astas de ciervo y torques de oro, que estarían vinculados a estos cultos a los dioses Danu-Dôn-Donnus:
«Las astas de ciervo descubiertas en New Grange probablemente formaban parte del tocado del rey sagrado, como las astas que llevaba el dios galo Cernunnos, y los cuernos de Moisés, y los de Dioniso y del rey Alejandro que aparecen en las monedas» (LDB 153; cf. p. 151).
«Las astas encontradas en el enterramiento de New Grange sugieren que el venado era el animal real de los dánaos irlandeses…» (LDB, p. 295, cf. p. 341).
Este es un detalle importante para atar cabos y comprender hasta qué punto muchos de estos cultos ctónicos paganos conforman un sustrato muy similar en muchas culturas, cómo estos pueden asociarse también a diversos rituales que han seguido practicándose hasta la actualidad en diversos ámbitos, desde la brujería a las misas negras, desde las religiones de misterios a los cultos satánicos. Ya hemos visto que hay una vinculación muy poderosa entre el CERN y el CERN-nunnos, y creemos que el ritual de DiaNA CERN se inscribe en este complejo, en la medida en que el tema central es la agenda transhumanista y la manipulación encubierta de nuestro ADN.
http://deliriousheterotopias.blogspot.de/2016/08/cern-culto-psicotronico-al-cern-unnos-12_22.html
Este culto al ciervo y a su cornamenta lo encontramos en la Canción de Amergin, un druida-poeta legendario, que dice en uno de sus versos:
«Soy un venado: de siete puntas» (LDB, p. 41; cf. p. 282).
Graves comenta sobre este verso:
««De siete puntas» probablemente quiere decir siete puntas en cada asta, catorce en total, lo que le convierte en «venado real». Pero también se le concede realeza a un venado de doce puntas, y puesto que para llegar a tener doce puntas un venado debe tener siete años de edad, «siete peleas» puede referirse a su edad» (LDB, p. 284).
Creemos que este detalle es importante en el contexto del ritual Quer, que creemos que consiste en una mecánica hierogámico-sacrificial que se deriva de la tradición de reinas y reyes vinculados a los cérvidos. Todo ello en el marco de calendarios lunares regidos por ciclos de 7, 14, 21 y 28 días. Creemos que esta alusión a las 7 puntas de las astas del venado real y a las 14 que conforman ambas aluden a la Luna Nueva y a la Luna Llena, que como hemos visto están asocidas a Diana.
Pero también tenemos la sospecha de que, en este contexto, el 2 x 7 alude, además de al ritual hierogámico-sacrificial en general, a uno en el que juegan un papel central gemelos sagrados sietemesinos. Creemos que hay que interpretar el ritual Diana Quer, en lo que este tiene de más oculto, en este sentido. Pero como veremos esto es también clave para comprender la operación psicológica de ingeniería social. Gemelos mixtos –Diana y Diano–, como la expresión más cercana del andrógino mítico, como centro oculto de la agenda de desfertilización. Por eso vemos de vez en cuando una extraña Diana, que en realidad creemos que es Diano. O Carlos, o Apolo, hemano mellizo de Diana.
DIANA, EL CIERVO Y EL MANZANO
Diana de Versalles, versión romana del siglo I-II d. C. a partir de la tradición griega, Museo del Louvre.
Hemos visto que uno de los cultos centrales de Diana en el mundo romano —y probablemente también hoy en los rituales satánicos vaticanos— es la Diana Nemorensis, la del lago Nemi. En la Galia romana esta se conocía como Diana Nemetona y se representaba con un ramo de manzano. Pues bien, como vamos a ver, el manzano es precisamente el árbol que se asocia a la letra «Quert» del alfabeto Ogham (LDB, p. 343). Sabemos que uno de los animales más cercanos a Ártemis, como diosa cazadora por excelencia, es el ciervo. Pues bien vamos a ver que el ciervo o la cierva se asocian a su vez al manzano, y todo ello a la letra «Quert».
James Doyle Penrose, Idun y las manzanas, 1890.
