El diario Courier Mail, de Brisbane, Australia publicó hoy que en la tienda Apple se habrían tomado fotos de clientas sin su consentimiento y que otras fotos habrían sido extraídas de teléfonos enviados a reparar. Luego los cuerpos de las mujeres eran calificados con notas de uno a diez.

«Apple cree que hay que tratar a todos de la misma forma y con respeto y no toleramos conductas que vayan en contra de esos valores», declaró la compañía en un comunicoado.

La denuncia fue hecha por una persona que trabaja en la tienda de Brisbane, en el departamento de reparaciones cuando vio a un técnico mirar el contenido del teléfono de un cliente: habla de más de 100 imágenes íntimas en primer plano.

Otro miembro del personal de Apple mencionó que el mismo tipo de cosa parece que ocurre también en la tienda de Sidney.

Apple reunió a todo el personal para informarle de la investigación y de los pasos que tomará para proteger la privacidad de sus clientes. Pero ya hay personas echadas.