Encontramos una diosa afín a la Danu de los dánaos en Iðunn (‘siempre joven’, ‘rejuvenecedora’), también escrita como Idun, Iduna, Idunn o Idunna. Es una de las diosas de la mitología nórdica, también asociada a las manzanas, la fertilidad y la inmortalidad.
Bauer, Loki y Idun, 1911.
Y también es un tema central en el mito de Iðunn el rapto. Como en el ritual de Diana Quer. En su obra Haustlöng, el escaldo (poeta guerrero vikingo) del siglo X Þjóðólfur úr Hvini (Thiodholfur) narra el rapto de Iðunn por Þjazi, un Jotun o gigante, que se sirvió de Loki para que se alejara de una aldea hacia un «cierto bosque». Pero Þjazi en forma de águila se la arrebata a Loki y la lleva a su casa.
Elmer Boyd Smith, Idun abducida por el gigante Thiassi (Þjazi), ca. 1902.
De ahí que Idun sea llamada también el «botín de Þjazi». Los Æsir (dioses principales del panteón nórdico) se reunen para preguntarse entre ellos cuándo fue vista Iðunn por última vez.
Todo esto resuena curiosamente con el caso Quer, hasta el punto en que parece lógico pensar que este ritual y operación de ingeniería social se haya planeado a partir de esta tradición. Después de todo, ¿qué puede funcionar mejor que lo que ya lleva milenios funcionando? La ciencia y tecnología solo son la última capa de la cebolla, pero la cebolla es la misma desde siempre. Esto es lo que muy poca gente entiende.
Como la última vez que fue vista es cuando salía de la ciudad con Loki, este es culpado de la desaparición. Los dioses amenazan con torturarlo y asesinarlo, pero este propone transformarse en halcón e ir a buscar a Iðunn a casa del gigante Þjazi. Allí la encuentra sola y la trae de regreso, convertida en una nuez.
Lo interesante es que la misma mecánica la encontramos en el caso de Diana Quer, pero ahora son los dispositivos de vigilancia los que son testigos del crimen y los que pueden hacer regresar a la raptada. Diana… DNA. Lo que los dioses hollycapitalistas buscan no es a la doncella sino su capacidad fertilizadora. Lo que los que orquestan la operación Quer pretenden no es encontrar a Diana, si es que ha sido realmente raptada, sino implementar la agenda transhumanista a través de la toma de control de la fertilidad humana, y a su vez mediante la ingeniería genética. La desaparición es un pretexto, una ficción, que en todo caso se habría podido ejecutar en la realidad, pero un pretexto necesario porque sirve de cortina de humo para implementar medidas políticas, legales, tecnológicas, etc. Es una bandera falsa.
En otro contexto de la mitología nórdica, en el poema Lokasenna, que forma parte de los Eddas, se habla del asesinato del hermano de la diosa Gerðr, asimilable a Iðunn, en cuyo mito encontramos el mismo tema. También en el poema Skírnismál, se alude al asesino de su hermano. Y algo muy parecido encontramos en el caso Quer. Otra vez los mellizos incestuosos, la hierogamia-sacrificial, el coito dentro del vientre de la madre, como centro alrededor del que gira toda la cultura humana. El incesto de los incestos. Pero este es también el centro alrededor del que gira la homosexualización y la transgenerización, caballos de Troya del transhumanismo.
Otro detalle de este poema que nos interesa es que Iðunn recibe 11 «manzanas de oro» de un pretendiente que la corteja. En este contexto mitológico encontramos también el tema de las hierogamias mediante manzanas y de los nacimientos por cesárea. Más afinidades. El ADN es la fruta prohibida.
https://en.wikipedia.org/wiki/I%C3%B0unn
Lo que estamos tratando de decir es que hay una conexión muy estrecha entre Diana, la manzana como fruta prohibida, el rapto, el ciervo, las jaurías de perros, la letra «Quert», etc… Todo esto supone que para un iniciado conocedor de los cultos de misterios, y en particular de su trasfondo celta y druida, el nombre Diana unido al apellido Quer debe resultar muy familiar. Esto debe de indicarle que el caso Diana Quer no es un evento azaroso o insignificante, sino que de hecho se trata de un ritual, y que debe comportarse como corresponde: obedeciendo a la hermandad al margen de cualquier moralidad o legalidad. Así es como se ejerce el poderreligión hoy, así es como los Illuminati controlan los distintos aparatos de poder: la política, la justicia, los ejércitos, las fuerzas de seguridad, la inteligencia, la prensa, etc. Para un iniciado de un cierto nivel Diana Quer significa la diosa Diana del ciervo y del manzano Quert, agenda de desfertilización, control de ADN, transhumanismo, etc. Y creemos que Quer, repetimos, para un iniciado, alude también a CERN y a CERN-unnos.
Otro indicio de que el apellido Quer no es causal y alude a la letra «Quert» del alfabeto Ogham, es que coincide precisamente con el período del año en que supuestamente ha desaparecido Diana. En efecto, tal como muestra Robert Graves, la letra «Quert» se corresponde con el período anterior al equinoccio de otoño, el 22 de septiembre (LDB, pp. 482-483).
QUERT? … QUARE? QUIS? QUĂ? QUID? QUALIS? QUI? QUO? QUOMODO? QUANDO? QUORSUM? QUOTIES? QUANTUM? QUOT?
Si algo está cautivando a los españoles del caso Quer es que todo en él son interrogantes. ¿Dónde está Diana? ¿Cuándo fue vista por última vez? ¿Cómo iba vestida? ¿A qué hora llegó a casa? ¿Por qué no la escucharon sus padres?
Hemos dicho que para los iniciados Diana Quer debe de significar Diana Cierva, Diana Manzano, Diana virgen hierogámica y sacrificial. Pero también debe significar Diana ¿Dónde?, Diana ¿Cuándo?, Diana ¿Cómo?, Diana ¿Quién?, etc.
En efecto, esto es lo que evoca precisamente la letra «Quert», las interrogaciones, los enigmas, las búsquedas:
«Ya se ha establecido que el Corzo, originalmente una cierva blanca, se oculta en el soto, y que el soto se compone de veintidós árboles sagrados. El poeta se hace naturalmente otra pregunta: «Pero, ¿dónde exactamente se halla el animal alojado en el soto?».
«¿Dónde?» es la pregunta que siempre abrumará más a los poetas cargados con el tema poético único de la vida y la muerte. […] En inglés where se deriva, según el Oxford English Dictionary, «de la raíz interrogativa qua». Casi todos los interrogativos de los idiomas indoeuropeos comienzan con Q (excepto donde la Q ha sido, como en el griego, transformada en P, o, como en el alemán, en W), y en el antiguo escocés «where» se escribía «Quhair». Q es, en efecto, la letra de la pregunta perpetua. El latín tiene una excelente serie de Q:
Quare? Quis? Quă? Quid? Qualis? Qui? Quo? Quomodo? Quando? Quorsum? Quoties? Quantum? Quot?
Y la peligrosa pregunta de la Serpiente: ¿Quidni? «¿Por qué no?» «¿Dónde?» es ¿Quă?
Pero la promesa de la Musa al poeta es «busca pacientemente y encontrarás». Así que, ¿dónde podía ocultarse la Cierva sino bajo el árbol Q, que es el manzano silvestre?
Esto me lo ha confirmado el poeta Valentin Iremonger con una referencia en Hearings of the Scholars:
Queirt dano is o chrand regainmnighead .i. abull ut dicitur clithar boaiscille .i. elit gelt quert i. aball.
«La letra Q proviene de un árbol llamado Quert, es decir, un manzano. Como dice el refrán: ‘QUERT ES EL REFUGIO DE LA CIERVA SALVAJE’, —lo que quiere decir que sí es el manzano»» (LDB 339-340; cf. Los mitos griegos, Madrid, Alianza, 1985, 126.1).
Así pues, ya tenemos la respuesta a nuestro enigma: la cierva está debajo del manzano. Quert protege a Diana.
EL MANZANO, ÁRBOL DEL BIEN Y DEL MAL
Pues bien, ya tenemos la respuesta al enigma. Diana está debajo del manzano. Problema resuelto. Ahora hace falta saber cuál es el significado del manzano.
Graves nos dice que el significado de la letra «Quert», esto es del manzano, es la consumación, el castigo a muerte, la inmortalidad. El 9. Nos aclara que el árbol del bien y del mal de la tradición bíblica se interpretó como un manzano cuando llegó al noroeste de Europa, a pesar de que el texto original habla de una higuera (LDB, p. 340). En el poema medieval galés Câd Goddeu de Gwion se dice que el manzano es el árbol más noble de todos, porque se asocia a la inmortalidad (LDB, p. 340). No estamos hablando del manzano de huerto, sino del manzano del soto sagrado, el de un «cierto bosque». El lugar donde se refugia la cierva, tal como dice una estrofa de Gwion:
«Hui como una cierva al soto enmarañado» (LDB, p. 341).
También el rey Arturo se refugia en Avalon, la secreta «isla de los manzanos» (LDB, p. 341).
Decíamos que hay una estrecha afinidad entre Diana, la cierva y el manzano. En el culto de Diana, encontramos el manzano y la sidra. En su forma de Némesis (del gr. nemos, ‘soto’) lleva una rama de manzano en la mano. Comodiano identifica a esta Némesis con la Diana Nemorensis, ‘la del soto’ (LDB, 342). También el culto de la Diana Nemorensis se asociaba al del ciervo. En Galia la encontramos como Diana Nemetona (nemeton, ‘soto sagrado’) y otra vez aparece con una rama de manzano y un cuenco para sidra (LDB, p. 343). Todo esto vuelve a decirnos que Diana y Quert se asocian de manera muy estrecha. Una vez más, todo apunta a que el caso Diana Quer es un ritual orquestado al máximo nivel que los iniciados deben reconocer simplemente escuchando ambas palabras juntas.
Y todo esto nos lleva a las religiones de misterios. El ciervo es de alguna manera el equivalente celta y nórdico de la cabra o el toro que encontramos en los cultos mediterráneos, y entre unos y otros se han producido curiosos sincretismos o elaboraciones quiméricas, como es el caso del unicornio:
«En los misterios dionisíacos el hircociervo, el macho-cabrío-ciervo, era el símbolo de la resurrección, de la esperanza del hombre en la inmortalidad, y parece que cuando los druidas hiperbóreos iban a Tesalia, reconocieron al macho-cabrío-ciervo, asociado con manzanas, como su propio inmortal ciervo o cierva blanca, también asociada con manzanas. Pues, como se ha dicho, el manzano es el refugio de la cierva blanca. […]
«En Britania y Francia el ciervo o cierva blanca no fue desalojado por el unicornio; perduró en la tradición popular y figuraba en los romances medievales como símbolo del misterio» (LDB, p. 541).
Ya hemos visto que el unicornio se identifica con el ciervo o la cierva, como vemos en el escudo de la Casa de Windsor.
http://deliriousheterotopias.blogspot.de/2016/09/999-el-tren-celta-es-la-osa-mayor-y-el.html
Anónimo, Díptico de Wilton (exterior), ca. 1395, National Gallery de Londres.
Esto se pone de manifiesto en el caso del Rey Ricardo II (r. 1377-1399), cuyo emblema era un ciervo blanco, tal como muestra uno de los paneles exteriores del Díptico de Wilton. Nótese cómo este ciervo aparece encadenado y con una corona en el cuello, de la misma manera que el unicornio del escudo de armas de la Casa de Windsor. En el panel contiguo vemos también el león, otra vez emparejado con la cierva.
Anónimo, Díptico de Wilton (interior), ca. 1395-9, National Gallery de Londres.
El rey, que aparece arrodillado en el panel izquierdo interior, lleva también ciervos en su manto y un broche con un ciervo con siete astas en cada cuerno, que parece hacer alusión a la Canción de Amergin. Los ángeles portan un broche muy parecido.
Si nos fijamos en el panel derecho interior, la Virgen está acompañada de 11 ángeles, y el rey Ricardo II de 3 reyes-santos. El rey, la Virgen y el Niño conforman a su vez una tríada o trinidad. Se trata exactamente de los números en los que insistió el padre de Diana Quer en su entrevista en Antena 3, precisamente al hablar del nacimiento de Diana. También hemos visto que el número 11 aparece en el mito de Idun, como 11 manzanas.
Aunque el rey se arrodija ante el Niño Jesús, lo cierto es que hay una operación simbólica en esta obra muy sofisticada por parte del rey Ricardo II, que se preocupaba mucho por este tipo de cuestiones (Helen Barr, Socioliterary Practice in Late Medieval England, Nueva York, Oxford University Press, 2001, p. 82). Y es que la obra conmemora el nacimiento del rey, precisamente el 6 de enero. Los tres reyes-santos que acompañan al rey remiten al tema de los Reyes Magos. En suma, lo que hay es una operación muy sofisticada de identificación del rey con Jesucristo. Y a su vez de la Virgen con Diana y su cortejo de ninfas. Lo que estamos viendo es una equiparación de la monarquía con el panteón divino. Paganismo en toda regla como el que practican los Illuminati.
Pero también la noción de fertilidad, natalidad y crianza como algo que trasciende lo puramente natural o familiar y se inscribe en el marco de un aparato de producción de seres sagrados. En otras palabras, estamos presenciando un MK Ultra ancestral, aunque, como sigue ocurriendo hasta el día de hoy, las élites lo oculten. Porque es uno de los mecanismos fundamentales de su poder.
11 esclavas/obligadas sexuales en Eyes Wide Shut de Stanley Kubrick.
En este sentido hay que interpretar también el 11 como un número asociado a los rituales hierogámico-sacrificiales. 11 manzanas. 11 ángeles. 11 esclavas y obligadas sexuales en el ritual de Eyes Wide Shut (Ojos bien cerrados) de Stanley Kubrick (1999).
11 es el número que el padre de Diana Quer repitió insistentemente, precisamente al hablar de la desaparición de Diana Quer, del nacimiento de las gemelas, de la muerte de una de ellas. Pronunció la cifra 11 6 veces. Si a esto le añadimos que comenzó a las 11 horas y 11 minutos, y que guardo un silencio de 11 segundos, tenemos 9 x 11, un complejo muy significativo en términos rituales y simbólicos. Creemos que todo esto no fue casual y que se estaba refiriendo, para aquellos que supiesen entenderlo, a un ritual hierogámico-sacrificial que gira alrededor del 11.
Además, hay que recordar que estaba hablando de la Diana de hoy, de 18 (9 x 2) años, y de su nacimiento, junto a su hermana, 18 años antes. 18 x 2 = 36, la edad a la que murió Diana de Gales.
En suma, creemos que hemos mostrado suficientes indicios de que Diana y Quert conforman un complejo único y de que no parece una casualidad que se haya seleccionado este nombre, de una manera u otra, para este ritual. Por otro lado todo la simbología parece apuntar a que estamos en el mismo universo ritual. Que el ritual de Diana Quer parce estar vinculado a la ritualística de las logias masónicas que forman parte o dependen de los Illuminati, en las que como sabemos juega un papal central la Familia Real británica.
Seguimos por lo tanto considerando como nuestra hipótesis central que Diana Quer y su hermana Carolina (o quizás Carlos) sean unos de esos muchos «bebés negros» que, como decía Christine Fitgerald, la Casa de Windsor tiene desperdigados por todo el mundo, para implementar su agenda de control total de nuestras culturas, de nuestras mentes y de nuestros cuerpos.
Y habrá que seguir hablando del andrógino, que es el centro alrededor del que gira todo.
Más información en «Ritual Diana Quer (índice de artículos)».
Pedro Bustamante es investigador independiente, arquitecto y artista. Su obra El imperio de la ficción: Capitalismo y sacrificios hollywoodenses ha sido publicada recientemente en Ediciones Libertarias. Colabora habitualmente en diversos medios alternativos como El Robot Pescador, El Espía Digital,Katehon y Página Transversal, así como en la serie de videoprogramas «Hollycapitalismo» en La Caja de Pandora.
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